La campaña del cereal arranca en Córdoba con mejores perspectivas por las últimas lluvias

La campaña de cereal ha comenzado en la provincia de Córdoba mejor que las anteriores, por encima de las expectativas, por las precipitaciones que se están dando en casi todo el territorio, según el análisis de la organización agraria Asaja Córdoba.

La lluvia es esencial para que los agricultores puedan preparar el suelo y garantizar un entorno propicio para la germinación y el desarrollo inicial de los cereales, según ha asegurado este martes el presidente de la patronal agraria cordobesa, Ignacio Fernández de Mesa. "Se ha comenzado con normalidad por las primeras lluvias de otoño, encontrándose el terreno con tempero para sus siembras de cereales y leguminosas de invierno”, ha explicado.

Para el dirigente empresarial, los cambios de la nueva Política Agraria Común (PAC), el incremento del valor de las semillas y el gasoil, el aumento del precio de los fertilizantes y la falta de lluvias marcan el rumbo de las explotaciones de cereales.

La provincia de Córdoba tiene en producción 168.600 hectáreas de tierra de labor en extensivo, de las que más de 144.200 hectáreas se cultivarán de cereales de invierno esta nueva campaña.

Según los datos de Asaja, se ha registrado una subida de trigo duro en torno a un 10%, hasta alcanzar este año a las 43.500 hectáreas frente a las 39.600 del pasado 2023. Por su parte, los trigos blandos han registrado una bajada en torno al 5%, situándose en las 21.700 hectáreas, mientras que la cebada sube el 2%, por lo que se quedará más o menos como el año pasado, en 17.600 hectáreas aproximadamente.

La siembra de avena ha bajado por la falta de semillas que se ha encontrado este año y ha aumentado la siembra de triticale. En las oleaginosas de invierno, como la colza, la superficie ha bajado más del 15%.

Asaja recuerda que, a causa de la normativa de la nueva PAC, este año hay que dejar al menos un 4% mínimo de tierra de barbecho para cumplir con la condicionalidad lo que ha hecho que también bajen algunas siembras. Sin embargo, han aumentado las leguminosas para alcanzar el 10% de especies mejorantes para poder percibir las ayudas de la PAC correspondiente al ecorrégimen de rotación.

Por último, la organización agraria ya recomendó que los productores realizaran sus planes de siembra con antelación para tener claro que cumplan todos los requisitos de la nueva PAC que entra en su segundo año de vigencia, así como que asegurasen sus producciones ante la inestabilidad climática de estos últimos años.