La pintora Melanie Vera reflexiona sobre el paisaje del Guadiato en su primera exposición

El pasado y el presente del paisaje del Alto Guadiato, industrioso, frío, gris, es el leit motiv de la primera exposición de la pintora Melanie Vera (Belmez, 1996), que puede verse hasta el 11 de septiembre en el Ayuntamiento belmezano con una colección de cuadros agrupados bajo el título Carbón y plomo. La muestra recopila pinturas en las que surgen chimeneas, trenes, vías y edificios abandonados bajo pesados cielos de color que remiten a Munch.

Graduada en Bellas Artes por la Universidad de Sevilla, la belmeza reivindica sus "raíces" para ofrecer su punto de vista de lo que significa la vía verde de La Maquinilla, antes instalación al servicio de la industria y ahora recuperada para el senderismo y el ocio. Esta primera colección es también un "homenaje" a "todos los trabajadores mineros de este lugar", como lo fueron su abuelo, sus tíos o su propio padre, como ella misma explica.

El gran objetivo, en suma, es "dar a conocer la historia de este lugar y así atraer más visitantes a la vía verde y que se promueva su cultura y el turismo", porque esta senda que une Belmez y Peñarroya-Pueblonuevo aglutina valores para "ser una de más conocidas a nivel nacional", reivindica.

Con la técnica de óleo sobre lienzo, las pinturas son ventanas abiertas desde las que se divisa un humeante Cerco Industrial casi espectral que recuerda a las escenas de L. S. Lowry; ferrocarriles que surcan el paisaje invernal y edificios mineros bajo los que se agolpan los obreros. Los cielos, que solo en contadas ocasiones son azules, dibujan el castillo de Belmez en la lejanía, cercados o postes de la luz.

Natural de Belmez, Melanie Vera estudió el bachillerato artístico en las Escuela de Arte y Oficios Mateo Inurria de Córdoba y, posteriormente, se graduó en Bellas Artes en la Universidad de Sevilla. Su trabajo puede seguirse en la cuenta de Instagram @mel_arte_nie_2.