Confabulario
Manuel Gregorio González
V aleriana
La democracia no solo es válida cuando uno gana, aunque la libertad de expresión está por encima de eso. La democracia, repito, no es cuando a ti o mí nos interesa y cuando tu o yo ganamos en las urnas. Resulta que dicen desde el PSOE que si este domingo no regresan al Palacio de San Telmo, pues eso, que hay que salir a la calle para protestar por el resultado, tal y como hicieron hace ahora tres años y medio, cuando se convocó aquello de rodear el Parlamento. ¿Qué pasaría si fuera al revés? Es decir, que ese mensaje lo hubiesen lanzado desde el otro lado. Las opiniones y los comentarios serían totalmente contrarios y calificado de inaceptables.
Lo que pase este domingo tiene revueltos a los partidos, los que ven que no llegan y aspiran a gobernar en solitario; los que puede que toquen más fondo pero confían en el voto oculto; los que aspiran a sobrevivir; los que quieren condicionar cualquier gobierno; los que creen que todo lo hecho hasta ahora ha sido lo peor…. Vamos, que los argumentos son claros.
Concluye ya, por fin, una campaña electoral que se supone que ha ido de menos a más, en la que pocas han sido las propuestas, en la que han pasado dos debates electorales -todos los partidos se han visto ganadores de los mismos al final, como no podía ser de otra forma-, en la que se han programado mítines en espacios reducidos para dar la sensación de llenazo y otros en los que realmente sí que lo ha habido por mucho que duela al adversario. Una campaña en la que en Córdoba han sonado hasta gaitas, coplas, consignas que han alentado el miedo y en la que no ha faltado ni un perejil desde Moncloa…
Una campaña en la que los partidos han intentando convencer de que con ellos seremos mejores y que con el contrario vendrá la ruina y la pérdida de derechos. Y en medio, realmente, el elector, el que tiene que decidir con su voto lo que quiere para Andalucía.
Por ahora, solo hay encuestas, unas mejores y otras peores, pero solo sondeos a fin de cuentas. El resultado no llegará hasta este domingo y será el lunes cuando todas aquellas personas que pueden, tendrán que salir a la calle para ir a su trabajo y los que no estén de acuerdo con lo que han decidido las urnas, pues que hagan lo que ellos consideren más sensato. Hasta entonces, todo son supuestos y anhelos.
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