Alberto Murillo cumple diez años como árbitro de Liga Asobal

Córdoba/Alberto Murillo vivió este pasado martes un partido muy especial. El árbitro cordobés de balonmano pitó por primera vez en el presente curso un partido de la Liga Asobal y cumplió así un hito al alcanzar diez temporadas en dicha categoría. Consolidado como uno de los árbitros con más trayectoria del panorama nacional, Murillo trata ahora de regresar a la Asobal de manera fija junto al también cordobés Pablo García, su nueva pareja arbitral desde hace dos años.

Murillo pudo disfrutar este martes del encuentro que disputaron en El Sargal el Cuenca y el Guadalajara. Un partido atractivo y una pista con mucha solera en el mundo del balonmano para una ocasión especial. Y es que mucho ha llovido desde que este cordobés lograra consolidarse en la Liga Asobal, allá por el año 2015, cuando su trayectoria empezaba a alcanzar cotas importantes.

Alberto Murillo se estrenó en la Asobal incluso antes, pues lo hizo como árbitro asimilado en la temporada 2011-12, dirigiendo entonces un partido entre el Ademar León y el Huesca. Por entonces ya era uno de los árbitros llamados a dar el salto de categoría, pero al separarse de su pareja arbitral de aquel curso esa vía quedó cerrada de manera momentánea.

Sin embargo, no tardaría mucho en demostrar su valía para estar al nivel de la Liga Asobal. Fue en la temporada 2015-16, concretamente el 5 de septiembre de 2015, cuando se estrenó como árbitro de pleno derecho de Asobal, dirigiendo un partido entre el Benidorm y el Go Fit Sinfín. Junto al almeriense Sebastián Fernández, Murillo fue consolidándose al máximo nivel y dibujando una trayectoria que le ha llevado a dirigir un total de 124 partidos de liga, 13 de la Copa del Rey y dos de la fase de ascenso a la Asobal. Datos que hablan por sí solos de la solvencia del árbitro cordobés.

La pugna por volver a Asobal

Hace dos temporadas, Alberto Murillo vio como su trayectoria vivía un punto de inflexión al finalizar su etapa junto a Sebastián Fernández, que dio el paso de presentarse a la presidencia de la Federación Andaluza de Balonmano, cargo en el que precisamente ha sido reelegido hace unos días. Murillo pasó entonces a arbitrar junto al también cordobés Pablo García, asumiendo principalmente partidos de División de Honor Plata. Los colegiados cordobeses tuvieron la responsabilidad de pitar en el final del curso pasado la final por el ascenso a la máxima categoría entre el Burgos y el Villa de Aranda.

Mediada la actual temporada, las perspectivas para que Pablo García pueda consolidarse como árbitro de Liga Asobal son positivas, lo que permitiría también a Alberto Murillo regresar a la máxima categoría para seguir engradeciendo una trayectoria meritoria en el arbitraje nacional. Diez años de exigencia y metas cumplidas en la élite que le sirvieron para, entre otras cosas, ser reconocido en 2022 como uno de los mejor árbitros de la Liga Asobal por los propios clubes.