Córdoba supera a Andalucía en el porcentaje de lectores de libros

Barómetro La realidad lectora de la ciudad

El 72% de los cordobeses se declara lector frecuente u ocasional en un estudio de la Fundación Germán Sánchez Ruipérez · Los hombres leen más que las mujeres · El 82,9% no va nunca a las bibliotecas

Unos niños leen en la Biblioteca Central.
Alfredo Asensi / Córdoba

11 de junio 2009 - 05:00

Casi tres de cada cuatro residentes en Córdoba (el 72,5 %) se declaran lectores habituales u ocasionales, ya sea de libros, prensa o cualquier otro soporte, mientras que el 27% se define como no lector. Así lo refleja el Estudio sobre los hábitos de lectura en la ciudad de Córdoba realizado por la Fundación Germán Sánchez Ruipérez para el Ayuntamiento. Entre los datos singulares que ofrece la ciudad (y que la distancian de los resultados de estudios similares a escalas nacional y regional), destacan un mayor índice de lectura en la población masculina sobre la femenina y el hecho de que el segmento de edad que exhibe una mayor tasa de lectura sea el de 45-54 años, frente al arco 14-24, que es el que presenta mejores resultados en el conjunto de España. Asimismo, Córdoba supera en seis puntos el índice andaluz de lectores frecuentes u ocasionales de libros.

El Ayuntamiento sitúa la realización de este estudio en el apartado de acciones encaminadas a reforzar los índices de lectura entre la población local, que tiene como pilar fundamental el impulso a la red municipal de bibliotecas y la realización de un Plan de Bibliotecas que estará concluido en los próximos meses. Para ello ha recurrido a una institución consolidada en la realización de estudios que, según su director general adjunto, Luis González, "sirven fundamentalmente para que los responsables públicos puedan tomar decisiones y reconducir programas". No obstante, este es el primer barómetro que la fundación realiza a escala municipal. Las encuestas fueron hechas en octubre y noviembre del pasado año a 909 personas.

El 60,5% de los habitantes de la ciudad declara que lee habitualmente (al menos, una vez por semana); el 12%, ocasionalmente (como mínimo, alguna vez al trimestre); el 27%, nunca. Si reducimos el análisis a la lectura de libros, el 45,2% se encuadra en el apartado de lector frecuente; el 11%, en el de lector ocasional; el 43,8%, en el de no lector. La conclusión de la fundación, por tanto, es que un 56,2% de la población mayor de 14 años lee libros en su tiempo libre (suma de lectores habituales y ocasionales). Este dato se sitúa seis puntos por encima del registrado en Andalucía (50,3%), si bien la proporción de lectores frecuentes es similar (45,3% en el conjunto andaluz).

Una las conclusiones más contundentes del estudio es la que se refiere a los géneros preferidos por los cordobeses. El último libro leído por el 74,7% de los entrevistados fue de narrativa. Las predilecciones se dirigen hacia obras históricas y de aventuras, muy por encima de las de terror, ciencia ficción, románticas y policiacas. A mucha distancia se sitúan las obras de conocimiento (6,8%), las de carácter biográfico (6,4%) y las de temática religiosa (2,2%). Sorprende el bajo índice de la poesía (1%), apenas una décima por encima de los libros de autoayuda.

Las mayores diferencias de la realidad lectora cordobesa respecto a las diagnosticadas en el conjunto de Andalucía y en España se encuentran en dos secciones del estudio. Una de ellas es la distribución por edades. El mayor porcentaje de lectores en Córdoba se halla en el tramo 45-54 años (62,6%), cuatro puntos por encima del índice nacional. En el conjunto de España, el mayor número de lectores pertenece al segmento 14-24 años (71,1%), en el que Córdoba arroja un 56,7%. Por otra parte, los porcentajes de lectores entre las personas que tienen más de 65 años son en Córdoba (43,7%) hasta 18 puntos superiores a los andaluces (26%) y 15 a los españoles (28,3%). Esto, según Luis González, revela un modelo de lector distinto al perfil medio de lector español, pero al mismo tiempo Córdoba presenta un equilibrio de índices de lectura en todos los tramos de edad mucho mayor que el del barómetro nacional.

En la clasificación por sexos se advierte otro rasgo singular: los hombres leen en Córdoba más que las mujeres: un 58,5% frente a un 54,2%. En el conjunto nacional hay un mayor peso femenino (57,2% frente al 51,9% masculino); en Andalucía, igualdad: 50% de hombres y 50,5% de mujeres.

La influencia del nivel educativo es clara entre los ciudadanos de Córdoba: en el colectivo de personas sin estudios, el porcentaje de lectores es del 24,7%, mientras que entre los que tienen estudios universitarios alcanza el 75,5%. Más de 50 puntos de diferencia entre ambos extremos. Las otras dos categorías de esta tabla hacen referencia a los estudios primarios (41,5% de lectores) y secundarios (62,8%).

Una de las preguntas incluidas en la encuesta fue: ¿cuál es la razón por la que dedica parte de su tiempo a leer? El motivo fundamental de los sondeados es el entretenimiento (82,3%). Le siguen a gran distancia el estudio (7,9%), el trabajo (5%) y la mejora del nivel cultural (4,1%). Entre los más jóvenes se obtienen porcentajes significativos de lectores por motivos de estudios (28,1%), al igual que ocurre en el conjunto de España.

Entre los lectores frecuentes y ocasionales de libros, la media de ejemplares leídos al año es de 9,6, superior a la de Andalucía (8,3) y a la de España (9), y aumenta a medida que lo hacen los años de escolarización. El 52,5% de los lectores de Córdoba leyó cinco o más libros el pasado año (61,2% en España) y el 28,4% leyó nueve o más (31% en España). Un 2,1% afirma que leyó entre 31 y 100 libros; un 0,4%, más de 100.

La principal vía de acceso a los libros para el 48,2% de los lectores de la ciudad es la adquisición. Un 19,7% indica que se los prestan; un 18,7%, que se los regalan. Un 7,7% opta por el préstamo bibliotecario. En este apartado, los mayores porcentajes corresponden al grupo de edad de 14 a 24 años, y los menores a las personas de más de 65 años.

El 9,7% de la población acude a una biblioteca con una frecuencia diaria o semanal. Un 82,9% reconoce que nunca pisa una biblioteca.

Uno de los datos más alentadores del estudio es el que indica que el 88,8% de los niños de Córdoba entre 10 y 13 años lee libros; un 74,4% con frecuencia y un 14,4% de manera ocasional. El 11,2% no lee. Ese 88,8% supone una diferencia de 33 puntos respecto a la población de más de 13 años y de tres puntos sobre los índices nacional (85,4%) y andaluz (85,3%). La narrativa es también el género preferido por los más jóvenes (novelas de aventuras, sobre todo, seguidas por las de intriga y las de ciencia ficción).

Por otra parte, el 47,2% de los menores de 10 a 13 años asiste a bibliotecas, 30 puntos por encima del resto de la población pero 27 puntos por debajo del índice de asistencia español (73,9%) y 15 por debajo del andaluz (62,2%). Es un dato negativo que establece, según González, un claro desafío para los próximos años: conseguir que la sociedad cordobesa saque mayor provecho de los recursos bibliotecarios con que cuenta la ciudad.

El estudio incluye un apartado sobre la frecuencia con que los habitantes leen periódicos y revistas. Un 78,5% se declara lector de periódicos; un 56,3%, de revistas. Los periódicos son más leídos por los hombres (87,9% frente a un 70% de mujeres), mientras que las revistas llegan más al sector femenino (60,1% frente al 52,1% de hombres). Las mujeres se decantan fundamentalmente por los diarios de información general, mientras que los hombres son más partidarios de los deportivos y los económicos.

La prensa gratuita es especialmente leída por los jóvenes de 14 a 24 años (28,7%).

González destacó que los resultados sitúan la realidad de Córdoba "en un perfil urbano" propio de "una sociedad lectora": un 56,2% de lectores de libros con una media de 9,6 ejemplares leídos al año. Hay un equilibro entre los distintos segmentos de edad pero se observa un déficit en el papel que representan las bibliotecas. Queda trabajo por hacer.

82,3%

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