Análisis
Santiago Carbó
Tras un buen año en lo macroeconómico, en 2025 hará falta mucho más
SEVILLA/La multinacional sevillana de ingeniería Ghenova cerró en 2019 su segundo ejercicio consecutivo en el que la cifra de negocio marca un récord. La facturación del grupo que preside Carlos Alejo, superó a los 27 millones de euros, según confirmó a este diario su CEO, Francisco Cuervas. El beneficio aún está pendiente de culminar la auditoría.
Esa cifra de negocio supone un crecimiento del 12,5% respecto a los números hechos en 2018, cuando superó los 24 millones de euros y fijó un récord creciendo un 5% en relación a 2017.
El ejercicio de 2019, por tanto, no sólo fija un nuevo máximo, sino que proporcionalmente supone crecer más del doble de lo que lo hizo un año antes. “El año ha sido muy bueno”, admite Cuervas, que trabaja para que la compañía se mantenga en esa senda de expansión. “Queremos mantener la tensión de crecimiento, y por eso para este 2020 estimamos que podríamos facturar más de 30 millones y contratar por encima de los 35 millones”.
Ciertamente, la cartera de contratación que estaba cerrada a final del ejercicio pasado, cifrada en 30 millones, asegura que la plantilla de más de 500 personas –unos cien más que en 2018– que tiene ahora mismo tenga carga de trabajo garantizada para todo el primer semestre de 2019. Con esa previsión, el cálculo que hace el directivo es que el empleo también crecerá este año en otras cien personas: “Esperamos que a final de 2020 la plantilla esté por encima de los 600 empleados”.
Ghenova es líder de ingeniería naval en el mercado hispanohablante y al analizar el crecimiento del negocio por actividad queda patente esa posición, aunque la apuesta hecha ya en ejercicios anteriores por la diversificación sigue dando sus frutos. En 2019 han trabajado en 160 proyectos activos para más de 80 clientes.
Con todo, la ingeniería naval sigue representado más del 50% de la cifra de negocio, aunque las energías renovables están creciendo intensamente, con proyectos eólicos, fotovoltaicos o de aprovechamiento energético de residuos.
La línea de negocio naval, tanto militar como civil, tiene como clientes de referencia, respectivamente, a Navantia y a los astilleros que trabajan para las principales compañías navieras de cruceros, que es un segmento que está en auge.
En el ámbito militar, Ghenova está culminado sus encargos relacionados con el portahelicópteros para Turquía y trabaja en los relacionados con las corbetas contratadas por Arabia Saudí. Además, está pendiente del nuevo programa estrella de Navantia, la fragata F110, así como del proyecto del submarino S80.
Ghenova está también avanzando en ganar mercado en ingeniería Off Shore, que está ganando mucha cuota con la eólica marina.
En energía también espera seguir creciendo. Esa apuesta llevó a abrir una delegación en Madrid, por ubicar el mayor mercado de este negocio y un ecosistema de profesionales más numeroso.
Y es que la expansión de Ghenova también tiene reflejo territorial. En 2019 abrieron no sólo en Madrid, también se constituyó la filial en Australia, que consideran un mercado emergente tanto en naval como en energía. También baraja recuperar la delegación en Cartagena, donde Navantia Sistema tiene sede.
En un mes abrirán otra subsidiaria, será el 26 de marzo en Colombia, con una clara apuesta por ser locales en los mercados internacionales. Para ello, explica Cuervas, la compañía capta ingenieros de cada país y los forma, en la mayoría de los casos con una etapa en la sede central de Sevilla.
Para este ejercicio, la empresa no sólo se plantea un nivel similar de crecimiento orgánico, sino que admite que trabaja en alguna compra para que sea también inorgánico. La ciberseguridad y la inteligencia artificial y la actividad de mantenimiento y de soporte son los sectores en los que se plantea comprar parte del capital de alguna compañía para provocar sinergias y crecimiento mutuo, como ocurrió con la compra del 50% de lo que hoy es Soologic.
Las exigencias del mercado de la ingeniería actual hacen que Ghenova tenga en la digitalización del negocio propio una de sus prioridades. La necesidad de crear gemelos digitales impulsa buena parte de ese esfuerzo, dado que permiten simular en tiempo real el funcionamiento de una planta energética o un buque y anticiparse en detectar problemas y en la labor de mantenimiento.
También te puede interesar
Lo último
No hay comentarios