Bruselas se muestra "muy preocupada" por el uso de balas de goma en Ceuta

Madrid/La comisaria de Interior, Cecilia Malmström, se ha declarado este viernes "muy preocupada" por el uso de balas de goma por parte de la Guardia Civil la semana pasada para evitar que inmigrantes irregulares entraran en Ceuta a nado desde Marruecos y ha reclamado explicaciones a las autoridades españolas por este "grave asunto". "Muy preocupada por el hecho de que la policía fronteriza española utilice balas de goma para disuadir a los inmigrantes en Ceuta", ha escrito Malmström en su cuenta de Twitter. "Espero aclaraciones de las autoridades"", ha agregado.

El portavoz de Interior, Michele Cercone, ha avisado posteriormente de que "la Comisión se reserva el derecho de dar los pasos adecuados cuando haya pruebas de que un Estado miembro haya vulnerado la legislación de la UE". El Ejecutivo comunitario considera que "las autoridades españolas tienen la responsabilidad de investigar las circunstancias de este particular incidente en Ceuta". "La Comisión pedirá explicaciones a las autoridades españolas sobre estos acontecimientos a medida que continúan desarrollándose", ha indicado Cercone.

Bruselas ha exigido además a España que "garantice el pleno respeto de los derechos fundamentales en su cooperación con Marruecos". El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, confirmó este jueves en el Congreso que la Guardia Civil destacada en Ceuta disparó material antidisturbios al agua durante el intento de entrada en España de un grupo de inmigrantes en el que murieron al menos 11 personas el pasado jueves, pero ha asegurado que "no hay relación causa efecto" entre esta práctica y las muertes.

Pese a admitir que la gestión de las fronteras exteriores es responsabilidad de los Estados miembros, la Comisión ha resaltado que "cualquier medida de vigilancia fronteriza debe ser proporcionada a los objetivos perseguidos y debe respetar los derechos humanos, el principio de no devolución y la dignidad humana". La comisaria de Interior ya chocó a finales del año pasado con Fernández Díaz a cuenta de la instalación de cuchillas en la valla fronteriza de Ceuta. Aunque admitió que las concertinas no vulneran el derecho de la UE, sostuvo que no son eficaces porque no frenan la entrada de inmigrantes sino que les hacen llegar con más heridas y apostó por medidas alternativas.

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha reconocido este viernes "deficiencias" en la aplicación de la Ley de Extranjería en el caso de Ceuta, donde al menos doce personas perecieron intentando llegar a nado a España el pasado jueves y donde los 23 inmigrantes que sí alcanzaron la playa fueron devueltos sobre la marcha a Marruecos. Según ha señalado en rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, "se está aplicando la Ley de Extranjería, que en este punto tiene alguna deficiencia en su aplicación, pero se ha venido haciendo la aplicación del sistema del modo similar desde el año 2005, es decir que se están siguiendo los mismos criterios de actuación".

Con todo, ha señalado que el ministerio del Interior "está analizando no sólo la tragedia en sí, sino cuantas medidas puedan adoptarse para garantizar tanto la seguridad de las fronteras, como la adecuación de la regulación de las mismas y los procedimientos a las normas a las que España está obligada y especialmente, en el seno de la Unión Europea". Jorge Fernández Díaz justificó que se devolviera a Marruecos a los 23 inmigrantes sin el preceptivo procedimiento administrativo por un "concepto operativo" de aplicación de la legislación en Ceuta: se "retrotrae" a la costa la línea imaginaria que separa las aguas marroquíes de las españolas, la delimita con agentes de la Guardia Civil y establece que mientras el cordón policial no se supere no se ha entrado en España. Basándose en ello, devuelve a los que han llegado a la costa como si no hubieran entrado en el país.

El Gobierno reconoce "deficiencias" en la aplicación de la Ley de Extranjería en Ceuta

La vicepresidenta ha eludido contestar a las preguntas directas sobre la destitución o cese del director General de la Guardia Civil, quien dijo que no se habían disparado materiales antidisturbios hacia el agua y que fue desmentido después en sede parlamentaria por el ministro del Interior. Así, se ha limitado a afirmar que "la comparecencia del ministro se efectuó ya teniendo todos los elementos de juicio necesarios que probablemente no se tenían en las primeras informaciones", que las declaraciones "en los primeros momentos siempre son parciales y no completas" y que, en todo caso, el hecho de que Fernández Díaz acudiese tan pronto como permitía el calendario del Congreso es "un ejercicio de transparencia". "El ministro del Interior dio explicación de los hechos cuando tenía un informe exhaustivo. Las anteriores declaraciones fueron siempre parciales y sobre informaciones parciales (...) Se han dado esas informaciones y creo que es una muestra de transparencia una comparecencia que se efectuó en el primer día en que era posible comparecer".

Precisamente preguntada por esta "transparencia" en relación a que la Guardia Civil no haya difundido la grabación completa de los incidentes que tomaron las cámaras de seguridad del perímetro fronterizo, Sáenz de Santamaría ha dicho que no conoce el asunto. "Sobre los vídeos, desconozco los que hay y los que pueda haber", ha sentenciado. También se ha remitido a la comparecencia del ministro cuando se le ha interpelado sobre su opinión acerca del uso de pelotas de goma contra inmigrantes que se encuentran en el mar. "El propio ministro destacó y demostró que los agentes actuaron con proporcionalidad, respetando los derechos fundamentales", ha señalado. "El ministro del Interior dio una información completa de lo que allí había pasado. Me remito a esa comparecencia, a los elementos que allí el ministro ha formulado sobre las circunstancias que se produjeron tanto en la frontera terrestre como en el ámbito marítimo y sobre todo, quiero destacar que el Gobierno ha dado una información completa cuando la ha tenido", ha zanjado.

Soraya Rodríguez ve la política de Interior en Ceuta y Melilla como "una verdadera equivocación e improvisación"

La portavoz del Grupo Socialista en el Congreso, Soraya Rodríguez, ha calificado este viernes la política del Ministerio de Interior, con respecto a Ceuta y Melilla, "toda ella" como "una verdadera equivocación e improvisación", y ha recalcado que "lo primero" que debe hacer el ministro Jorge Fernández Díaz es cesar al director de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, y al delegado del Gobierno en Ceuta, Francisco Antonio González. En declaraciones a los medios durante una visita a una escuela infantil en Vigo, Rodríguez ha recordado que el propio ministro desveló en su comparecencia "datos gravísimos", como la utilización de material antidisturbios o el lanzamiento de pelotas de goma cuando, el pasado jueves, un grupo de inmigrantes intentaba entrar en territorio español y se produjo el fallecimiento de, al menos, 13 personas.

Soraya Rodríguez ha recordado que el PSOE pide la dimisión del director general de la Guardia Civil y del delegado del Gobierno en Ceuta, y ha aseverado que "el ministro esta tardando ya, si no ha firmado en su despacho esos ceses". La portavoz socialista ha lamentado que la política de "improvisación" del Ministerio del Interior tiene "consecuencias lamentablemente terribles" para las personas que quieren llegar a España, y se ha referido también a otras decisiones del Gobierno, como "volver a colocar las cuchillas".

Rodríguez ha insistido en que Interior tiene que hacer una "rectificación inmediata", y que los hechos ocurridos deben hacer reflexionar "sobre la permanencia del ministro". En cualquier caso, ha reiterado, "lo primero" es el cese de Fernández de Mesa y Francisco Antonio González. Según la portavoz del Grupo Socialista, si el ministro no cesa a estos dos cargos "da una prueba de que va a seguir por este camino, y eso es muy terrible, es una política que cuesta mucho sufrimiento".