El BCE vuelve a bajar los tipos de interés
La histórica decisión sitúa los tipos en el 2,5% tras la bajada de tres cuartos de punto · Trichet no descarta que la inflación siga bajando en 2009 · El Banco de Inglaterra reduce sus tipos en un punto, hasta dejarlos en el 2%.
El Banco Central Europeo (BCE) decidió reducir los tipos de interés de la zona euro en tres cuartos de punto, lo que representa el mayor recorte del precio del dinero adoptado jamás por la institución y que sitúa la tasa en el 2,5%, a niveles del segundo trimestre de 2006. El objetivo es hacer frente a la crisis económica y combatir la recesión en la que el bloque entró en el tercer trimestre, cuando el PIB de la eurozona se contrajo un 0,2%. Para el presidente del BCE no hay que descartar que la inflación siga bajando en 2009 gracias al abaratamiento de materias primas y el descenso de la demanda. La bajada del BCE ha sido más moderada que la realizada por el Banco de Inglaterra, que también decidió rebajar los tipos de interés en un punto porcentual, hasta situarlos en el 2%, su nivel más bajo en más de medio siglo.
El Banco Central ha cumplido con las expectativas y ha decidido bajar los tipos de interés de la zona euro en tres cuartos de punto, hasta el 2,5%. La institución presidida por Jean-Claude Trichet acumula con esta decisión tres recortes consecutivos en el precio del dinero que han llevado los tipos de interés desde el 4,25% a principios de octubre, hasta el 2,5% actual.
El primero se produjo el 8 de octubre en una acción coordinada, la primera de la historia, de los principales bancos emisores del mundo, entre ellos la Reserva Federal de EEUU y los bancos centrales de Inglaterra, Suiza, Suecia y Canadá. A la medida se sumó el banco de China, pero no el de Japón. La segunda bajada tuvo lugar un mes después, el 8 de noviembre, tal y como anunció días antes el presidente del BCE, Jean-Claude Trichet, en un almuerzo con empresarios españoles en Madrid.
La decisión del BCE busca reanimar la actividad económica en la zona euro y combatir la recesión en la que el bloque entró en el tercer trimestre, cuando el PIB de la eurozona se contrajo un 0,2%. Por su parte, la inflación de la zona euro registró en noviembre su cuarta bajada consecutiva y se situó en el 2,1% anual, 1,1 puntos por debajo del dato de octubre. Sin embargo, la tasa de desempleo aumentó una décima en octubre, hasta el 7,7% de la población activa, y cuatro más que en el mismo periodo del año anterior.
En rueda de prensa, el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean Claude Trichet, advirtió de que existen riesgos a la baja sobre el crecimiento de la economía de la eurozona y apuntó que las previsiones del BCE apuntan a un crecimiento de entre el 0,8% y el 1,2% en 2008, mientras que para 2009 estima un crecimiento nulo o una contracción del 0,9%. De este modo, las previsiones del BCE apuntan a un cierta recuperación del crecimiento económico de la zona euro a partir de 2010, para cuando pronostica un crecimiento de entre el 0,5% y el 1,5% en 2010.
El banquero francés señaló que los analistas del BCE habían revisado a la baja de manera "considerable" sus anteriores proyecciones ante la materialización de los riesgos para el crecimiento de la eurozona y la existencia de una incertidumbre "excepcionalmente elevada".
No obstante, el máximo responsable de la política monetaria de la zona euro hizo hincapié en que actualmente, ante el alivio de las presiones inflacionistas por el abaratamiento de las materias primas y el descenso de la actividad económica y de la demanda doméstica, la economía de la eurozona experimenta un proceso de desinflación, pero subrayó que, con los actuales datos, no considera que la economía del bloque se enfrente a un periodo deflacionista.
Respecto a la evolución de los precios, Trichet apuntó que no pueden descartarse nuevos descensos de la inflación en 2009 y señaló que las previsiones del BCE establecen un rango de entre el 3,2% y el 3,4% en 2008, mientras que para 2009 las estimaciones son de entre el 1,1% y el 1,7%. De cara a 2010, la inflación de la zona euro podría situarse entre el 1,5% y el 2,1%. Por otro lado, el presidente del BCE advirtió de la necesidad de que cada actor del mercado asuma sus responsabilidades y calificó como "crucial" que se mantenga la disciplina y una visión a medio plazo en materia fiscal.
"Los estabilizadores fiscales automáticos son relativamente grandes en la zona euro y proporcionan una poderosa fuente de apoyo fiscal para una economía débil. Allá donde exista margen de maniobra, podrían ser efectivas medidas presupuestarias adicionales siempre que sean oportunas, temporales y con un objetivo", dijo Trichet. "Tenemos una moneda única, pero no tenemos un presupuesto federal ni un gobierno federal, pero si tenemos el pacto de estabilidad", añadió.
Asimismo, el banquero francés reiteró la necesidad de comprobar la efectividad de los recientes recortes de tipos, puesto que el BCE ha reducido su tasa de referencia en 175 puntos básicos en menos de dos meses, y apuntó que la institución estará atenta a la evolución de los diferentes tipos de Euríbor, así como las decisiones de los bancos comerciales.
Rebaja de un punto en Inglaterra
El recorte del BCE se une al realizado por el Banco de Inglaterra, que ha rebajado en un punto porcentual los tipos de interés y los ha dejado en el 2%, el nivel más bajo desde el año 1951. En un intento por reactivar la economía, se trata del tercer recorte consecutivo de los tipos de interés, que hace tan sólo dos meses estaban en el 5%.
De este modo, la institución presidida por Mervyn King acumula tres recortes consecutivos en el precio del dinero, puesto que el pasado 8 de octubre recortó los tipos en medio punto en el marco de una acción concertada con el Banco Central Europeo, la Reserva Federal de EEUU, y los bancos centrales de Suiza, Suecia y Canadá, mientras que en la reunión del pasado 6 de noviembre decidió un drástico recorte de 150 puntos básicos.
"Los datos respecto a la actividad económica en Reino Unido se han debilitado aún más y sugieren que la desaceleración ha ganado ritmo. El gasto de los consumidores y las inversiones de las empresas se han paralizado, mientras que la inversión residencial continúa cayendo", indicó la entidad.
La decisión pretende hacer frente a la desaceleración económica del país. En concreto, la economía británica retrocedió medio punto porcentual en el tercer trimestre del año y deja al Reino Unido al borde de la recesión técnica.
También te puede interesar
Lo último
Encuentro de la Fundación Cajasol
Las Jornadas Cervantinas acercan el lado más desconocido de Cervantes en Castro del Río (Córdoba)