Malkovich, Ardant y Dequenne desaprovechados

El mayordomo inglés | Crítica

John Malkovich, en 'El mayordomo inglés'.

La ficha

* ‘El mayordomo inglés’. Comedia dramática, Francia, 2023, 100 min. Dirección: Gilles Legardinier. Guion: Christel Henon, Gilles Legardinier. Música: Erwann Chandon. Fotografía: Stéphane Le Parc. Intérpretes: John Malkovich, Fanny Ardant, Émilie Dequenne, Philippe Bas, Eugene Anselin.

El mejor falso mayordomo de la historia del cine quizás sea William Powell interpretando a Godfrey en Al servicio de las damas (1936). Nada de extraño: dirigía Gregory La Cava, Powell es uno de los más grandes actores de comedia (perfil elegante y cínico), le daba la réplica Carole Lombard y los secundarios eran todos de lujo: Gail Patrick, Alice Brady, Eugene Palette y Mischa Auer. Era una comedia ácida que arremetía contra la frivolidad de la clase alta durante la gran depresión. 20 años después Henry Koester rodó una nueva versión con David Niven y June Allyson, Un mayordomo aristócrata (1957), muy inferior a la de La Cava salvo por el maravilloso matrimonio de millonarios despistados y memos interpretados por Robert Keith y la gran Jessie Royce Landis (si, la conocen, aunque crean no recordarla: seguro que no han olvidado a la madre de Grant en la escena del ascensor de Con la muerte en los talones).  

El falso mayordomo de Un mayordomo inglés no se hace pasar por lo quien no es para poner en pie una crítica social, sino una comedia blanca y amable. Perdida toda ilusión por la vida tras la muerte de su mujer, un hombre de negocios inglés se hace pasar por un mayordomo para poder revivir sus mejores recuerdos en la mansión francesa en la que conoció a su mujer. Gran parte de la comicidad, además de en la impostura, reside en el contraste de caracteres entre el sobrio y circunspecto británico y la extravagante familia dueña de la mansión que conoció tiempos mejores. Mezcla sin mucha gracia el humor basado en el manido choque entre estereotipos nacionales y en el tampoco muy original tema del extraño que acaba involucrándose en problemas familiares que acaba solucionando. Sobre todo, la aflicción de la señora de la mansión, también deprimida tras la muerte de su esposo.

La película supone la primera incursión en el cine de un guionista, novelista y comediógrafo muy popular en Francia en los registros de la novela policíaca y las comedias de buen rollete, Gilles Legardinier. A estas últimas pertenece la novela Complètement cramé, publicada en 2012, que él y Christel Henon han convertido en guión y él ha dirigido con un resultado no muy brillante. El lujoso y desaprovechado reparto está encabezado por un John Malkovich y una Fanny Ardant que, como la mansión y sus habitantes, han conocido mejores tiempos (y películas). El personaje más divertido es de la cocinera (sin olvidar a su gato) que interpreta una gran actriz dramática, Émilie Dequenne, que se reveló con Rosetta de los Dardenne (1999) cuando solo contaba 18 años y no hace mucho hizo una grandísima interpretación en Las cosas que decimos, las cosas que hacemos (Mouret, 2020).    

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

El mayordomo inglés | Crítica

Malkovich, Ardant y Dequenne desaprovechados

Lo último