Visto bueno a la intervención de la muralla almohade del Palacio de Portocarrero de Palma del Río

Patrimonio

Las actuaciones, que se corresponden a la fase tres de un proyecto global, se centrarán en el torreón 3 y el lienzo de la muralla adyacente

La Feria de Artes Escénicas de Palma del Río recibe 830 propuestas artísticas en la convocatoria de 2025

Palacio Portocarrero de Palma del Río
Palacio Portocarrero de Palma del Río / Miguel Ángel Salas

Palma del Río/La Comisión Provincial de Patrimonio de la Delegación de Cultura y Deporte de Córdoba ha dado luz verde a la tercera fase del proyecto de restauración y consolidación de la muralla almohade que rodea el Palacio Portocarrero en Palma del Río. Esta fase se centrará en el torreón 3 y el lienzo de muralla adyacente.

El proyecto contempla diversas actuaciones, como la limpieza de vegetación parásita, la eliminación de elementos sueltos y ajenos a la fábrica de tapial, el sellado de fisuras con mortero de cal hidráulica, el cosido de desprendimientos con lechada de cal hidráulica, la limpieza y sellado de mechinales a bajo nivel, la reposición volumétrica de tapial, la limpieza y reposición de fábrica de ladrillo, la reconstrucción de peldañeado y bóveda de ladrillo sobre escalera, la reconstrucción de cornisas de ladrillo, la reposición de peto y almenado con nueva fábrica de tapial, la limpieza y consolidación del material cerámico de la cubierta, así como la aplicación de consolidante de agua de cal e hidrofugante.

El estado actual del recinto amurallado justifica la necesidad de estas intervenciones, ya que se observa la presencia de suciedad, manchas de humedad, plantas y líquenes, cementos, metales y reparaciones anteriores, además de pérdidas de volumen por erosión o desprendimientos. Los lienzos de muralla adyacentes a la torre presentan importantes pérdidas de masa, especialmente en la cara interior, y todo el remate y almenado se encuentran muy deteriorados. La torre apenas conserva el arranque del parapeto y ha perdido el almenado, mientras que el nivel de azotea está muy erosionado y cubierto de vegetación parásita. La cubierta de la escalera ha desaparecido y la cámara ha sido convertida en palomar, con apertura de huecos en el tapial.

El recinto amurallado está construido en tapial y tiene una altura de entre 6 y 8 metros, con un adarve protegido por almenas. Presenta torres salientes de planta cuadrangular, macizas hasta la altura del adarve. Desde este punto, y a través de un vano situado en el lado derecho, se accede a la cámara, cubierta por una cúpula de media naranja de ladrillo con aperturas laterales en forma de saetera al exterior. Junto al vano de acceso, en el interior de la cámara, se encuentra la subida a la azotea, resuelta con una caja de escaleras en forma de L que discurre por el interior del muro.

El recinto amurallado de Palma del Río y el Palacio Portocarrero están declarados Bien de Interés Cultural (BIC) en virtud de la Ley de Patrimonio Histórico Español y están inscritos en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz (Cgpha) por la Ley de Patrimonio Histórico de Andalucía, contando con un entorno de protección de 50 metros. Además, en el Plan General de Ordenación Urbanística de Palma del Río, el recinto amurallado cuenta con el nivel de protección integral.

Historia y elementos destacados del recinto amurallado

El recinto amurallado de Palma del Río engloba una alcazaba o castillo y una cerca medieval en excelente estado de conservación. Dentro de su perímetro se encuentran edificios de gran valor histórico-artístico, como la iglesia de La Asunción, el antiguo convento de Santa Clara, el Palacio Portocarrero o el Museo Municipal, ubicado en las antiguas caballerizas.

El origen de esta fortificación se remonta a la Alta Edad Media, y fue reforzada por los almohades, quienes construyeron la alcazaba para hacer frente a los ataques de las tropas cristianas. Finalmente, la plaza fue conquistada en 1231. Actualmente, esta fortificación se encuentra integrada en la trama urbana de Palma del Río, y su estructura deriva del período de dominación islámica, aunque gran parte de los lienzos primitivos fueron reconstruidos en época bajomedieval, tras la conquista cristiana.

De la alcazaba o castillo solo quedan en pie unos pocos restos. Originalmente, tenía planta cuadrada, muros de argamasa y cinco torreones cuadrados. La Torre de las Angustias, de planta ochavada y convertida en capilla en el siglo XVIII, se sitúa en el lugar conocido como Puerta Quemada o Arquito Quemado. Esta torre fue la puerta norte del recinto amurallado, con entrada en recodo y paramentos de tapial reforzados con ladrillo en las esquinas. Bordeando la muralla, en la zona oriental, se encuentra la Puerta del Sol o de la Villa, también una antigua entrada en recodo, por la que se accede a la ciudadela medieval.

stats