La Virgen de Luna llega a Villanueva de Córdoba en un espléndido Lunes de Pentecostés

A la caída de la tarde de este Lunes de Pentencostés, como manda el calendario litúrgico, Villanueva de Córdoba recibía con alegría a su patrona y alcaldesa perpetua a su llegada a la localidad, tras un primaveral día de romería en el santuario de La Jara antes de emprender el camino hacia la Parroquia de San Miguel, donde permanecerá hasta el 13 de octubre. Tan solo una noche ha pasado la Virgen de Luna en su santuario, donde fue llevada por la hermandad filial de Pozoblanco en la jornada del domingo, mientras que Villanueva de Córdoba la recibía con el rosario de antorchas y el canto de la salve al anochecer.

Desde bien temprano Villanueva de Córdoba ha vivido la romería de traída de la Virgen de Luna, cuando los hermanos se reunían en la casa hermandad para el rezo de la salve e iniciar el camino con el carro de la cofradía, hermanos mayores y Junta de Gobierno hacia el santuario. Pasaban las once de la mañana cuando la comitiva ha llegado al santuario, no sin antes hacer el descanso obligado en la última cruz del camino para invitar a vinos y “tostaos”.

La llegada de la Cofradía Hermandad al Santuario daba lugar a sacar a la Virgen de Luna en procesión alrededor del santuario, luciendo el refuerzo y nuevo plateado de las andas, para después celebrar la misa con el acompañamiento musical del Coro Romero Nuestra Señora de Luna.

Concluida la misa los romeros han podido celebrar de una romería entre familia y amigos en el paraje del santuario, con una agradable temperatura y reponiendo fuerzas para encarar el camino de llevada de la patrona a Villanueva de Córdoba, ya que pasadas las cuatro de la tarde, entre cofrades y devotos se ha producido la salida de la imagen del santuario para emprender el camino por entre la dehesa hasta llegar a su pueblo, escoltada por los caballos de la peña Encina Enana delante de la imagen, y las carrozas romeras tras la comitiva que porteaba a la patrona en su regreso a Villanueva de Córdoba.

Las ofrendas florales le han dado la bienvenida a la Virgen de Luna en cuando ha llegado al pueblo, primero, la ofrecida por la Peña del Caballo Encina Enana, quien la ha acompañado en su camino de regreso, además de despedirla en el santuario. Y segunda ofrenda floral, la realizada por el alumnado del colegio Virgen de Luna a su paso por el colegio, minutos antes del recibimiento oficial en El Regajito, donde las autoridades civiles y la Hermandad de San Miguel portando la imagen del patrón han recibido, como marca la tradición, a la patrona. En ese momento, el párroco de San Miguel, Félix García Jurado, hacía la imposición de las llaves de los sagrarios de Pozoblanco y Villanueva de Córdoba para iniciar el recorrido por las calles de la localidad.

En la puerta del Ayuntamiento, el primer edil, Isaac Reyes, esperaba a la patrona para imponerle el bastón de mando como alcaldesa perpetua. Dando por finalizado con este acto el luto oficial declarado por Alcaldía con motivo del fallecimiento de un vecino en un accidente de moto. La petalada realizada por los jóvenes devotos a su paso por la Audiencia ha dado paso a la entrada de San Miguel y La Virgen de Luna a la parroquia, seguida por el canto de la salve en el interior del templo, ya que los fuegos artificiales también se han suspendido por el luto oficial en el municipio.

El próximo domingo, fiesta de regla de la Cofradía Hermandad de la Virgen de Luna se celebrará la procesión de bienvenida de la patrona por las calles de la localidad tras la función religiosa en la que se jurará bandera y se impondrá las medallas a los nuevos cofrades, con el acompañamiento musical de la Coral Polifónica San Miguel.

En su recorrido por las calles de Villanueva de Córdoba, la Banda de Tambores y Cornetas Virgen de Luna interpretará la marcha Luna de Pentecostés que se ha compuesto para la patrona. Tras la procesión se celebrará el convite de hermandad a cargo de los hermanos mayores del año en curso, que son nombrados por orden de antigüedad, encargados además de portar los símbolos tradicionales de la hermandad como son el bastón, bandera y alabardas.