La ópera regresará en marzo al Gran Teatro con 'Carmen' de Bizet

Córdoba/La cigarrera vuelve a Córdoba. El Gran Teatro se reencontrará con la ópera los días 17 y 19 de marzo con la producción de Carmen que el Teatro Villamarta de Jerez estrenó en 2006 y que hasta ahora ha desarrollado una veintena de funciones en distintas ciudades. La mezzosoprano madrileña María José Montiel, ganadora del Premio Nacional de Música en 2015 en la categoría de interpretación, encabeza el elenco de un espectáculo que cuenta con producción musical del IMAE Gran Teatro (participan la Orquesta de Córdoba, el Coro de Ópera Cajasur y la Escolanía Cajasur). Las entradas, de 26 a 75 euros, ya están a la venta.

Carmen es una ópera en cuatro actos basada en el relato homónimo de Prosper Mérimée. Fue estrenada en París, con un fracaso importante (probablemente por su crudeza dramática, poco habitual en la época), el 3 de marzo de 1875. Es la última ópera de Georges Bizet (1838-1875), que a partir de la fuente literaria dibuja a una Carmen racial, símbolo de la mujer perfecta para hacer feliz a cualquier hombre y, a la vez, volverlo loco.

Con dirección de escena de Francisco López, esta producción celebró su estreno el 20 de enero de 2006 en la localidad gaditana, que volvió a programarla en junio de 2011. López intenta "entrar en el alma de los personajes y de sus conflictos". En su opinión, esta ópera "permite múltiples acercamientos" como sucede con toda obra maestra, y "todos ellos son válidos". En este caso se insiste en el concepto de "viaje existencial de los personajes", que se inicia en el amor y finaliza en la muerte como destino final e inevitable. De este modo, se pone de manifiesto el sentido de tragedia clásica griega que subyace en este título operístico. Este "viaje existencial" se va desarrollando a lo largo de los cuatro actos. Así, en el primero de ellos se hace patente el amor "desde diferentes perspectivas". En el segundo se percibe la libertad frente a las formas cerradas de concebir el mundo. No será hasta el tercero cuando la fuerza del destino aparezca con toda su crudeza. En este acto don José "se queda en ninguna parte", puesto que "no entiende la idea de amor" de la protagonista femenina. "Eso nos llevará al cuarto acto, el de la muerte como desenlace final", explicó López.

Montiel acometió su primera Carmen en 2002 en Italia y posteriormente ha hecho el papel en Francia, Alemania, Suiza y Japón, además de España: "Es un personaje que está muy cerca de mi vida, muy dentro de mi piel, lo siento muy mío. Pero tengo que destacar que mi debut con Carmen en España fue gracias a la iniciativa de Curro Carreres y esta producción del Villamarta".

"Todos los artistas", señaló la mezzosoprano, "tenemos una relación especial con los personajes y, aunque los trabajamos con diferentes directores de escena, propuestas y misiones, todos somos únicos e irrepetibles y todos damos algo de nosotros al personaje. Yo de mí le doy mi propia esencia a Carmen y ella me enriquece muchísimo. Suelo investigar bastante en las fuentes literarias de mis papeles y es algo que me hace crecer. Carmen es muy inusual para su época: trabajadora, independiente, que se mantiene a sí misma, ningún hombre ejerce poder sobre ella. Una mujer que lucha en un mundo de hombres y que por eso se enfrenta a ellos. Es un ser libre".

La última ópera en el Gran Teatro, en abril de 2016, fue El elixir de amor de Donizetti, también de producción jerezana.