Las últimas cinco víctimas, enterradas sin identidad
La historia vital de los inmigrantes ahogados en la costa ceutí nunca se sabrá. No trascenderá por qué dejaron atrás su casa, su familia y su país en busca del sueño europeo, truncado para siempre tras la tragedia de Ceuta. Se desconoce por completo quiénes eran estas personas.
Los cinco inmigrantes ahogados cuyos cadáveres fueron hallados durante los últimos días, después de que la marea escupiera los cuerpos, eran jóvenes de entre 20 y 30 años. No portaban documentación alguna y su estado no ha permitido su identificación por lo que han sido enterrados sin ninguna identidad posible.
Según fuentes de la Guardia Civil, las autopsias revelaron que todos ellos fallecieron por asfixia por inmersión, durante la avalancha de más de 250 inmigrantes que se produjo el pasado día 6 en aguas marroquíes, en la que murieron al menos 15 personas. Hasta la fecha se han recuperado cinco cuerpos sin vida en suelo o aguas jurisdiccionales españolas y una decena al otro lado de la frontera, nueve el mismo día de los sucesos y otro el viernes pasado.
Los cadáveres fueron enterrados en el cementerio católico de Santa Catalina, en una de las galerías del camposanto ceutí. El Ayuntamiento de Ceuta, al igual que en los tres casos anteriores de inmigrantes fallecidos, corrió con los gastos del enterramiento de estas dos personas.
Al desconocer su identidad y no saber tampoco la religión que profesaban se optó por enterrarlos en Santa Catalina. En la ciudad se han producido varios enterramientos de inmigrantes en el cementerio de Sidi Embarek, cuando se tenía constancia de que el fallecido profesaba el islamismo.
La asociación Elín, entidad en defensa de los derechos de los inmigrantes, estuvo presente presente en el enterramiento y reclamó una política migratoria "más abierta". Asimismo, pidió la indentificación de los cuerpos por la dignidad de las víctimas y por el descanso de sus familias. El estado de los cadáveres después de días sumergidos en el agua ha impedido que se les pueda reconocer a través de sus rasgos faciales, aunque van a intentar que se pueda identificar a las víctimas por las prendas que vestían y a las que se les hará fotografías.
También te puede interesar
Lo último