Los Baños Árabes de la Pescadería de Córdoba serán visitables

Patrimonio

La Junta va a acometer una excavación arqueológica en este complejo del siglo X ó XI que será la clave de futuras actuaciones para su puesta en valor

Macarena O'Neill, Antonio Repullo y Cristina Casanueva visitan los baños.
Macarena O'Neill, Antonio Repullo y Cristina Casanueva visitan los baños. / Juan Ayala

La Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico de la Junta trabaja para hacer visitables los Baños Árabes de la Pescadería, ubicados en la calle Cara, muy cerca de la Mezquita-Catedral. La secretaria general de Patrimonio, Macarena O'Neill, ha insistido en que "lo lógico es ponerlos a disposición del público, que sean visitables y sean un atractivo más del patrimonio de Córdoba para los cordobeses y para los turistas, y para que todo aquel que visite Córdoba tenga un elemento más que le haga quedarse en esta ciudad varios días". De momento, el estado los Baños Árabes de la Pescadería "no es bueno, como ocurre en los Baños Árabes de San Pedro en los que también estamos trabajando", ha indicado. La Junta también prevé abrir al público estos últimos.

O'Neill ha explicado que La Junta de Andalucía, desde que es propietaria de estos baños, en los años 90, primero apuntaló el edificio para que no se cayera y más tarde construyó una cubierta sobre la bóveda de la zona del baño caliente. "Luego, nosotros, en ese afán que tiene la consejera [Patricia del Pozo] de actuar sobre el patrimonio que tiene la Junta y a indicación de la delegada territorial [Cristina Casanueva] hicimos el año pasado una actuación para la limpieza de los baños y para una conservación de emergencia por valor de 38.356 euros", ha puntualizado. "Este año continuamos con las actuaciones y ahora vamos a hacer una excavación arqueológica puntual para seguir teniendo conocimiento de estos baños que son muy desconocidos y seguir teniendo datos sobre ellos poder continuar actuando en el futuro", ha añadido.

Esta última actuación por valor de más de 66.000 euros irá acompañada de un levantamiento en 3D y una planimetría, todo ello por importe de 12.221 euros "que nos dará mucha mayor información sobre este importante edificio convirtiendo a Córdoba en una ciudad con importantes baños en su patrimonio histórico", ha destacado O'Neill.

La secretaria general de Patrimonio ha detallado que este monumento fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en 1954 y paso a ser propiedad de la Junta en la pasada década de los 90. "Se trata de unos baños árabes en los que se conserva tanto la cimentación de la sala templada como de la sala fría; además hay un pozo que daba suministro de agua tanto a la sala templada como a la sala caliente. De su posterior reforma en el Bajo Medievo se conserva toda su altura, también sus bóvedas, los lucernarios, la saleta, así como un patio. Posteriormente tuvo una reforma convirtiéndose en vivienda y se conserva también el patio mudéjar", ha explicado O'Neill.

También ha detallado que en las investigaciones arqueológicas que se han realizado se han visto restos romanos, "además una cimentación importante de la época musulmana; no sabemos todavía qué utilidad tenía ese edificio sobre el que están los baños; es decir, que se debió aprovechar todo el edificio. Son cuestiones que todavía quedan por investigar y en eso es en lo que estamos", ha apuntado.

Los Baños Árabes de la Pescadería, "que pueden ser del siglo X o XI, aún no lo sabemos, restan por datar", ha explicado. O'Neill ha añadido que "parece ser" que después de la conquista de Córdoba, en 1236, se siguieron utilizando como baños hasta que dos siglos después, en 1453, se vendió el edificio a Bartolomé Rodríguez, que lo transformó en vivienda, "sufriendo el edificio una transformación y una parcelación con una primera planta que se construyó sobre la bóveda del baño caliente y sobre la crujía de la fachada que da a la calle Cara". Los Baños Árabes de la Pescadería ocupan 450 metros cuadrados en la calle Cara ocupando varias viviendas, desde el número 4 hasta el número 10.

"Este es el último espacio en el que nos quedaba por intervenir en la provincia, empezar a trabajar en él para ponerlo en valor; este Gobierno de la Junta ha puesto y está poniendo en valor todo el patrimonio que teníamos en la provincia, son recursos que en un futuro generarán una actividad económica importante. Su puesta en valor va a posibilitar que podamos tener una red de baños que no tienen otras ciudades, no hay nada similares en otras ciudades, con lo cual va a ser un atractivo más para la ciudad de Córdoba", ha sentenciado la delegada de Cultura de la Junta en Córdoba, Cristina Casanueva.

Los otros baños de la Junta

El proyecto para recuperar los Baños Árabes de San Pedro es uno de los objetivos más inmediatos de la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico de la Junta de Andalucía en el Casco Histórico de Córdoba. La Junta tramitó por vía de urgencia el proyecto para acelerar las actuaciones. En total, el conjunto de las obras de rehabilitación del monumento costará unos 593.000 euros, como ya avanzó la consejera del ramo, Patricia del Pozo, en una visita a los baños. Los Baños Árabes de San Pedro se encuentran inscritos en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz con la consideración de Bien de Interés Cultural, desde el 3 de junio de 1931 y la tipología de Monumento.

Las obras se ejecutarán en dos parcelas anexas sitas en la calle Carlos Rubio, números 8 y 10 de Córdoba. "En las zonas a acondicionar y restaurar se incluirán los trabajos necesarios de refuerzo estructural y consolidación previa del monumento, apoyándose en el solar contiguo para dotarse del equipamiento y las dotaciones necesarias para permitir de este modo su visita pública", según indicó la Junta.

Los Baños de San Pedro presentan una superficie total aproximada de 475 metros cuadrados, subdivididos básicamente en dos inmuebles. El edificio sobre la parcela número 10, con una extensión de 240 metros cuadrados, es el que contiene los espacios de los baños propiamente dichos, ubicados en planta baja, aproximadamente a la misma cota de la Calle Carlos Rubio.

En la planta primera, con excepción de la crujía de fachada, no existen muros de carga debido a su última utilización como taller de joyería, existiendo una amplia sala con cubierta de estructura metálica y placa ondulada de fibrocemento (la cual ha seguido cumpliendo su función como cubierta y protección de los baños). La planta baja ocupaba el 80% de la superficie de la alta, lo que implicaba que existían zonas no investigadas, hasta que una actividad arqueológica puntual realizada en 2008 recuperó la totalidad de su superficie. Esta misma situación se producía en la totalidad del inmueble anexo de la parcela número 8, con excepción de una pequeña habitación en la planta baja.

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