La iglesia de la Asunción de Castro del Río será sometida a trabajos de conservación

La Comisión de Patrimonio de la Delegación de Cultura ha informado favorablemente sobre las obras previstas para la conservación y mantenimiento de la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción de Castro del Río. La actuación tendrá lugar en la cubierta de la iglesia y abarcarán unos 1.400 metros cuadrados.

Está prevista la retirada de residuos orgánicos, limpieza de canalones, inspección visual de los tejados, colocación y sustitución de tejas, reparación de posibles fisuras, así como limpieza de la zona afectada en su parte interior. Según ha informado el delegado de Turismo, Cultura y Deporte, Eduardo Lucena, se intervendrá igualmente de forma urgente en un paño de cubierta de las construcciones adosadas al ábside recayente en la calle Colegio. En este caso, además de las actuaciones ya descritas, se va a llevar a cabo un desmontaje de la cubierta inclinada, solo en las tejas, con la posterior colocación de las mismas e impermeabilización del faldón de cubierta.

La iglesia de la Asunción de Castro del Río está declarada Bien de Interés Cultural (BIC), en la tipología de Monumento. Se levanta en el lugar más alto del municipio, dentro de la villa, que corresponde al antiguo recinto amurallado y está próxima al castillo. Junto a las dependencias parroquiales, ocupa gran parte de una manzana de forma cuadrangular. El templo preside la plaza de La Iglesia y asoma a otro espacio público destacado, como es la plaza de San Rafael. La estrecha calle Colegio circunda la cabecera de la iglesia y las dependencias parroquiales.

La iglesia es un edificio de tres naves con seis tramos, separadas por arcos apuntados que apean en pilares de sección cuadrangular. Posee una cubierta unitaria de tejado a dos aguas, cabecera triple y capillas laterales en la Nave del Evangelio. A los pies de la nave central se encuentra la portada principal, en la base de una fuerte-torre campanario. Existe otra puerta en la nave de la Epístola.

Interiormente, el templo presenta bóvedas barrocas encamonadas, que ocultan los restos del primitivo artesonado de madera. La cabecera presenta bóvedas nervadas en los ábsides laterales, sustituidas en el central. Tras la cabecera se levantan dependencias menores que colmatan la manzana, ocultando el trasdós de los ábsides. La más valiosa es la sacristía, en dos plantas, así como una torre con espadaña. Al norte del templo se encuentran las dependencias parroquiales, desarrolladas en torno a un patio porticado, resto transformado del claustro original. Destaca el cuerpo en doble crujía, de dos plantas y desván, que abre fachada a la calle Colegio y que responde al tipo de vivienda tradicional de la villa.

Las construcciones más antiguas datan de los siglos XIII y XIV. La iglesia experimentó una importante transformación en los siglos XVI y XVII, ampliándose hacia el oeste con la portada plateresca y la torre. En el XVIII se transforma el interior de la misma, con las bóvedas que le otorgan su fisonomía barroca, y se construye la capilla del Sagrario. Tras la Guerra Civil, se construye la capilla de Fátima y, en los años 70, se desmonta el coro de su ubicación a los pies de la Iglesia.