Julia Figueroa se viste de oro en el Grand Prix de Marrakech

Marrakech/Julia Figueroa ha conseguido su primer podio de la temporada aprovechando su participación en el Grand Prix de Marrakech. Y lo ha hecho con una medalla de oro que refuerza su trabajo ya con vistas al ciclo olímpico, que concluirá con los Juegos de Tokio de 2020. La judoca cordobesa ha firmado una actuación redonda con un epílogo soñado en el combate definitivo ante la rumana Ungureanu, a la que ha superado a falta de tres segundos.

Integrada dentro del Pool B de la categoría de -48 kilogramos, Figueroa tuvo que esperar al desenlace de la pelea entre la portuguesa María Siderot y la holandesa Amber Gersjes para conocer a su primera adversaria en la prueba marroquí. Y finalmente fue la lusa, que venció a la participante oranje por un ippon para alcanzar la segunda ronda del torneo.

Ahí acabó su aventura en la tercera gran cita internacional de la campaña. Porque Julia Figueroa se mostró superior, si bien sólo pudo sacar el billete para la siguiente ronda a falta de sólo 26 segundos por medio de un ippon. Con el primer paso dado, la cordobesa se encontró con la agradable sorpresa de la eliminación de la israelí Noa Minsker ante la francesa Blandine Pont, lo que le abría de par en par la puerta de las medallas dada su teórica superioridad.

Un hecho que quedó reafirmado donde toca, en el tatami. Porque el combate decisivo para alcanzar la lucha por las medallas fue el más plácido que tuvo Julia Figueroa en el transcurso de su concurso en el Grand Prix de Marrakech. La integrante del Valencia Terra i Mar superó también por ippon a la gala, a falta de 2:14 para la conclusión.

Confianza para un curso exigente

Con la tranquilidad de verse ya en una ronda definitiva por primera vez en la presente campaña, Figueroa quedó emparejada con la italiana Francesca Giorda, que dio la sorpresa en el Pool A al dejar en la cuneta a la principal favorita, la israelí Shina Rishony, por un ippon en el tramo final del combate. La cordobesa resolvió por la misma técnica su pelea con la transalpina, lo que le garantizaba pelear por el oro en la cita marroquí.

Ahí, su enemiga era una clásica de los certámenes internacionales, la rumana Mónica Ungureanu. En una lucha igualadísima, Julia Figueroa se apuntó finalmente el primer puesto gracias a un waza ari a falta de sólo tres segundos para la conclusión, poniendo así fin a una larga sequía y ganando confianza para el resto de un curso de lo más exigente.