El PP de Puente Genil avisa de que no permitirle gobernar sería "una traición a la voz del pueblo"

Los resultados de las elecciones municipales en Puente Genil dejan un panorama incierto de cara a la composición de la nueva corporación municipal. El escrutinio otorga nueve concejales al PP de Sergio Velasco que, de esta forma, protagoniza unos resultados históricos al ser la primera vez que los populares ganan unos comicios locales.

Sin embargo, la victoria no garantiza aritméticamente la Alcaldía, por lo que la duda está en saber si PSOE e IU -entre los dos suman los 11 concejales que conforman la mayoría absoluta- van a ser capaces de alcanzar un acuerdo de gobierno que, en caso de materializarse, permitiría a los socialistas mantener la posición de privilegio en el Ayuntamiento.

La ecuación es compleja, porque, más allá de las siglas, ambos partidos han protagonizado numerosos desencuentros a lo largo de los últimos años. Jesús David Sánchez, el candidato de IU, ha abanderado una oposición fiscalizadora y rigurosa y se ha mostrado muy crítico con la gestión de Esteban Morales, que no ha encontrado precisamente en IU un aliado durante sus 12 años de gobierno, sino más bien un azote constante y persistente hacia su toma de decisiones. Por eso, el entendimiento se antoja verdaderamente complicado.

Tras perder tres concejales al pasar de diez a siete, Morales ha salido relativamente airoso del envite. El PSOE se ha mantenido con fortaleza y ha acaparado el voto de la izquierda al que aspiraba Sánchez, cuyo objetivo era recoger ese desencanto del votante progresista con el actual alcalde. Por ello, tras perder un concejal, al caer de cinco a cuatro, Izquierda Unida tiene ahora que escoger entre dos escenarios.

Uno sería olvidar diferencias y rencillas históricas con el PSOE teniendo la oportunidad de volver a ser fuerza de gobierno, algo que no ocurre desde hace más de una década. Y, el otro, ser consecuente con su línea de actuación, dando carpetazo a esta posibilidad, lo que en la práctica facilitaría el cambio y la alternancia política en la localidad. Realmente, ambas opciones suponen un dilema para Sánchez, que ya en la noche electoral dijo que su cargo estaba a disposición de la militancia para lo que esta decidiera. En ese contexto, parece que, previsiblemente, será la militancia de IU la que, en asamblea, decida su postura y, con ello, quién será el próximo alcalde.

En este contexto, el ganador de los comicios, Sergio Velasco, ha avanzado que su intención es la de gobernar, al ser el PP el partido más votado. El candidato popular ha dado las gracias por el apoyo masivo a su candidatura y también ha lanzado un aviso a navegantes: si Manuel Baena en 2007 con ocho concejales y Esteban Morales en 2011 con nueve tuvieron la oportunidad de gobernar con mayoría relativa, no dejarlo a él ahora con nueve ediles, sería "una traición a la voz del pueblo". "Puente Genil ha hablado con claridad y espero que nos dejen gobernar en solitario, que es lo que nosotros creemos que debe suceder atendiendo a lo expresado en las urnas”, afirmó el alcaldable popular tras hacerse definitivos los resultados.

Morales, abierto a explorar un pacto con IU

Por su parte, Morales ha abierto la puerta a explorar un posible pacto con IU "al no tener el PP la mayoría absoluta”, pero también ha dejado claro que “si no existe esa posibilidad, evidentemente será la fuerza más votada la que gobierne en Puente Genil”.

Mientras tanto, Sánchez ha admitido que “a nivel interno tenemos que reflexionar mucho”, si bien lanzó un dardo a Morales asegurando que también él “tiene que reflexionar por haber dado un balón de oxígeno a la derecha, metiendo en el gobierno a Ciudadanos y pactando presupuestos, privatizaciones y externalizaciones con el PP”. “IU es un partido coherente, nuestro pacto es con los votantes, y nadie suma en solitario sin nosotros”, afirmó Sánchez.

Por último, quien parece ajeno a la incógnita de la lucha por la Alcaldía es Vox, que celebró por todo lo alto que su candidata Toñi Gallardo obtuviera acta de concejal. A diferencia de lo que ocurrió con Cs hace cuatro años, en esta ocasión Vox no es llave para el gobierno municipal, pero Gallardo ya ha adelantado que su objetivo es “trabajar por mejorar Puente Genil y así lo vamos a hacer durante los próximos cuatro años”.