Los sistemas inteligentes de transporte pueden evitar la mayor parte de las salidas de la carretera

Un estudio realizado por el Instituto de Tráfico y Seguridad Vial (INTRAS) de la Universitat de València, que analiza las salidas de vía, sus causas y las posibilidades de prevenirlas mediante la implantación y uso de Sistemas Inteligentes de Transporte (ITS), ha desvelado que estos pueden intervenir positivamente en el 49,5 por ciento de los siniestros por salida de vía, incrementándose este potencial al 59,7 por ciento en siniestros graves y mortales.

Los ITS son sistemas de seguridad activa situados en la vías -aforadores, cámaras, radares y demás dispositivos instalados en las carreteras como las señales dinámicas- que, con su instalación, puede incidir significativamente en estos accidentes.

Según el doctor José Ignacio Lijarcio, investigador del INTRAS y responsable del estudio de la Universitat de València, “esta investigación es pionera en España, y su difusión es fundamental para que los agentes que intervienen en la movilidad comprendan mejor las circunstancias que confluyen en los siniestros por salidas de la vía, y puedan aportar soluciones concretas para reducirlos “.

El tipo de accidente más grave

Las estadísticas acreditan que la salida de la vía sigue siendo con gran diferencia el tipo de siniestro más grave, produciéndose en ellas un 36 por ciento de los fallecidos. Son, por otro lado, una parte significativa de los siniestros que se producen en vías interurbanas, con una frecuencia anual de aproximadamente 12.000, resultando en unos 500 fallecidos y más de 1.500 heridos graves.

Constituyen el 33,5 por ciento de los accidentes en vías interurbanas y presentan un nivel de letalidad alto: el 3,9 por ciento. Se producen, por tanto, más víctimas mortales que en otros siniestros y, particularmente, tienen mayor incidencia de heridos graves, especialmente en carreteras convencionales de calzada única y se producen en mayor medida en condiciones de baja visibilidad o climatología desfavorable.

Algo más de la mitad de estos accidentes ocurren en curvas, aunque el estudio evidencia, con una ligera diferencia a su favor frente a las rectas, zonas en las que se producen un 47,5 por ciento de los siniestros.

El estudio ‘‘Prevención de las salidas de vía mediante Sistemas de Transporte Inteligente (ITS). Soluciones para reducir la siniestralidad’’, basándose en los datos de la Dirección General de Tráfico (DGT) entre 2017 y 2023, y evaluando el potencial de los ITS para mitigar estos incidentes revela que, además de que pueden intervenir en casi la mitad de las salida de vía, y alcanzar a casi seis de cada diez en el caso de los accidentes más graves, también la velocidad excesiva -o la falta de adecuación a las condiciones de visibilidad y climáticas- está presente en un 72,1 por ciento de estos siniestros.

De este modo, se llega a la conclusión de que las inversiones en ITS son un buen aliado para conseguir los objetivos de reducción de siniestralidad del decenio que plantea la Dirección General de Tráfico.

Medidas para reducir la salida de las vías

Según el INTRAS de la Universitat de Valencia las recomendaciones para reducir la siniestralidad vial serían su instalación en vías de riesgo de siniestralidad por salida de vía, especialmente en carreteras convencionales y tramos con situaciones de riesgo (baja visibilidad, curvas pronunciadas, etc.); el fomento del empleo de señales dinámicas, advertencias de presencia de hielo o condiciones adversas y radares vinculados a límites de velocidad ajustables o el reforzamiento del papel de los ITS con programas de concienciación y campañas educativas para mejorar la adopción y eficacia de estas tecnologías.

Según el autor del estudio, el doctor Lijarcio, "de todo el abanico de posibles soluciones, el despliegue de ITS puede jugar un papel relevante, aplicando soluciones concretas a puntos específicos donde se detecten incidencias graves y repetitivas. Por ejemplo, hemos visto que hasta el 49,5 por ciento de los siniestros por salidas de la vía tienen una causa acreditada que es detectable por algún sensor, y, por tanto, podría señalizarse en tiempo real. Este porcentaje aumenta al 60 por ciento si acotamos a salidas de vía con víctimas graves o fallecidos".

Ya es posible que algunos coches se comuniquen entre sí y, es posible que, en el futuro, también lo hagan con elementos de la vía, de modo que medidas como éstas podrían reducir hasta un 80 por ciento de los accidentes, a la vez que evitar atascos, permitir atravesar una ciudad sin tener que detenernos frente a un semáforo, etc.