Oltra sigue en un Mallorca de locos

El entrenador mantiene el puesto gracias a que el consejo no se puso de acuerdo en el nombre de su sustituto

J. C. L.

18 de febrero 2014 - 05:02

José Luis Oltra seguirá siendo el entrenador del Mallorca tras una tarde de reuniones y decisiones que confirmaron al club balear como una casa de locos. El técnico, que el sábado se comió una pañolada monumental tras la derrota en casa ante el Hércules, tenía ayer los dos pies fuera del Iberostar Estadi, pero finalmente salvó la cabeza después de un día que acabó costándole el puesto... a Serra Ferrer, el principal valedor de su destitución.

Y todo porque el consejo de administración del club no alcanzara un acuerdo sobre su sustituto tras una reunión que se prolongó durante unas cuatro horas en las oficinas de Son Moix. Los dos máximo accionistas, Lorenzo Serra Ferrer y Utz Claassen, discreparon sobre quién debía sustituir a Oltra y pusieron sobre la mesa a dos entrenadores distintos como candidato ideal para llevar al Mallorca a Primera.

Serra Ferrer apostaba claramente por Lluís Carreras, que llevaba semanas sonando en la isla, mientras que Claassen quería a Miguel Ángel Nadal.

"Yo no sé si el señor Oltra es el mejor entrenador, pero sé que dos veces ha subido a Primera y sé que no voy a apoyar una sustitución de Oltra por un mini Oltra", declaró Claassen al finalizar la reunión.

Las palabras del empresario alemán tuvieron como consecuencia inmediata la dimisión de Serra Ferrer (a la sazón, vicepresidente del club) como director deportivo, lo que sólo viene a alimentar la crisis institucional en la que vive instalado el club desde hace meses ante la disparidad de criterios de sus consejeros.

Y mientras, el Mallorca ocupa la décima posición con 35 puntos. Suma nueve victorias, ocho empates y nueve derrotas, y con 41 tantos en contra es el segundo equipo más goleado tras el Hércules. Ése es el panorama de un club que descendió el pasado verano tras 16 temporadas en Primera División y que pretendía tener un cómodo aterrizaje en la Liga Adelante. Pero todos los planes han saltado por los aires.

LOBERA, OTRO EN PELIGRO

Sergio Lobera, el entrenador de Las Palmas, también seguirá en el cargo pese a la derrota (3-0) ante el Jaén, pero el técnico ya sabe que el club le busca sustituto. Por el momento tendrá crédito hasta el partido del sábado ante el Girona, pero una derrota ante los catalanes aceleraría su segura destitución.

Experimentado y de fuera de la isla. Así es el perfil que busca Las Palmas, que ya es el peor equipo del año 2014 en la Liga Adelante. El conjunto canario presenta los peores números de la categoría en las siete jornadas que se han disputado desde el pasado 4 de enero, con solo seis puntos sumados, uno menos que Hércules, Sabadell, Mirandés, Ponferradina y Mallorca. Su pobre bagaje es de una victoria, tres empates y tres derrotas. Además, los canarios han encadenado seis horas sin marcar un solo gol, ante Alavés (0-2), Eibar (1-0), Numancia (0-0) y Jaén (3-0).

LA BATALLA DE LA CORUÑA

Se preveía que el Deportivo-Sporting iba a estar calentito. La semana previa había venido con un puñado de declaraciones que fueron avivando el ambiente hasta que, como no podía ser de otra manera, se armó en las inmediaciones de Riazor antes del duelo.

Grupos de aficionados de ambos equipos se enzarzaron en una batalla campal en las proximidades del estadio con al menos 20 personas envueltas. Los ultras se lanzaron bengalas, botellas y todo lo que pillaron por la calle provocando momentos de tensión que se saldaron con cuatro detenidos y un herido leve.

No es la primera vez que esto ocurre entre seguidores del Dépor y el Sporting, ya que en los últimos años se han producido otros incidentes que se han saldado con varios detenidos.

La pelea llegó tras cruces de insultos en redes sociales y foros entre los grupos radicales de ambos equipos, los Riazor Blues y los Ultra Boys. Hasta La Coruña se desplazaron unos 7.000 aficionados del Sporting, la mayoría totalmente pacíficos y con ganas de animar a su equipo en un partido trascendental en la pelea por el ascenso a Primera, pero algunos aprovecharon el paso por Riazor para manchar la imagen de la mareona.

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