IU hará “autocrítica” pero califica de “muy bueno" su resultado electoral en Córdoba

Con la resaca electoral aún presente y el desconcierto de un batacazo histórico en Córdoba capital, el responsable de Organización de IU, Sebastián Pérez, realizó ayer una “valoración muy positiva” de los resultados de la coalición de izquierdas “a nivel provincial”, al considerar que han sido “de los mejores de España” y que “reafirman la fuerza” que tienen en Córdoba. Aquí, de Montalbán a Almodóvar del Río, de Nueva Carteya a Pedro Abad, serán “garantía de gobiernos de izquierdas” y “freno de las posiciones neofascistas y franquistas”.

Pérez ha lamanteado que estas políticas “neoliberales” y de “extrema derecha” son las que “abiertamente tenemos ya en algunas instituciones, como el Parlamento andaluz”, o como auguró que ocurrirá, con un posible pacto de gobierno entre dichos partidos y Vox, en el Ayuntamiento de Córdoba.

Así, y más allá de los “malos” resultados obtenidos en la capital al perder uno de sus cuatro ediles, como reconoció, Pérez destacó que los resultados que han logrado en la provincial los sitúan “en los mismos números de hace cuatro años en porcentaje de voto”. Y, además, presumió de que han “doblado” el número de mayorías absolutas, al pasar de cinco a diez. Además, han pasado de tres a cinco diputados provinciales, logrados por los partidos judiciales de Córdoba (dos), Montilla, Aguilar de la Frontera y Posadas.

En Córdoba están “satisfechos, porque el resultado a nivel provincial ha sido muy bueno”, ya que, “donde ha gobernado IU en estos años ha demostrado que es un proyecto solvente, que defiende los intereses de los vecinos y garantiza los servicios públicos”.

Sí se mostró más cauto al evaluar un posible acuerdo global con el PSOE, como el lunes propuso el secretario de Organización socialista, Antonio Ruiz. Pérez se limitió a decir que IU será “garantía de gobiernos de izquierdas”, pues ya lo fueron “hace cuatro años” y ahora lo volverán “a ser”, a la vez que serán “freno a las políticas de derechas y de la extrema derecha”. También fue cauto al abordar la situación de IU en la capital. Insistió en que harán “autocrítica”, pero evitó hablar de tomar responsabilidades políticas.