Rubalcaba asegura que habría ganado "de calle" a Chacón en unas primarias

El candidato socialista a la Presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, aseguró ayer que nunca pidió que no se celebraran primarias en el PSOE para elegir al sucesor de José Luis Rodríguez Zapatero y se mostró convencido de que, de haberlas habido, "las hubiera ganado de calle".

Rubalcaba salió además al paso, en una entrevista en Onda Cero, de la polémica suscitada tras autoproclamarse líder del PSOE sin previamente ser designado como tal en un Congreso Federal subrayando que "en democracia el líder es aquel para el que se piden los votos".

También reconoció que se siente "corresponsable" de la herencia que deja el Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero, tanto en sus "aciertos" como sus "errores", y resaltó que no va intentar hacer que la gente se olvide de que ha estado sentado unos años en la mesa del Gobierno "porque estaba dentro" y que, por tanto, no tiene "ningún inconveniente en aceptarlo".

De cara a las próximas elecciones, confesó que no le preocupa que la política antiterrorista sea un tema de campaña porque entiende que, si de algo puede dar "cumplida respuesta", es sobre este asunto, del que ha sido responsable los últimos años. "Yo soy el responsable de una Policía y de una Guardia Civil que detuvo a casi 800 presuntos etarras en unos años y que ha llevado a ETA a la peor situación en la que ha estado nunca, probablemente a su final", sentenció.

Preguntado sobre si se puede hablar con los terroristas de política, Rubalcaba dijo que no se deberá aunque, a renglón seguido, recalcó que "todos los estados han hablado en algún momento con los terroristas", el último el de Gran Bretaña. "También en España los gobiernos lo han intentado: lo intentó Felipe González, lo intentó Aznar y lo intentamos nosotros", recordó.

Mientras tanto, el PP sigue alargando la sombra de Rubalcaba y afirma que la decisión del PRC de presentarse a las elecciones generales por primera vez desde 1983 responde a "una estrategia" del candidato socialista, que, a su juicio, utiliza al líder regionalista cántabro, Miguel Ángel Revilla, como a "un peón más". "Toda esta operación es una estrategia de Rubalcaba para tener puntuales aliados con los que pactar la continuidad del PSOE en el Gobierno de España en el caso de que nuestro partido no consiga la mayoría absoluta", aseguró el portavoz del PP en el Parlamento de Cantabria, Eduardo Van den Eynde.