Sin fecha para la devolución del mosaico nilótico a Puente Genil pese a los años de espera

Puente Genil/La devolución del mosaico nilótico de Fuente-Álamo a Puente Genil sigue siendo una prioridad para el Ayuntamiento pontanés pese a las dificultades más que evidnetes que han apareciendo en un proceso que ya se prolonga demasiados años y que todavía no tiene una fecha concreta para materializarse. Así lo ha puesto de manifiesto este miércoles el alcalde, Sergio Velasco, quien se ha referido a este asunto tras las recientes actuaciones llevadas a cabo en el Museo Arqueológico.

“Mantenemos el deseo de que el mosaico nilótico regrese a la ciudad y seguimos trabajando para ello. Fue un proceso que se inició en anteriores mandatos y no hemos descartado este asunto, aunque somos conscientes de que las tramitaciones de Cultura sobre este tipo de movimientos son extremadamente lentas”, ha afirmado Velasco, quien ha precisado que “este asunto estaba avanzando, pero a un ritmo lento". "No nos hemos retractado de ninguna solicitud y en cuanto esté culminada toda la tramitación se procederá al traslado, aunque no puedo dar fecha porque no dispongo actualmente de esta información”, ha aclarado.

La devolución del mosaico nilótico se ha convertido en un asunto en el que los plazos de espera se están dilatando demasiado pese a la aparente buena comunicación existente entre la Junta y el Ayuntamiento. En plena pandemia, a finales de 2020, el Ayuntamiento remitió a la Delegación de Cultura de la Junta la declaración de sala museística de las dependencias del yacimiento de Fuente-Álamo, donde se tiene previsto ubicar el mosaico. Una vez recibido este documento, que recogía las características físicas y técnicas de este espacio, habrían de ser los técnicos de la Administración autonómica los que examinaran el plan antes de dar luz verde al traslado, teniendo que firmarse posteriormente el convenio para hacer efectiva la devolución del mosaico.

50.000 euros para el traslado

El Ayuntamiento ya consignó en su presupuesto de 2021 una partida de 50.000 euros para el traslado, aunque los meses fueron pasando y los trámites, pese a estar completados, no han avanzado demasiado, sin saberse a ciencia cierta cuándo se procederá a la devolución.

El mosaico nilótico fue descubierto en 1982, suscitando el interés de los arqueólogos por el yacimiento de Fuente-Álamo. Fue, de hecho, el punto de partida de excavaciones posteriores y el germen de la puesta en valor del enclave, a día de hoy considerado como una de las grandes joyas patrimoniales de la localidad. Trasladado al Museo Arqueológico de Córdoba, el mosaico pavimentaba en origen una sala termal, correspondiente a la reforma del primitivo balneum de final del siglo II o principios del III después de Cristo, que debió acometerse a principios del siglo IV, si bien cayó en desuso y fue clausurado en época teodosiana, tal y como refleja un muro que atraviesa el pavimento.

Se trata de una estancia que fue redescubierta en las excavaciones emprendidas entre 2005 y 2009, de forma cuadrangular con cuatro ábsides, de los que solo se conservan completos dos y apenas restos de la inscripción del tercero, muy afectado por una gran laguna que se extiende por el cuarto y la parte inferior del cuadro central.

En dicho cuadro está representado, según la iconografía habitual, el Nilo, acompañado por ejemplares de la fauna nilótica, mientras en los compartimentos absidados se sitúan escenas de la Geranomaquia, con epígrafes musivos alusivos a las expresiones de pigmeos y grullas identificados con un nombre propio, cuya lectura e interpretación han suscitado desde su hallazgo un gran debate, siendo identificadas como representación tanto de una obra teatral, un mimo o una novela ilustrada de los siglos III al IV después de Cristo.