El garbanzo de la Campiña de Córdoba aspira a una Denominación de Origen Protegida

Córdoba/El garbanzo que se cultiva en la Campiña de Córdoba aspira finalmente a quedar amparado bajo una Denominación de Origen Protegida (DOP) debido a sus cualidades gastronómicas excepcionales. El grupo operativo que lleva funcionando desde 2022 para lograr un sello de calidad para esta leguminosa acaba de tramitar la solicitud formal ante la Junta de Andalucía y se encuentra a la espera de su concesión, ha confirmado a El Día de Córdoba el propio delegado de Agricultura, Francisco Acosta, quien se ha mostrado convencido de que el visto bueno de la Administración autonómica llegue antes de final de año. El proceso, no obstante, requiere también de los parabienes del Ministerio de Agricultura y, en última instancia, de la Unión Europea al tratarse de una figura con reconocimiento en todo el espacio comunitario.

La nueva DOP, que se llamará Garbanzo Campiña de Córdoba, es el resultado de varios años de investigaciones y pruebas, en las que han participado Cortijo La Reina (Abecera SL), la Agrupación Cordobesa de Agricultores (SAT Córdoba), Asaja Córdoba, Semillas Miluma, la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica y de Montes (Etsiam) de la Universidad de Córdoba, Dolneo Consulting, el Instituto Andaluz de Investigación y Formación Agraria, Pesquera, Alimentaria y de la Producción Ecológica (Ifapa) y la Sociedad Cooperativa Agrícola Olivarera Virgen Del Campo, de Cañete de Las Torres.

Córdoba, la provincia andaluza con más DOP

Pese a que inicialmente el objetivo era solicitar una indicación geográfica protegida (IGP), sello del que ya presume por ejemplo el garbanzo de Escacena del Campo (Huelva), los promotores han optado en el último momento por tramitar una DOP por las conclusiones óptimas de los estudios realizados. La diferencia fundamental entre una IGP y una DOP reside en el vínculo existente entre las características del producto y la zona geográfica, y también en el hecho de que en una DOP todas las fases de producción se realizan en la zona geográfica concreta, mientras que en una IGP no es necesario que se den todas. Y el garbanzo cordobés reúne todas estas características, como ha subrayado el coordinador del proyecto, Íñigo Priego.

De conseguirse, la DOP Garbanzo Campiña de Córdoba será la primera de todo el país que ampare esta legumbre de gran tradición en la historia gastronómica de España, que es además un alimento clave en la dieta mediterránea. El garbanzo, asimismo, se pondría al mismo nivel de reconocimiento que el jamón de Los Pedroches, los vinos de Montilla-Moriles y los aceites de Baena, Priego de Córdoba, Montoro-Adamuz y Lucena. Será la séptima DOP de la provincia, récord en Andalucía.

Un garbanzo mantecoso y de piel blanda

El documento concluye que el garbanzo que se cultiva en la Campiña de Córdoba presenta unas características organolépticas singulares, como son una piel blanda y fina, adherida al grano; gran finura al paladar; albumen mantecoso y poco granuloso y, fundamental, es tierno, esto es, presenta "buen reblandecimiento en la cocción". Como consecuencia de todo esto, su sabor "será siempre agradable", con ausencia de "defectos", ha subrayado Prieto.

Y estas cualidades no son casuales, como plantea el pliego de la futura DOP, pues las investigaciones realizadas han demostrado que "el vínculo que existe entre la calidad del garbanzo y la zona geográfica viene dado principalmente por el tipo de suelo". En otras palabras, en la Campiña de Córdoba abunda el tipo de suelo denominado en edafología como vertisol, también conocido a nivel local como tierras negras o tierras de bujeo. "Son estos famosos suelos arcillosos los que aportan al garbanzo Campiña de Córdoba sus excelentes características organolépticas", incide el coordinador.

"Para demostrar el vínculo existente, en el grupo operativo Garbanzo Campiña de Córdoba hemos realizado un profundo estudio en el que se han analizado en laboratorio muestras de suelo y muestras de garbanzo de numerosas fincas de la campiña. Posteriormente los datos han sido procesados y analizados por un grupo de expertos del sector. Los resultados de dicho estudio avalan la relación o el vínculo existente entre el suelo y el producto cosechado", explica Prieto.

Tres grandes grupos de garbanzos

El pliego reconoce "todas las variedades de garbanzo que ya se cultivan de forma natural en la zona". Se clasifican en tres grandes grupos: los de tipo blanco, los de tipo castellano y los de tipo pedrosillano. El lechoso blanco es el garbanzo andaluz por excelencia; su color es muy pálido, casi blanco, y su relieve es muy marcado. Es el garbanzo de mayor tamaño, tierno y cremoso. Su piel es muy suave, y posee una alta capacidad para infusionarse con el liquido de la cocción, por lo que marida perfectamente con guisos y también resulta muy sabroso consumido en ensaladas frías, platos con verduras y hortalizas.

El castellano (denominado también garbanza) es una variedad muy popular en la cocina española en sus cocidos. Es de tamaño medio o grande, con forma esférica y color amarillento y se caracteriza por el prominente pico curvado.

El pedrosillano, por último, es una variedad de pequeño tamaño cuya denominación proviene de que el origen de su producción tenía su epicentro histórico en el municipio de Pedrosillo el Ralo, en la comarca salmantina de La Armuña, área en la que ya se comercializa bajo la Marca de Garantía Garbanzo de Pedrosillo.

Prieto especifica que, "aunque en la zona predomina el cultivo de la variedad blanco lechoso, hay agricultores que siembran garbanzo castellano o pedrosillano, y también estas variedades reciben los beneficios que les aporta el suelo, y es por ello que también han sido reconocidos".

27 municipios quedarían amparadas por la DOP Garbanzo Campiña de Córdoba

La nueva Denominación de Origen Protegida plantea un objetivo ambicioso, e incluirá a un total de 27 municipios de varias comarcas. Para poder delimitar el ámbito geográfico, ha sido fundamental el apoyo del departamento de Edafología de la Etsiam, ha concretado Prieto. 

En los últimos ocho años, la media de superficie cultivada de garbanzo en Córdoba ha superado ligeramente las 3.500 hectáreas. No, obstante esta cifra se estima que aumente en los próximos años dado que las políticas de la Unión Europea condicionan el pago de la PAC a la siembra de una superficie mínima de leguminosas, entre la cuales el garbanzo se posiciona como una "alternativa interesante", ha explicado el coordinador del proyecto, quien ha destacado que en Córdoba ya existe una industria garbancera propiamente dicha que incluye empresas dedicadas a la limpieza, cribado y envasado de garbanzo para su posterior comercialización, ya sea en graneles o envasado de menor dimensión. "La industria es una aliado clave sin el cual no sería posible comercializar el producto", ha valorado.

Y las previsiones son mejorar los resultados económicos como consecuencia de la nueva DOP: "Será de gran ayuda para aumentar la superficie cultivada. El hecho de que exista una Denominación de Origen Protegida va a generar interés en los agricultores, dado que contarán con el apoyo del Consejo Regulador para crecer en diferentes ámbitos. La DOP velará por la profesionalización del sector, la promoción y difusión de las empresas amparadas con la marca de garantía, la formación de agricultores o la investigación e innovación", ha subrayado Prieto.

La nueva DOP, un "hito" para Córdoba

"El reconocimiento de una nueva Denominación de Origen Protegida es un hito muy especial para la provincia de Córdoba, para la Campiña y para el sector agroalimentario", ha destacado el coordinador del proyecto. "Si nos fijamos en el recorrido histórico de otras denominaciones de origen de referencia en España, como pueden ser La Rioja o Plátano de Canarias, podemos comprobar cómo el con el paso de los años el desarrollo del tejido empresarial ha beneficiado al territorio mediante la generación de empleo, la fijación de población, el reconocimiento social, el turismo y la promoción de una marca vinculada a una zona geográfica", ha planteado.

Córdoba ya cuenta con seis "excelentes denominaciones de origen", y "en todas ellas se ha podido constatar el progreso de los territorios gracias al impulso de estas", ha reconocido. "Por tanto, pensamos que la Denominación de Origen Protegida Garbanzo Campiña de Córdoba sin duda será de gran ayuda", ha concluido.