Bandoleros en el South Park popular

Puerto del Calatraveño

La Diputación ha aprobado en Pleno pedir al presidente nacional del PP, Mariano Rajoy, que "ponga fin a la campaña de desprecio y descrédito de dirigentes de su partido contra Andalucía"

F. J Cantador

25 de enero 2009 - 05:01

CABALGAN, trabuco cargado de hambre de justicia en mano, a través de la abrupta serranía del South Park catalán, esa tierra donde están convencidos de que algunos de los afrancesados políticos que abrazan las siglas del PP gustan de utilizar un dialecto no apto para menores de 18 años a la hora de hablar de los andaluces. Curro Pulido Jiménez, Antonio Ruiz El Estudiante y Antonio Sánchez Villaverde El Algarrobo están ya una hartá de hartos de que los afrancesados más populares mancillen una manera singular de hablar, una manera especial de ser, una manera sin igual de actuar... maneras propias de una Andalucía imparable. "Quillo, bien votaítos en las urnas no serán, pero anda que bien hablaos...", piensan en voz alta.

Comandados por Curro, creyeron necesario asaltar la diligencia de la mofa catalana después de que una dama de rancio abolengo del bando enemigo, con nombre de Moreneta y apellido Nebrera, la emprendiera a cañonazos dialécticos contra un acento que a la señora le parece de chiste e inentendible si sale de la boca de un cordobés y que el tiempo se ha encargado de limpiar a miles y miles de aquellos que un día emigraron desde Sierra Morena a esa tierra del caganer en busca de su propio El Dorado. Los tres se sienten orgullosos de que una de esas personas que cruzaron la frontera idiomática sea el antiguo compañero de batallas nacido en las sierras de Iznájar, con apellido de tierra cordobesa que mana buenas mujeres y vinos, antes llamado José y ahora honorable Josep, antes un niño seseante o ceceante y ahora un mayor amante de la senyera. "¡Mira tú, Nebrera, en estos momentos es el que manda en aquella tierra! No podemos permitir que nadie alegremente se burle, zahiera o bromee con lo nuestro, verdad Curro", defiende El Estudiante, mientras apunta su trabuco de hambre de justicia contra el Napoleón popular, Mariano Rajoy, al que le piden la cabeza política de Nebrera después de que la señora no se haya arrepentido de sus ataques a la yugular.

Pero como diría en alguna que otra ocasión todo buen "hijo del padre de la patria andaluza, Blas Infante, al que otro afrancesado popular tildó de cretino integral y payaso", apunta El Estudiante, por si a alguien se le había olvidado, caído el burro, se le dan los palos. "Ya que tenemos a tiro pacífico de trabuco a Napoleón, pidámosle que la guillotina de la revolución popular idiomática corte la cabeza del desprecio y el descrédito de ese otro afrancesado que osó tiznar el buen nombre del padre de la patria, Alejo Vidal-Quadras". "Por cierto, oye Estudiante, no me negarás que se trata de un muy buen lugar para que descansen y duerman nuestros caballos, ¿verdad Curro?", añade El Algarrobo.

Cabalgan ahora, trabuco cargado de hambre de justicia en mano, por la serranía de Navacerrada adentrándose en otra zona abrupta, esta vez del South Park madrileño, donde también hay a veces que ponerle dos rombos al dialecto con el que otros afrancesados populares se refieren al habla andaluza. "No se puede permitir que la esperanza femenina para suceder al emperador del PP, y que tiene apellido de entrenador del Atleti, diga que estamos adocenados, ni que una tal Ana dispare a matar haciendo honor a su apellido asegurando que nuestros niños son casi analfabetos. Mariano, no nos va a quedar más remedio que asaltarte otra diligencia para obligarte a que nos liberes de esta ocupación de descréditos y desprecios", piensan el voz alta mientras apoyan en sus rodillas, cañón apuntando al cielo, el trabuco de la tolerancia. Basta ya de tópicos y de agresión a unas señas de identidad y a una cultura, sostienen. Basta ya, porque aunque no tienen un primo de Zumusol al que recurrir, en los últimos días, según sus propias palabras, a El Estudiante la ha salido un cousin del Juice,s sun: Barak Obama. Cuidao Mariano.

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