Una iniciativa plantea reconstruir la Puerta de Aguilar de Montilla con 'crowdfunding'

Sus fotografías adornan multitud de comercios, bares y restaurantes y, aunque omnipresentes en el imaginario colectivo local, son ya numerosas las generaciones de ciudadanos de Montilla que han crecido sin tener la posibilidad de verlos. Ahora, un proyecto amparado por el programa Social Hub e impulsado por Francisco Varo, autónomo del sector audiovisual de 31 años, promueve la reconstrucción de los antiguos arcos de la Puerta de Aguilar mediante la iniciativa Un ladrillo para la historia. El proyecto, en proceso de incubación, ya ha generado un enorme interés en el municipio de la Campiña Sur.

La idea es gestionar pequeñas donaciones económicas a la manera de un crowdfunding y, por una suma que podría oscilar entre los tres y los cinco euros, adquirir alguno de los 12.000 ladrillos que hacen falta para volver a levantar la puerta, como explica Varo. Tras diferentes gestiones en La Rambla, el impulsor de la iniciativa ya ha contactado, incluso, con Todobarro, una empresa radicada en Málaga capaz de fabricar los ladrillos artesanales en color rojo y blanco que hacen falta para reconstruir la arcada.

Debido a la dificultad para ubicarlos donde originalmente se encontraban, al inicio de la calle Puerta de Aguilar, acceso al casco antiguo, la rotonda de la Toba toma ahora fuerza como alternativa. La idea es que puedan verse en perspectiva desde la avenida de la Constitución y, además, indicarían la salida hacia Aguilar de la Frontera, municipio que precisamente les daba el nombre. “Montilla puede volver a recuperar este símbolo”, confía Varo, quien se muestra esperanzado en que el Ayuntamiento dé el visto bueno definitivo a esta iniciativa.

El proyecto constructivo es obra de la arquitecta montillana Mara Portero, quien los ideó años atrás con vistas a situarlos ante el paseo de las Mercedes, donde finalmente se erigió, también por cuestación, la fuente homenaje a San Francisco Solano, patrón del municipio. Frente a los aproximadamente 42.000 ladrillos que se calcula tenían los arcos originales, el proyecto plantea una solución constructiva más económica y viable con un núcleo de encofrado. El presupuesto global, no obstante, aún no se ha definido, dice Varo, quien confía en que la iniciativa salga adelante y poder recuperar así un “símbolo” de Montilla.

Erigidos a últimos del siglo XIX para cerrar la población al final de la calle homónima, esta construcción neomudéjar disponía de tres arcos de herradura, el central de mayor altura. Estaban realizados con ladrillos de dos colores y remate escalonado con almenas de tipo califal. Debido a los problemas de movilidad que causaban –los camiones no podían pasar por debajo–, fueron derribados el 19 de mayo de 1962 tras decidirlo el Ayuntamiento.

El segundo teniente de alcalde y responsable de Desarrollo Local, Manuel Carmona (PSOE), ha detallado que el proyecto forma parte de Montilla Social Hub, un laboratorio de ideas desarrollado en el edificio Solera y donde también luchan por materializarse los proyectos Huronera Producciones (de audiobranding y audiovisual) y MR Álbumes y Cuentos (artesanía de papel y encuadernación). Carmona ha explicado que los tres se encuentran en fase de estudiar su viabilidad.