Ferrer: "Os llevaré siempre en el corazón"

Minutos después de que el club anunciara en una nota oficial su destitución, Albert Ferrer decía adiós a la afición del Córdoba con un par de mensajes en su cuenta personal de Twitter. Apenas fueron un par de frases, pero lo suficiente para reflejar el enorme cariño que el técnico ha cogido a todo lo que rodea al cordobesismo en los ocho meses en los que ha estado aquí.

"Muchísimas gracias a la afición y a la ciudad de Córdoba por estos maravillosos meses. Dejo de ser vuestro entrenador, pero os llevaré siempre en el corazón. Disfrutad de este año en Primera que tanto ha costado. Albert", fue el mensaje emitido por el preparador barcelonés, que se marcha sin recibir un solo reproche de la grada y sintiéndose querido por una ciudad a la que ayudó a devolver al mapa futbolístico tras más de cuatro décadas en la sombra. Quizás por eso, no está descartado que hoy haya una rueda de prensa de despedida.

A Ferrer le costó ganarse el cariño de la grada al llegar como relevo de Pablo Villa, uno de los ídolos del cordobesismo desde su etapa como futbolista. Pero con el paso de las jornadas y, sobre todo, tras conseguir el ansiado ascenso en el Estadio de Gran Canaria, se ganó para siempre el corazón de los cordobeses. De hecho, él fue el más aclamado en la celebración que la ciudad vivió por todo lo alto un día más tarde.

Muestras de cariño que el entrenador no dudó en devolver en el trance más duro desde que decidió ser entrenador profesional. De hecho, es su primera destitución, dado que fue él mismo el que puso punto y final a su etapa en el Vitesse holandés, su única experiencia en los banquillos hasta la llegada a El Arcángel.