Diversión y tradición: la Diablilla reparte sustos y tirones de pelo por las calles de Montoro

Alto Guadalquivir

El terrorífico persona realiza travesuras hasta la procesión de San Bartolomé

La festividad incluye hinchables, fiesta de los colores, photocall y música

Las mejores imágenes de la suelta de la Diablilla en Montoro

La suelta de la Diablilla en Montoro
La suelta de la Diablilla en Montoro. / Tomás Coronado

Montoro/El mal anda suelto por las calles de Montoro, o eso dicen. Y es que la Diablilla ya hace de las suyas por las calles de la localidad del Alto Guadalquivir. Desde las 10:30 de este viernes, niños y mayores llenaron con máscaras en la misma la plaza de España, donde no cabía un alfiler, esperando la suelta de este personaje tan característico y tradicional del municipio. No fue hasta repicar las campanas cuando pudo verse a este terrorífico personaje descender por la torre de la parroquia de San Bartolomé y dar rienda suelta a sus travesuras.

Esta fiesta tan singular se celebra en honor a San Bartolomé, patrón de la localidad, que se representa con el diablo pisado. Asi que, como manda la tradición, la Diablilla, el 23 de agosto, tras la bendición de las medallas y al repicar de las campanas a las 12:00, se desliza por la torre de la Iglesia a la que da nombre el santo y va haciendo de las suyas hasta el 24 de agosto, cuando San Bartolomé vuelve a apresarla. Y, como dice la leyenda, aquel niño que no lleve medalla de la Virgen de Nuestra Señora del Rosario puede ser que se lleve un tirón de pelos.

Máscaras de la Diablilla

Diversión en la plaza de España de Montoro.
Diversión en la plaza de España de Montoro. / Tomás Coronado

Vecinos y visitantes ocupaban la plaza de España desde primera hora de la mañana a la espera de poder ver a la Diablilla, algunos incluso llevaban máscaras con su cara. La ilusión se ha mezclado con los nervios. La suelta de la Diablilla es todo un espectáculo que se acrecienta con una mañana cargada de hinchables, piscinas de bolas, tobogán con piscina, una pista deslizante en la calle Marín para el disfrute de todos los niños y no tan niños, pintacaras, globoflexia y un photocall para inmortalizar el momento. Una tradicional fiesta que reúne a todos los montoreños y llena de vida el municipio.

A pesar de que esta fiesta está más destinada a los más pequeños, la Diablilla pasea por todas las calles de Montoro visitando a todos sus vecinos, incluidos los ancianos de la residencia Jesús Nazareno, con los que se protagoniza uno de los momentos más emocionantes de la jornada, pues incluso pueden verse lágrimas de felicidad.

La Diablilla dejará de hacer de las suyas con la procesión del mártir San Bartolomé, representación que significa la lucha del bien contra el mal que se remonta al 24 de agosto de 1240, fecha en la que Fernando III el Santo arrebató definitivamente la ciudad a los musulmanes. Durante estas 24 horas, la Diablilla aprovechará para repartir sustos y tirones de pelo.

Actividades todo el fin de semana

La Diablilla baja por la torre de San Bartolomé.
La Diablilla baja por la torre de San Bartolomé. / Tomás Coronado

La fiesta no acabará aquí, ya que las actividades se prorrogarán a lo largo de estos dos días. Además de la gran fiesta infantil celebrada en el inicio de esta festividad, durante la noche de este jueves, a partir de las 23:00, Babylon, Rockopop y DJ Óscar Fuego serán los encargados de seguir dándole vida al pueblo con su música.

La celebración seguirá este sábado 24 de agosto, desde las 08:00, con un pasacalles que estará a cargo de la asociación músico-cultural Juan Mohedo y en el que se podrá ver de nuevo a la Diablilla antes de despedirla a las 12:00. Una vez haberle dicho adiós, se llevará a cabo la mítica fiesta de colores donde no faltará ningún detalle, hasta habrá DJ y un toro mecánico. Para cerrar estas fiestas de la mejor manera posible, habrá una fiesta de la espuma alrededor de las 13:30.

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