Alerta por un brote de parvovirus en el Sur de Córdoba que está causando la muerte de numerosos cachorros de perro
Medioambiente
La protectora montillana Dejan Huella pide colaboración para afrontar los gastos veterinarios de las últimas semanas
El refugio se encuentra en cuarentena y no puede acoger a nuevos animales hasta que la situación se estabilice
La protectora montillana Dejan Huella mantiene su refugio en cuarentena después de que un brote muy virulento de parvovirus halla contagiado a la totalidad de animales que tienen acogidos, unos 70, y haya provocado una gran mortandad entre los cachorros. "En muy poco tiempo han fallecido 14. Es lo más duro que nos ha pasado nunca. Jamás habíamos visto algo así", lanza a la manera de grito de auxilio la presidenta del colectivo animalista, Ana Páez, que solicita colaboración para afrontar los cuantiosos gastos veterinarios provocados por la enfermedad; también se necesitan voluntarios.
La parvovirosis canina es la principal enfermedad viral que afecta a los perros, principalmente a cachorros que aún no han recibido la vacuna. Provoca alteración de las vellosidades intestinales, lo que se manifiesta clínicamente como diarrea sanguinolenta y maloliente. Esto causa un deterioro del estado general del animal y el pronóstico es fatal sin tratamiento; en numerosas ocasiones, incluso con medicación, a los animales les resulta complicado superar la enfermedad.
En los últimos diez días, en Dejan Huella han tenido que despedirse de casi todos sus cachorros: "Tenemos a una mamá recién parida, Mery, cruce de galgo con podenco, que ha perdido a siete de sus diez crías", dice Páez. "Y otros seis pequeños que estaban en otro chenil han muerto cuando estaban a punto de ser mandados con sus familias de adopción. Tenían todo preparado, la cartilla, el chip...", lamenta.
Dejan Huella nació en 2008 como respuesta al elevado abandono de animales de compañía en la zona. Hace unos años se enfrentaron a un brote de moquillo, pero "no tiene nada que ver con la situación actual". "Esto nos está superando", reconoce Páez. Hasta que la situación se estabilice, el refugio se mantendrá cerrado y no se recogerá a ningún nuevo animal para evitar que el brote vaya a más, dice. Páez aconseja igualmente la pronta vacunación de todas las crías, pues aunque el virus se contagia los síntomas se reducen considerablemente o, incluso, no existen; por el mismo motivo, recomienda no pasear a cachorros hasta que hayan recibido la vacuna.
Para canalizar las ayudas, Dejan Huella ha habilitado un Bizum con el código 05722; también ha facilitado la cuenta La Caixa ES69 2100-4186-27-2100350872 CAIXESBBXXX (extranjero).
La parvovirosis afecta a los cánidos jóvenes a partir de las seis semanas, cuando han perdido la inmunidad maternal, y es infrecuente en animales adultos porque ya están inmunizados por vacunación o infecciones subclínicas. Además, la patogenia del virus requiere la presencia de factores moleculares presentes solo en células en mitosis, por lo que es indispensable que el tejido a infectar esté en proliferación, como en el crecimiento.
El periodo de incubación aproximado es de cinco días. La fuente de contaminación es la materia fecal de los animales que han contraído la infección, pues puede haber gran cantidad de virus en las heces fecales de los animales que sufren la enfermedad. El virus es resistente bajo condiciones climáticas extremas y puede sobrevivir durante largos períodos.
También te puede interesar