Miles de indignados toman el centro de Madrid
Responden al desmantelamiento de las acampadas de la Puerta del Sol y el Paseo del Prado, que el 15-M achaca a la visita del Papa a Madrid.
Ni una manifestación, ni una sentada, ni una acampada; esta vez, la cita era para un "paseo por Sol". Era la respuesta de los indignados al desalojo de los resquicios de la acampada del 15-M en la madrileña Puerta del Sol y en el Paseo del Prado. Sin embargo, el Ejecutivo impidió el retorno del movimiento a su buque insignia. El paseo estaba convocado para las 20:00 . A las 18:30, los trenes de Metro y Cercanías dejaron de hacer parada en la estación de la plaza y, una hora más tarde, un despliegue policial bloqueó los accesos a pie y cortó la carretera. Miles de indignados se agolparon en los alrededores al grito de: "La calle es mía, no de la Policía". Sobre las 21:00, optaron por una ruta alternativa y cortaron la Gran Vía, en dirección al Congreso de los Diputados.
La respuesta de los indignados al desalojo que se produjo a primera hora de la mañana fue una convocatoria de un "paseo por Sol" que se hizo pública a través de un comunicado en la web y se hizo eco en las redes sociales. Sin embargo, el Ejecutivo impidió su llegada a la plaza. Por orden de la Delegación del Gobierno, los trenes de Metro y Cercanías dejaron de hacer parada en la estación de Sol. A las 19:30, la Policía bloqueó todos los accesos a pie y cortó la carretera. Comenzó pidiendo el DNI y dejando fuera a quienes fueran sospechosos de formar parte del 'paseo' y acabó cerrando el paso a toda la ciudadanía, incluso a los vecinos de la zona.
Miles de indignados se agolparon en las calles aledañas al grito de: "La calle es mía, no de la Policía". Luego, optaron por un paseo alternativo y, sobre las 21:00, cortaron la Gran Vía, en dirección a Cibeles. Todo se improvisó a través de mensajes en las redes sociales.
Los agentes esperaban al movimiento en la plaza de la diosa y los manifestantes propusieron nuevas direcciones, hacia Neptuno o el propio Congreso de los Diputados. Al final, la concentración se desplazó hasta los aledaños de la Cámara Baja.
Desalojo "tranquilo y pacífico"
A primera hora de la mañana, agentes de la Policía han desalojado a los indignados que permanecían acampados en la Puerta del Sol y el Paseo del Prado, dando fin de este modo a la protesta iniciada por el movimiento 15-M hace ya dos meses y medio. Tras la intervención policial, los indignados se han reagrupado en los centros sociales y casas okupas de Madrid y desde allí prepararon la convocatoria de repulsa para tarde.
Fuentes de la Jefatura Superior de Policía han informado de que la intervención policial se ha desarrollado de forma tranquila, una versión no compartida por algunos de los indignados. "Han dado patadas a las tiendas, no nos han dejado coger nada y se han llevado muchas de nuestras cosas; nos han obligado a caminar hacia Atocha sin dejar pararnos y amenazándonos con la porra", ha dicho José, que ha perdido su mochila, su tienda y sus zapatillas en el Paseo del Prado.
Según José y Goyo, dos chicos de 20 años que llevaban una semana durmiendo frente al Ministerio de Sanidad en el Paseo del Prado, centenares de policías "muy agresivos" han aparecido a las 06:00 y algunos han aplastado sus tiendas a patadas. En la Puerta del Sol, el puesto de información que el 15-M mantenía desde que se levantó el campamento el pasado 12 de junio ha sido desmantelado tras desalojar a unos 30 indignados.
El otro grupo de acampados permanecía en la mediana del Paseo del Prado desde el sábado 23 julio, tras llegar a Madrid la denominada Marcha Popular Indignada, que había partido a finales de junio desde Galicia, Murcia, País Vasco, Cataluña, Andalucía, Extremadura y Valencia.
Operarios de los servicios municipales de limpieza han retirado 26.940 kilogramos de residuos tras los desalojos, según fuentes del Ayuntamiento de Madrid. Fuentes de la Jefatura Superior de Policía han manifestado que el dispositivo integrado por agentes de la Policía Nacional y Municipal fue el adecuado para la actuación, de acuerdo con los principios de congruencia, oportunidad y proporcionalidad establecidos en la Ley Orgánica de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
El portavoz de Izquierda Unida (IU) en el Congreso, Gaspar Llamazares, ha lamentado que se hayan hecho los desalojos "sin previo aviso, por sorpresa y con nocturnidad" y ha criticado el diferente trato que las Administraciones Públicas han dado al 15-M y a la JMJ. También ha lamentado que la operación policial se haya presentado "como si fuera un tema de orden público, con la excusa de la salubridad, repitiendo los esquemas y los pretextos que ya se utilizaron en el desalojo de los acampados en Barcelona".
El líder de los socialistas madrileños y portavoz en la Asamblea regional, Tomás Gómez, ha mantenido su apoyo al sector del movimiento del 15-M que "exige un nuevo orden económico y social" y ha opinado que este movimiento no debe "limitarse a un asentamiento". "El movimiento representa una idea, el diagnóstico de una realidad, una reivindicación y una demanda social a futuro, y esa es la parte con la que yo simpatizo, la que ha hecho reflexionar a las instituciones", ha explicado Gómez.
Por su parte, el portavoz del PP en la Asamblea de Madrid, Iñigo Henríquez de Luna, ha señalado que "la policía tarda, pero finalmente hace su trabajo", y que el movimiento 15-M "ha tenido tiempo más que suficiente para plantear sus reivindicaciones". Lo que este colectivo no puede pretender, ha criticado, es "acampar en el espacio público por tiempo indefinido", ya que esto "afecta a la imagen de Madrid y perjudica el turismo".
También te puede interesar
Lo último
Tribuna Económica
Joaquín Aurioles
Inventarios de diciembre (4). Desigualdad
Opinión
Carlos Navarro Antolín
El Rey brilla al defender lo obvio
Editorial
Rey, hombre de Estado y sentido común
Envío
Rafael Sánchez Saus
Luz sobre la pandemia