Ecologistas en Acción detecta seis puntos negros en la depuración de aguas en Córdoba

Córdoba/Seis de las 39 depuradoras que funcionan en Córdoba presentaron alguna deficiencia durante 2023, según el informe anual de la calidad de los saneamientos en Andalucía publicado este martes por Ecologistas en Acción. Córdoba, no obstante, repite como la provincia andaluza con un mejor funcionamiento de la depuración; además, el 92% de la población cordobesa reside en localidades que tienen estaciones depuradoras de aguas (EDAR) o que se encuentran en construcción. Cádiz es la provincia con una mayor cobertura, pues llega al 96% de sus municipios, aunque su red presenta mayores deficiencias.

Volviendo a Córdoba, los seis puntos negros señalados por la asociación conservacionista se sitúan en las EDAR de Alcaracejos-Villanueva del Duque, Baena, Hornachuelos, Peñarroya-Pueblonuevo, Pozoblanco y El Viso-Villaralto. El motivo es que las muestras analizadas arrojaron parámetros de carga orgánica superiores a los permitidos por la normativa.

En el caso de Alcaracejos-Villanueva del Duque, las aguas depuradas vierten en el arroyo de Las Cruces, una zona de interés ambiental en el Plan Hidrológico, por lo que las características cualitativas del vertido autorizado incluyen límites para los parámetros de nitrógeno y fósforo. A juicio de Ecologistas, la infraestructura requiere de una adecuación para que se implante un tratamiento que elimine la carga orgánica residual y otras sustancias contaminantes no eliminadas, pues además se sitúa en la zona "sensible" del embalse de La Colada, donde el baño se mantiene prohibido precisamente por la elevada presencia de bacterias fecales.

Respecto a la EDAR de Baena, Ecologistas advierte de que solo cumplió en los años 2018 y 2022 por la situación de "núcleos de población como Albendín". El año pasado se publicaba la apertura de información pública del proyecto de la depuradora para dar solución al vertido de esta pedanía, con un presupuesto base de 3,2 millones para la agrupación de vertidos y 3,5 millones para el proyecto básico de la EDAR.

Vertidos al Bembézar en Hornachuelos

En cuanto a Hornachuelos, es la primera vez que Ecologistas determina que la EDAR meloja "no es conforme a la norma", y ello a causa de la insuficiente eliminación de las partículas en suspensión. Esta infraestructura sitúa el punto de vertido del efluente en el río Bembézar, considerada como zona protegida por su situación vulnerable. De las 12 muestras recogidas, cinco superaron los límites o no llegaron al porcentaje mínimo para los sólidos en suspensión, por lo que el colectivo considera "necesarias" que se apliquen mejoras en la infraestructura.

La Junta de Andalucía declaró de interés autonómico en 2010 estas actuaciones, y de acuerdo al último balance publicado por el Ejecutivo, esta actuación se encuentra licitada. A finales de agosto del año pasado, se encargaron tanto el proyecto de redacción de la agrupación de vertidos como la EDAR de las pedanías de Hornachuelos, con una inversión prevista de 4,2 millones de euros. Incluía los núcleos de Mesas de Guadalora, Céspedes, Bembézar y Puebla de la Parrilla.

Los problemas de La Colada

La depuradora de El Viso-Villaralto, vierte en el arroyo Arenoso. Entró en funcionamiento en el año 2010 y trata más de 314.000 metros cúbicos de aguas residuales urbanas de estas dos poblaciones, dando servicio a 3.600 habitantes. Basa su sistema de depuración en la tecnología de biodiscos y recibe las aguas residuales mediante cinco estaciones de bombeo.

La EDAR contaba con autorización provisional para efectuar el vertido de las aguas residuales procedentes del núcleo urbano de Villaralto desde diciembre de 1986 y con posterioridad, en enero de 1990, se otorgó la autorización provisional para El Viso. Ambos permisos se revisaron en abril de 2004, sin que ninguno de los dos municipios aportara la información requerida en el plazo legal, lo que tuvo como consecuencia que quedaron sin efecto las autorizaciones provisionales, recuerda Ecologistas.

A finales de noviembre de 2009 la Diputación de Córdoba solicitó autorización administrativa y, tras el trámite administrativo pertinente, la Confederación Hidrográfica lo otorgó. Se establecieron unos valores límite de emisión para el nitrógeno de 15 miligramos por litro y para el fósforo, de 2 miligramos. En diciembre de 2020 se revisó de nuevo la autorización de vertido porque se había detectado que el volumen anual de vertido de aguas residuales depuradas (463.855 metros cúbicos) superaba ampliamente el autorizado (299.592 metros cúbicos).

Emproacsa solicitó entonces una ampliación de los caudales fijados hasta el límite de la capacidad de tratamiento de la EDAR, pero Ecologistas advierte de que las muestras proporcionadas aún incumplen la normativa. Y avisa de que "cuenta con importantes carencias en su diseño", teniendo en cuenta "la elevada carga orgánica a la que está sometida por los vertidos ganaderos" y "porque sus aguas depuradas llegan al embalse de La Colada, catalogado como zona sensible".

Ecologistas sitúa otro punto negro en Peñarroya-Pueblonuevo, EDAR que "siempre ha incumplido la normativa" desde que el colectivo analiza el saneamiento y depuración, con la salvedad de 2019 y 2020. Esta infraestructura, con instalaciones del año 1977 y reformada en 2001, "necesita una ampliación" para que se implante un tratamiento terciario que elimine la carga orgánica residual y aquellas otras sustancias contaminantes no eliminadas en los tratamientos secundarios, como son el nitrógeno y el fósforo, ya que además se sitúa en la zona sensible del embalse de Sierra Boyera. Tiene el punto de vertido en un arroyo que termina en el río Guadiato.

Pozoblanco, la "peor depuradora" de Córdoba

También en el Norte de la provincia, pero esta vez en Los Pedroches, se sitúa la que para Ecologistas es la "peor depuradora" de Córdoba. Se trata de la EDAR que da servicio a Pozoblanco, pues "necesita una nueva infraestructura para que se implante un tratamiento terciario que elimine la carga orgánica residual y aquellas otras sustancias contaminantes no eliminadas en los tratamientos secundarios, como por ejemplo los nutrientes".

La localidad tenía revocada la autorización de vertido desde diciembre del año 2007, la cual consiguió de nuevo en octubre del año 2019. El punto de vertido del efluente se sitúa en el río Guadarramilla, en el término de Añora. Hace casi 15 años que la Confederación del Guadiana exigió al Ayuntamiento que acometiera -a la mayor brevedad posible- las obras para ampliar la EDAR, dado que el vertido de aguas residuales "estaba afectando significativamente a la calidad de las aguas del embalse de La Colada, incrementando la eutrofización del mismo".

Sin embargo, la asociación relata que no fue hasta febrero del año 2018 cuando el Ayuntamiento de Pozoblanco solicitó a la Confederación el inicio de expediente de autorización de vertido, adjuntando el proyecto de actuaciones necesarias para la puesta a punto de la depuradora, así como el proyecto de remodelación. Tras una subsanación en la documentación, se otorgó la autorización en octubre de 2019.

Las 33 EDAR que funcionan correctamente

En cuanto a las depuradoras que funcionan correctamente en la provincia de Córdoba, son las que dan servicio a las siguientes poblaciones: Adamuz, Aguilar de la Frontera, Añora-Dos Torres, Belalcázar, Bélmez, Bujalance, Cabra, Carcabuey, Castro del Río/Espejo, Córdoba-La Golondrina, Doña Mencía, El Carpio-Pedro Abad, Espiel, Fernán Núñez, Fuente Obejuna, Hinojosa del Duque, Iznájar, La Victoria, Lucena, Luque, Montemayor, Montilla, Montoro, Monturque, Nueva Carteya, Palma del Río, Priego de Córdoba, Puente Genil, Santaella, Villa del Río, Villafranca de Córdoba, Villanueva de Córdoba y Villaviciosa de Córdoba.

Respecto a años anteriores, Ecologistas denuncia que siguen faltando los datos de Cardeña, Pedroche y Villanueva del Rey, y se proporciona una única muestra de la aglomeración de Palenciana, pues ya dicha infraestructura entró en funcionamiento a finales de año, por lo que se excluye del balance global.