Renault aguarda la vuelta del 'hijo pródigo'

El retorno de Fernando Alonso, el hijo pródigo, al equipo Renault puede ser inminente. Una vez que el equipo francés fue absuelto de la acusación de espionaje sobre McLaren-Mercedes, el camino parece quedar libre.

Flavio Briatore, patrón de la escudería, espera con los brazos abiertos al español con la intención de reeditar los triunfos logrados en 2005 y 2006, cuando tanto el equipo como Alonso fueron campeones del mundo.

Ni siquiera la posibilidad de que la aparición de nuevas pruebas pudiera terminar condenando a Renault por espionaje frena la euforia de ver de nuevo vestido de azul al bicampeón mundial tras un año con el gris y el rojo de McLaren, que al final resultaron poco favorecedores.

En el olvido queda la mala temporada pasada de Renault, que no supo responder al cambio de Michelín por Bridgestone, convertido en proveedor único de neumáticos, ni a la pérdida de Alonso.

Pero la mala campaña de los bólidos franceses fue positivo de cara a 2008. A mitad de temporada, Briatore y los suyos se pusieron ya a desarrollar el nuevo coche.

"Tendremos un vehículo competitivo", aseguró Briatore, sabedor de que la relación entre Alonso y McLaren se iba a romper y que ése sería un buen argumento para convencerlo, sobre todo, por la imposibilidad de que el español fuera a Ferrari o BMW, los otros equipos punteros además de McLaren, pero con las puertas cerradas para 2008.

En noviembre, Briatore declaró a un rotativo italiano que "hice un proyecto de futuro incluyendo a Fernando. Si sus deseos coinciden con los nuestros, es posible".

Entonces, ¿por qué se retrasa tanto la decisión? Alonso quiere construir un coche competitivo y está midiendo muy bien cada paso antes de anunciar su decisión.

También se especuló con que el asturiano esperaba la absolución de Renault en el caso de espionaje, lo que se produjo el pasado jueves. Alonso podía temer que una alta sanción económica lastrara el desarrollo del nuevo bólido. De ser cierta esa afirmación, ya no habría obstáculos para el regreso.

O quizás sí. La duración del contrato podría ser otro de los temas de discusión a la hora de que el español negocie con Renault, Red Bull, Honda o Toyota, sus cuatro alternativas.

La negativa de Briatore y de Dieter Mateschitz, propietario de Red Bull, a firmar por un año tiene explicación, ya que ambos quieren evitar que Alonso intente saltar a Ferrari o BMW en 2009.

Briatore sigue manteniendo una buena relación con Alonso, que sabe que en Renault encontrará una familia.

La decisión parece inminente, pero nada está cerrado y Honda, también sería un equipo apetecible, por delante de las suculentas ofertas de Toyota y Red Bull. Pero ante el hermetismo de Alonso y su entorno, todo son aún conjeturas.