Producir un kilo de aceite de oliva cuesta un 157% más que hace tres años por la inflación y la sequía
Campaña olivarera
La Asociación Española de Municipios del Olivo presenta un informe de precios que detalla que tanto en el campo como en la almazara se han incrementado los costes salariales un 9%
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En el año 2020, el coste medio de producción de un kilo de aceite de oliva en España se situaba en 2,42 euros/kilo; ahora, tres años más tarde, ese coste medio se ha elevado hasta los 6,22 euros/kilo, fruto de la inflación y a la reducción de cosecha del 50% ocasionada por sequía, lo que supone un aumento del 157% para el agricultor.
En el caso de que la producción de este año fuera la normal en nuestro país, es decir, con unas medias de 1.500.000 toneladas de aceite de oliva, el coste medio de producción de un kilo de aceite de oliva sería de unos 3,20 euros/kilo en 2023 (un 32% más que los 2,42 euros/kilo de 2020, tras aplicar la subida del precio de los combustibles, materias primas y mano de obra, y un 94% menos de lo que finalmente es por la producción mermada a la mitad).
"Tanto en la campaña pasada (22/23) como en la actual que acaba de comenzar (23/24), la producción española ha sido y será de nuevo la mitad de un año normal, entorno a 750.000 toneladas, y esto es absolutamente determinante en los costes. Y lo es porque los olivareros deben mantener gran parte de las labores de cultivo como son la poda, la fertilización, el mantenimiento del suelo, los tratamientos fitosanitarios, el riego en su caso y la recolección", ha subrayado el director técnico de la Asociación Española de Municipios del Olivo (AEMO), José María Penco, durante la exposición del Informe de Precios y Costes de producción del Aceite de Oliva en España que se ha presentado este jueves en Córdoba, junto a la presidenta de la asociación, Lola Amo.
Se trata de un informe que ya elaboró AEMO en 2020 y que ahora ha actualizado a la situación actual del sector oleícola en España, considerando la variación de estas dos variables fundamentales (incremento de costes y reducción de cosecha).
En cuanto a la subida de costes de los recursos necesarios para producir aceite de oliva, tanto en campo como en la almazara, el estudio considera una subida de los costes salariales de un 9%, un aumento de inputs agrarios como fertilizantes y fitosanitarios superior al 70%, y una subida de la energía (gasoil de los tractores, y electricidad) cercana a un 40%.
En este sentido, José María Penco, ha advertido que los costes medios son ponderados, puesto que estos costes varían según el sistema de cultivo del olivo, que va desde el olivar tradicional de montaña (no mecanizable) hasta el cultivo en seto, pasando por el tradicional de baja pendiente y el intensivo (estos tres últimos si son mecanizables). "Hay que diferenciar entre los costes del olivar tradicional de montaña que superan los 10 euro/kilo, hasta los costes de olivar en seto en regadío que se encuentran ahora entorno a 3 euros/kilo".
Para el director de AEMO, la conclusión que ratifican los datos del informe es que, a pesar de la severa subida del precio del aceite de oliva en origen, "los olivareros no se ven beneficiados en sus cuentas de explotación", puesto que aún habiéndose liquidado el aceite en España a una media de 5.85 euros/kilo en origen, los costes medios superan ese valor al suponer, como se ha señalado, hasta 6.22 euros/kilo. "Es decir, los altos precios del aceite de oliva en el mercado no compensan la subida de costes y la elevación de los mismos derivada de la baja cosecha".
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