España estrena su estrella en Córdoba ante Suiza

Las campeonas del Mundo lucirán la estrella que las acredita como tal este martes en Córdoba. Será el primer encuentro en territorio español desde que el pasado 20 de agosto el combinado nacional femenino derrotase a Inglaterra para alzarse con el mayor éxito de la historia del fútbol femenino español y confirmar que cuenta con su mejor generación de jugadoras. El partido en El Arcángel, además, tiene una especial importancia al tratarse de un duelo oficial y correspondiente a la Liga de Naciones Femenina, torneo en el que España busca, además del título, el billete hacia los Juegos Olímpicos de París 2024. El rival es el combinado de Suiza, que llega a Córdoba tras encajar una dolorosa derrota ante Italia y con el cartel de víctima propiciatoria para las chicas que entrena Montse Tomé.

Después de aquel brillante triunfo conseguido en Sídney, en cuya celebración ocurrieron los lamentables sucesos que han terminado por hacer implosionar a la Real Federación Española de Fútbol, las integrantes de la selección española femenina han liderado un decidido movimiento por el cambio en busca de alcanzar la igualdad efectiva en el fútbol español. Una lucha que ha tenido consecuencias importantes en la RFEF y que a punto estuvo de dar al traste con la llegada a Córdoba del grueso de esa selección que logró el título mundial.

Pese a las salidas de Luis Rubiales y Jorge Vilda, en las últimas semanas se ha hablado muy poco de fútbol y en el entorno de un equipo con objetivos deportivos importantes en el corto plazo, pero que está decidido también a conseguir transformaciones importantes en la sociedad que ayuden a mejorar las condiciones actuales y futuras de las deportistas de élite en España.

Todo ese terremoto amenazaba con llevarse por delante el buen momento en lo meramente deportivo que atraviesa España, pero una vez más las mujeres que componen esta generación han demostrado que están por encima de todo el revuelo con el que han tenido que lidiar. El triunfo en Gotemburgo ante Suecia, la actual número uno en el ranking FIFA, sirvió al combinado español para abrir la Liga de Naciones Femenina dando un golpe sobre la mesa al rival más directo por esa primera plaza y también para propiciar que se aparquen las polémicas del debate público y se hable de su excelente rendimiento en el césped.

Ahora, en Córdoba llega el turno de confirmar esas grandes sensaciones que el equipo español dejó la pasada semana en el estreno de Montse Tomé como seleccionadora. Una victoria ante Suiza en El Arcángel supondría dar un paso de gigante hacia ese primer puesto del Grupo 4 de la Liga de Naciones, donde también compiten Italia y la ya mencionada Suecia.

Liderar ese grupo al término de las seis jornadas de esta fase de clasificación significaría para España el paso a las semifinales de esta primera edición del torneo continental de selecciones, además de respaldar las opciones del combinado nacional de disputar los próximos Juegos Olímpicos de París 2024.

Para estar en esa cita olímpica, España necesita hacerse con uno de los dos billetes que están en juego en esta Liga de Naciones. En París estará Francia como anfitriona y dos equipos europeos más, por lo que España tendrá que alcanzar la final de esta competición para confirmar su presencia en los Juegos. En caso de que Francia llegue a esa última ronda, conquistar el tercer puesto también serviría para cumplir un objetivo importante para el fútbol femenino español.

Ante Suiza, España parte como clara favorita merced a su superioridad técnica y a su condición de local. El combinado helvético cayó ante Italia (0-1) en la jornada inaugural de la Liga de Naciones y el último precedente entre ambos equipos, que se dio precisamente en el pasado Mundial, habla bien a las claras de la diferencia de nivel existente. España aplastó por un contundente 1-5 a las suizas en los octavos de final de esa Copa del Mundo que acabaron alzando.

Un once inicial continuista

Ahora bien, más allá del ambiente triunfal y la confianza en doblegar a Suiza, bien haría España en no conceder nada a su rival y buscar acercarse a la versión que ofreció la pasada semana en la exigente visita a Suecia. La seleccionadora española, Montse Tomé, podría apostar por seguir la línea continuista que mostró ante Suecia, manteniendo gran parte del bloque que se ha consolidado en las últimas citas.

Cata Coll parece haberse ganado el sitio en la portería, mientras que en defensa parecen fijas las laterales Ona Batlle y Olga Carmona. Junto a Irene Paredes, la duda está en si la segunda central será María Méndez o Laia Alexandri. Por delante, el centro del campo es propiedad de Aitana Bonmatí, Alexia Putellas y Tere Abelleira. En ataque, Mariona Caldentey parece fija y todo apunta a que compartirá línea con Athenea del Castillo y Lucía García.

En El Arcángel se espera una entrada de excepción y muy cercana al lleno que supondría copar el aforo oficial de 21.822 espectadores que tiene el feudo blanquiverde. Un ambiente de lujo para recibir a las campeonas del Mundo.