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DEMOGRAFÍA
El Palacio de la Merced, sede de la Diputación de Córdoba, ha acogido la II Reunión de Expertos para la Estrategia Frente al Desafío Demográfico en Andalucía, donde se ha estudiado dicha estrategia andaluza que aspira a que la población en el medio rural crezca en diez años.
El encuentro ha sido presidido por el presidente de la institución provincial, Salvador Fuentes, y el consejero de Justicia, Administración Local y Función Pública de la Junta de Andalucía, José Antonio Nieto. Fuentes ha hecho referencia a que “durante los últimos 10 años un total de 33 pueblos de la provincia han perdido población, siendo un total de 20.000 las personas que han dejado nuestros municipios”.
“No podemos olvidar que tenemos un total de 77 municipios, algunos de ellos como La Carlota, Priego de Córdoba o Fuente Obejuna con núcleos diseminados que necesitan un análisis específico sobre la evolución de su situación demográfica”, ha matizado Fuentes.
Para el presidente de la Diputación, “la puesta en marcha de este grupo de expertos nos va a dar la posibilidad de establecer un diagnóstico del que posiblemente tengamos conclusiones a mediados de 2024, lo que nos permitirá poner sobre la mesa las bases de una colaboración para atajar el problema del despoblamiento”.
El grupo de expertos está compuestopor: Luis Ayuso y Carlos de las Heras co-directores de la Estrategia frente al Desafío Demográfico; la ex alta comisionada de la Gobierno al frente del Reto Demográfico 2017-2018, Edelmira Barreira; Eugenio Cejudo, de la Universidad de Granada; Joaquín Recaño, del Centro de Estudios Demofráficos (CED), y Juan José Manzano, de Almanatura.
A todos ellos se suman: de la FAMP, Teresa Muela ; de la Asociación Desarrollo Rural Andalucía, Pedro Fernández; del Consorcio Fernando de los Ríos, Alberto Corpas; de la Universidad de Málaga, María del Mar Soto, y de la Fundación Centra, Eladia Illescas.
Fuentes ha incidido en que el desafío debe ser cumplir el diagnóstico que surja de este informe y establecer la necesaria colaboración institucional para que los municipios puedan seguir compitiendo en materia de empleo, de desarrollo y de futuro.
Por su parte, el consejero de Justicia, José Antonio Nieto, ha señalado que “estamos hablando de que el balance demográfico tiene que ser adecuado, consiguiendo que los territorios dejen de perder población y que los que incrementan tengan servicios adecuados a su ciudadanía”.
Según Nieto, en Andalucía, la zona interior tiene un problema consolidado de pérdida de población, "si nos retrotraemos a los últimos 20 años, un total de 44 municipios de Córdoba han perdido población”.
“Atajar las consecuencias del reto demográfico nos va a permitir mejorar la calidad de vida de nuestros ciudadanos, al mismo tiempo que contribuirá a poner en valor el enorme potencial de nuestro mundo rural y a permitir que las personas que quieran vivir en un entorno rural se fijen en nosotros”, ha concluido Nieto.
Andalucía no sufre actualmente un problema de despoblación generalizado como otros territorios, pues sigue siendo la comunidad autónoma más poblada del país y en crecimiento. Las previsiones apuntan a que en 2037 puede superar los nueve millones de habitantes.
Pero ese crecimiento no es equilibrado ya que la mitad de los andaluces vive en una treintena de capitales y grandes ciudades. Zonas como la Costa del Sol o el Valle del Guadalquivir han experimentado un rápido crecimiento que exige atender una demanda de servicios cada vez mayor.
Por contra, el 54% de los municipios, la mayoría pequeños y de comarcas de interior, llevan años perdiendo población. El reto demográfico en Andalucía pasa por lograr "un balance adecuado" entre territorios y debe partir de un diagnóstico apoyado en la "la experiencia y conocimiento de personas que llevan tiempo trabajando sobre este tema", ha defendido Nieto.
"De los primeros datos que hemos conocido ya les puedo decir que si se pierde población en los municipios andaluces no es porque haya menor calidad de vida o de servicios, todo lo contrario, en los municipios pequeños éstos son superiores a los de cualquier capital de provincia. No es un problema de prestación de servicios, es un problema de otra cosa que estamos analizando para poner encima de la mesa soluciones", ha expuesto.
El consejero ha avanzado que "uno de los problemas es la mala imagen que se ha transmitido de los municipios", en vez de poner en valor esa calidad de vida y de servicios. Por ello, se ha mostrado "convencido de que si somos capaces de cambiar esa imagen y aportar valor a las zonas rurales seremos capaces de consolidar población". A cinco años, ese es el objetivo: fijar la población al territorio y que en los municipios que llevan años perdiendo vecinos no se marcha nadie más.
La provincia de Córdoba ha perdido el 3,11% de su población en la última década. Así lo indica el último censo de población y viviendas relativo a los datos del 2021, unas cifras que actualizan los números de hace diez años. Córdoba capital y la provincia suman 777.622 habitantes, frente a los 802.575 que había en 2011.
La caída es del 3,11%, el equivalente a una pérdida de 24.953 habitantes, como si toda la población de Montilla, la cuarta localidad cordobesa más poblada, hubiera desaparecido. Por sexos, 396.763 son mujeres y 380.859 hombres.
De los 77 municipios cordobeses, son mayoría los que han visto menguar su censo en la última década. De hecho, solo 17 han ganado vecinos, lo que equivale a apenas el 22% del total.
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