El actor Pepe Rubianes muere a los 61 años en su casa de Barcelona

El polémico y atrevido intérprete gallego canceló las representaciones de su última obra, 'La sonrisa etíope', tras serle diagnosticada una grave enfermedad

El actor Pepe Rubianes saltó a los medios de comunicación tras realizar unas polémicas declaraciones.
E. Press / Barcelona

02 de marzo 2009 - 05:00

El actor y director gallego Pepe Rubianes falleció ayer en su domicilio de Barcelona a los 61 años debido a un cáncer de pulmón que sufría desde abril de 2008. El diagnóstico de su enfermedad le obligó a cancelar las actuaciones de la obra La sonrisa etíope en el club Capitol de Barcelona y la gira que tenía previsto realizar en verano. Miembros destacados del panorama político, mediático y cultural español dedicaron sus más cálidos elogios a un actor que cosechaba tantas simpatías como críticas.

El actor nació en la localidad pontevedresa de Vilagarcía de Arousa, en 1947. Pronto se trasladó a Cataluña, donde desarrolló toda su carrera profesional desde que decidiera dedicarse al mundo del teatro. En 1977 participó en la obra No hablaré en clase, de la compañía catalana Dagoll Dagom. Rubianes repitió con el mismo grupo en Antaviana, aunque también trabajó con la compañía Els Joglars.

Poco después, en la década de los 80, el actor decidió lanzarse en solitario con el espectáculo Pay-pay, obra a la que le siguieron otras como Ño, Sin palabras y En resumidas cuentas. Los años 90 le trajeron al actor la popularidad por la que más se le conoce gracias a su participación en la serie televisiva Makinavaja y a su espectáculo Rubianes solamente.

En 2006 estrenó la obra Lorca eran todos, que estuvo rodeada de polémica en su representación en el Teatro Español de Madrid y que acabó siendo representada en el auditorio del sindicato de CC.OO. de la capital.Personalidades de la política, de los medios de comunicación y de las artes escénicas dejaron constancia con sus elogios de la personalidad del actor y la pérdida que supone para el mundo del espectáculo.

El presidente de la Generalitat, José Montilla, calificó de "gran pérdida para la cultura catalana y del país" la muerte del actor. El dirigente catalán recordó que, pese a la enfermedad, fue "una persona con una vitalidad tremenda, con ganas de vivir y de disfrutar la vida". El dramaturgo y director de la compañía Els Joglars, Albert Boadella, reconoció que la noticia era "personalmente muy mala" y aseguró que "tenía un gran aprecio artístico" por él y por "su sentido del teatro". Por su parte, el actor catalán Manel Barceló aseguró que Rubianes era "toda una personalidad, más genio que artista, ya que ha ido más allá de lo que la profesión nos suele dar". Además, le calificó como "un actor indefinible" que "hizo su carrera por sí mismo". "Una carrera que resultó ser muy exitosa, con su propia forma de trabajar y de ver las cosas", sentenció.

Polémico, atrevido y sin pelos en la lengua, Pepe Rubianes ha fallecido dejando atrás una querella por sus declaraciones escatológicas contra la unidad de España durante una entrevista en un programa de Televisió de Catalunya y por las que su obra Lorca eran todos fue vetada por el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, en el Teatro Real.

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