Los pantanos de Córdoba reciben 2025 con el doble de agua embalsada que hace doce meses

Córdoba/El agua embalsada en los pantanos de la provincia de Córdoba en la actualidad es el doble que la acumulada hace un año. Una buena noticia para el año nuevo que ahora comienza después de varios ejercicios marcados por la pertinaz sequía y de que a lo largo de 2024 se registrasen importantes precipitaciones que llenaron los embalses cordobes. Según muestran los datos publicados por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), de acuerdo al Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH), los pantanos cordobeses se encuentran al 31,66% de su capacidad, es decir, que tienen acumulados 1.051,298 hectómetros cúbicos de agua -hasta el pasado 29 de diembre- por los 3.320,313 hectómetros cúbicos de capacidad total.

Se trata, además, de una cifra bastante importante si se compara con la que los pantanos de la provincia de Córdoba iniciaron el actual año hidrológico el pasado 1 de octubre. Entonces, los embalses cordobeses estaban al 25,89% de su capacidad, es decir, que tenían acumulados 859,495 hectómetros cúbicos de agua. Es decir, que en el último trimestre del año, el agua embalsada ha aumentado 5,7% puntos, lo que en cifras absolutas son 191,803 hectómetros cúbicos más de agua.

A pesar de este notable aumento en la cantidad de agua acumulada, los embalses de la provincia de Córdoba son los terceros que peores registros porcentuales presentan de la demarcación de la CHG, que incluye también Ciudad Real, en Castilla-La Mancha. No obstante, también hay que tener en cuenta que los pantanos cordobeses son los que tienen mayor capacidad de almacenaje de agua de la citada demarcación. Los que menos agua acumulan son los de Granada, que están al 28,70% con 288,639 hectómetros cúbicos, seguidos de los de Jaén, al 29,18% de su capacidad y con 689,012 hectómetros cúbicos almacenado, mientras que en tercera posición se encuentran los cordobeses, con el citado 31,66%.

A continuación aparece la provincia de Huelva, cuyos embalses están al 40,61% de su capacidad, con 123,438 hectómetros cúbicos; los embalses de Sevilla, por su parte, son los que mejores datos porcentuales presentan en Andalucía, ya que se encuentran al 64,47%, si bien, almacena 592,459 hectómetros cúbicos -la mitad que los de Córdoba-, aunque son los que inician el año de la mejor manera en la comunidad. Por su parte, los pantanos de Ciudad Real, incluidos en la demarcación de la CHG, están al 62,77%.

Pantano a pantano

El pantano de mayor capacidad de Andalucía es el de Iznájar, en plena comarca de la Subbética, y que cuenta con 981 hectómetros cúbicos. Además, es el más importante de la provincia de Córdoba en cuanto a su capacidad de abastecimiento, puesto que suministra a toda la zona Sur y aparte de la Vega, hasta sumar alrededor de 300.000 vecinos. Hasta este pasado 29 de diciembre, se encontraba al 22,46%, al acumular 206,651 hectómetros cúbicos de agua; justo al inicio del año hidrológico, estaba al 18,65%, con 171,604 hectómetros cúbicos.

En el caso de pantano de Sierra Boyera, que en 2024 pasó de estar completamente vacío a llegar este pasado verano al 63,58% de su capacidad, con más de 25 hectómetros cúbicos de agua embalsada, se encuentra ahora al 57,50% con 22,697 hectómetros cúbicos de agua, mientras que el 1 de octubre estaba al 54,10% de su capacidad, con 21,356 hectómetros cúbicos de agua almacenada.

Por su parte, el pantano de Guadanuño dispone de 1,328 hectómetros cúbicos de agua embalsada y se encuentra al 81,12% de su capacidad.

El de La Breña –uno de las que más agua descarga para los cultivos de regadío de la zona, pero el que recibe menos aporte de agua por parte del río Guadiato, debido a su bajo caudal– sigue presentando malos datos al igual que al inicio del año hidrológico. Y es que, hasta la fecha, se encuentra al 15,93% de su capacidad con 121,170 hectómetros cúbicos de agua.

En el caso del pantano del Bembézar, los datos del SAIH reflejan que se sitúa en el 55,74% con 182,805 hectómetros cúbicos, mientras que la presa de Guadalmellato tiene 122,057 hectómetros –el 83,28% del total–. El pantano del Yeguas, acumula 97,896 hectómetros (el 48,80%); Martín Gonzalo dispone de 11,995 hectómetros (el 58,54%); el Arenoso, presenta 39,113 hectómetros cúbicos (el 28,84%); San Rafael de Navallana, que abastece a Córdoba capital, dispone de con 55.181 hectómetros cúbicos, el equivalente al 35,27% de su capacidad; el de Vadomojón, está al 16,86% de su capacidad con 24,620 hectómetros cúbicos; Puente Nuevo, con 77,481 (el 27,55%); y finalmente, el embalse del Retortillo, con 26,708 hectómetros (el 43,68%). 

La situación del campo

Por otra parte, el campo andaluz cierra este 2024 con alivio ya que ha sido cercano a lo normal desde el punto de vista hidrológico gracias a las abundantes lluvias que llegaron durante la Semana Santa y tras el verano, lo que ha permitido recuperar gran parte de los cultivos y sentar las bases para una entrada de año con buenas perspectivas de producción si continúan las lluvias.

"Ha sido un año que se ha acercado un poquito a lo normal en gran parte de Andalucía", explica a Efe el secretario general de COAG de Andalucía, Eduardo López, quien advierte de que zonas puntuales de Almería, el altiplano de Granada y el Valle del Guadalhorce son las que más han sufrido una situación de sequía que "no ha resuelto".

López resalta que la "importante" lluvia de Semana Santa recargó los embalses de toda Andalucía a un nivel "que ha posibilitado que los cultivos de primavera y verano de regadío puedan salir más o menos con normalidad", mientras que las precipitaciones de otoño han "ayudado muchísimo", principalmente al olivar y al "desarrollo del fruto de la aceituna".

"Marzo es la llave del año", según describe a el presidente de Asaja Andalucía, Ricardo Serra, quien coincide en que las lluvias del final del pasado invierno sirvieron para "dar un alivio a los pantano y a toda la zona regable" tras un año "muy castigados", por lo que si bien no ha sido 2024 un año totalmente "normal", sí es cierto que "se palió bastante la situación" de importante sequía que sufría Andalucía.

Como tareas para 2025, "el mantenimiento de los cauces de forma racional es fundamental", advierte Serra, quien incide en que la limpieza, además de mejorar embalsamiento de agua, acelerar todas las obras pendientes y recuperar las infraestructuras perdidas por las lluvias "son "tareas pendientes que hay cumplir".

En la misma línea, el secretario andaluz de COAG pone especial énfasis en que se ejecuten "las obras planificadas en los planes hidrológicos de las cuencas" y que precisan de "inversiones púbicas y también privadas" que permitan "incorporar y aprovechar hasta la última gota de agua".

Además, López considera "fundamental" finalizar las "desaladoras planificadas", principalmente en las zonas de Málaga y Almería, mejorar las conexiones y embalses y culminar la modernización del regadío con el principal objetivo de evitar la sobrexplotación de los acuíferos.

Y todo ante un 2025 con buenas perspectivas para el campo andaluz, que espera la relajación de las medidas restrictivas y que se prolonguen las lluvias durante la primera mitad del año para dejar atrás una situación de sequía que tanto ha castigado al sector en los últimos años.