Una oportunidad exprimida: Ale Marín llama a la puerta del Córdoba CF

La visita del Córdoba CF al Panadería Pulido de San Mateo quedará como una de esas curiosidades del paso de los blanquiverdes por Segunda RFEF, en la primera temporada que el equipo de la Vega de San Mateo competía más allá de las fronteras de las Islas Canarias. Un duelo que no pasará a los libros de historia por su calidad, pero que sí quedará marcado para un par de jugadores del conjunto cordobesista: Ale Marín y Rafa Castillo.

Ambos hicieron su estreno liguero con el primer equipo, pero fue Ale Marín el que brilló con luz propia, gracias a sus dos goles y las buenas maneras que demostró, confirmando lo que en las últimas dos temporadas ya ha dejado ver en el filial blanquiverde. Germán Crespo buscó en el extremo de Olivares chispa para la segunda parte de su equipo y Ale Marín le recogió el guante con dos goles en apenas 20 minutos. Un manual rápido de cómo aprovechar una oportunidad de llamar a la puerta del primer equipo.

Y es que Ale Marín no solo mejoró al Córdoba en ataque, también le dio esa mordiente que no mostró en los primeros 45 minutos. En su primer contacto con el balón, el joven atacante hizo el empate a uno con un derechazo que tocó en Samuel Yemoh antes de entrar en la meta de Hormiga, lo que por cierto llevó al árbitro Campoy Candela a anotar el tanto en propia puerta al jugador del Panadería Pulido, aunque la retransmisión televisiva dejó intuir que el cuero llevaba camino de gol antes del toque del jugador canario.

No contento con eso, Ale Marín volvió a ver puerta en su segunda ocasión, rentabilizando al máximo sus apariciones en el partido. De nuevo fue el más listo para cazar un balón suelto y batió a Hormiga con un trallazo de derecha. El de Olivares era consciente de que estaba ante su gran oportunidad para lucir en este final de temporada relajado que el primer equipo del Córdoba CF se ha ganado gracias a su enorme rendimiento.

Y es que para Ale Marín cada partido ahora es una ocasión para mostrar que es un jugador al que la Tercera RFEF se le queda pequeña. Este año, en el filial, ha hecho siete goles, convertido en el líder de un equipo que se quedó a un gol de pelear por el ascenso en la postemporada. El curso pasado fueron nueve los tantos que anotó con el segundo equipo cordobesista. Apurando su etapa de sub 23, lo que podría complicar su futuro en el club de El Arcángel, el de Olivares dejó claro en la Vega de San Mateo que tiene talento para seguir creciendo y alcanzar cotas mayores.

De momento, esta temporada ya quedará en su recuerdo, después de haber gozado de minutos en dos encuentros de la Copa RFEF y de participar también en el tramo final del duelo de Copa del Rey ante el Sevilla FC. Ahora, los duelos ante el Ceuta y el Vélez son dos oportunidades más para seguir mostrando su talento.

Rafa Castillo, otro cordobés debutante

Igualmente especial fue para Rafa Castillo el partido ante el Panadería Pulido San Mateo. El futbolista cordobés, otro de los talentos incipientes del filial, disputó los últimos 20 minutos del choque ante el conjunto canario. Lo hizo actuando de lateral derecho, posición en la que ha brillado en el filial gracias a su profundidad y valentía para irse al ataque.

Después de ser un habitual en los entrenamientos del primer equipo durante varios tramos de la temporada, Castillo tuvo por fin su oportunidad en partido oficial, pues antes había disputado varios amistosos a las órdenes de Germán Crespo. En su caso, la próxima temporada todavía seguirá siendo sub 23, lo que a buen seguro aprovechará el club para seguir puliendo a uno de esos jugadores que pueden llegar al primer equipo en el medio plazo.