Cuatro décadas como referente

LA Reina emérita Doña Sofía presidió ayer el acto central de conmemoración de las cuatro décadas de existencia del hospital Reina Sofía en Córdoba. Un centro médico que se ha convertido durante este tiempo en un referente mundial en el ámbito de los trasplantes, en un impulsor incansable de la excelencia y la modernización de Córdoba y en un lugar al que están ligados los recuerdos -buenos y malos- de cientos de miles de cordobeses. Lo que nacía el 3 de abril de 1976 como una ciudad sanitaria con unos 3.000 profesionales ilusionados se ha convertido hoy en un hospital universitario en el que 5.000 profesionales desarrollan días a día una labor cada vez más cualificada y mejor. La investigación ha dado lugar en estos años al nacimiento del Instituto Maimónides de Investigación Biomédica de Córdoba (Imibic), cuyos permanentes logros y avances otean un futuro prometedor. En 40 años, han sido centenares de miles de consultas médicas, decenas de miles de intervenciones médicas, 6.781 trasplantes de órganos y tejidos, miles de nacimientos... los que ha acogido el hospital. En este tiempo ha triplicado su superficie inicial y tiene como gran y urgente reto pendiente poner el marcha el Plan de Modernización que prometió la Junta de Andalucía hace ya más de un lustro y al que la crisis y la falta de disponibilidad económica han dejado casi en el olvido. Es por ello que consideramos que a la buenas palabras de la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, en las que destacaba que la "sanidad pública es la garantía de igualdad" y debe tratarse como "la joya de la corona" del Gobierno andaluz, debe seguirle sin dilación el compromiso claro de la administración para poner en marcha unas reformas que pongan las instalaciones del hospital a la altura del siglo XXI. Ni los profesionales que ejercen su labor en el Reina Sofía ni los miles de cordobeses que pasan por allí a diario se merecen más retrasos. Coincidimos plenamente con la directora-gerente del hospital, Marina Álvarez, en que "hablar del Reina Sofía en Córdoba es hacerlo de modernidad, innovación, ilusión y éxitos". Del mismo modo que coincidimos en respaldar por completo su afirmación de que "mejorar, mejorar, y mejorar es el alfa y el omega de este hospital y de quienes forman parte de él". Tan de acuerdo estamos que creemos que si esa forma de entender la vida y las responsabilidades se trasladase al resto de la ciudad, Córdoba daría por fin ese paso hacia adelante que tanto necesita. Es momento de felicitar al hospital Reina Sofía por sus cuarenta años, de agradecer el esfuerzo de los profesionales que han pasado por él en estas cuatro décadas y de seguir su ejemplo para hacer de Córdoba una ciudad mejor.