Shimizu, el hombre-gol blanquiverde

El Córdoba Patrimonio de la Humanidad ya puede presumir de hombre-gol. Kazuya Shimizu ha estrenado este jueves la elástica blanquiverde en un escenario idílico como el Patio de los Naranjos de la Mezquita-Catedral. Tras la incorporación de Daniel Fernández, es el segundo y, salvo sorpresa, último fichaje de la entidad cordobesista en el mercado de invierno, donde ha puesto los cimientos necesarios para continuar con firmeza en la pelea por la permanencia en Primera División.

Acompañado del presidente del club, José García Román, y tras una larga y difícil negociación que culminó con éxito el miércoles, Shimizu ha vivido su puesta de largo como jugador del Córdoba Patrimonio. El internacional japonés firma por lo que resta de temporada, más una opcional que ya tiene las condiciones pactadas y queda en manos de la institución, si bien el Sumida mantiene gran parte de sus derechos económicos, hasta el punto de imposibilitar cualquier traspaso a otro equipo nipón.

Después de la presentación a cargo de José Juan Jiménez Güeto, canónigo portavoz del Cabildo Catedral, en la que ha pedido "permanecer en la categoría con el pedazo de equipo que tenemos", el máximo mandatario del Córdoba Patrimonio ha mostrado su "gran satisfacción" por el enclave y por "poder presentar a un jugador de la talla de Shimizu, que va a reforzar nuestra plantilla con el objetivo de la permanencia".

A continuación ha sido el protagonista el que ha tomado la palabra, valiente y descarado a pesar de su aún escaso dominio del castellano. El nipón ha admitido que está "muy contento" de llegar al club cordobesista, al que quiere "ayudar y marcar muchos goles". "Creo que el equipo es muy agresivo, pero ahora necesita goles. Cuando pueda jugar, espero ayudar en esa faceta", ha insistido el jugador asiático.

"Este año es importantísimo para mí. Quiero ver el nivel de Primera División y luego jugar el Mundial, y por eso necesito este salto", ha comentado Shimizu, que pese a que considera que el nivel de la élite es "más alto" que el de Segunda, está "convencido de que puede marcar goles" y ser pieza clave en un Córdoba Patrimonio de la Humanidad que ya tiene hechos todos sus deberes del mercado invernal.