Conmoción en Montilla tras la muerte de una pareja: "Oímos el grito de un hombre, y nada más"

Montilla/Montilla vive con consternación la muerte María Auxiliadora Ruz, una vecina de 42 años, y de su pareja, Alejandro, de 32. El suceso golpeó en la tarde del jueves al barrio de las 80 Viviendas, un pequeño vecindario de casas sociales donde este viernes aún no daban crédito a lo sucedido. "Oí el grito de un hombre, salí a la calle y nada más", ha recordado con pesadumbre Mari Carmen, vecina del número 2 de la calle Rafael Alberti; Auxi vivía en el número 4, pared con pared. Un rato más tarde, la Guardia Civil llamó a la puerta de Mari Carmen y ahí supo lo que había pasado.

Tras muchas especulaciones, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Montilla, en funciones de guardia, ha recibido el resultado de las autopsias practicadas en el Instituto de Medicina Legal a los cadáveres, que determinan que ambos habrían fallecido por electrificación, como ayer adelantó El Día de Córdoba y han confirmado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA). La investigación, además, descarta cualquier indicio de criminalidad, lo que corta por completo las teorías y bulos que apuntaban a la participación de terceras personas; también queda descartada la hipótesis de la violencia de género.

Una mujer "muy trabajadora"

En el barrio recordaban este viernes con pesar a Auxilidora, una mujer "muy trabajadora". "Apenas coincidíamos. Salía y entraba a casa, no paraba", ha contado la vecina del número 2. La mujer hacía trabajos en el campo, en los mercadillos, en la feria, donde le salía. Se casó muy joven, con 16 años, y tuvo dos hijas en el matrimonio, ahora con 25 y 21 años; también era abuela de dos nietas. La hija pequeña aún vivía con ella en la casa de la calle Rafael Alberti, aunque ayer, casualmente, se encontraba de viaje cuando se produjeron los fatales hechos. En el accidente también falleció Alejandro, natural de Algeciras, pareja de Auxi desde hacía un par de meses.

Fue la madre de Auxiliadora quien, a primera hora de la tarde descubrió los cuerpos en una de las visitas habituales a casa de su hija. Corrió al supermercado del frente y entre gritos apenas pudo balbucear lo que acababa de ver. En pocos minutos, la zona se llenó de coches de la Guardia Civil, que acordonaron la calle e isntalaron una mampara para preservar la escena del doble homicidio. Durante toda la tarde, la zona fue un hervidero de curiosos y vehículos patrulla.

El trabajo policial terminó pasadas las 21:00, con el levantamiento del cadáver bajo la supervisión de la comisión judicial; los cuerpos fueron trasladados al Instituto Anatómico Forense, en Córdoba. Este viernes, la puerta de la casa mantenía el precinto policial, aunque lo que más ha llamado la atención es que el cuadro de luz, en la fachada, también estaba precintado y ha sido el centro de atención de todos los reporteros gráficos.

En el lugar del suceso, el alcalde de Montilla, Rafael Llamas, ha enviado sus condolencias a los familiares y amigos de los fallecidos, al tiempo que ha reclamado prudencia sobre los hechos. Ha confirmado, además, que la mujer fallecida trabajó de forma esporádica en el Servicio Municipal de Deportes, y el padre de ella era trabajador municipal.

El cuerpo de la mujer será velado en el tanatorio San Francisco Solano, en Montilla, donde a las 10:30 de este sábado se le hará un responso y posteriormente será incinerada.