La Policía Local de Puente Genil realiza una campaña especial de control de velocidad en el casco urbano

Puente Genil/La Policía Local de Puente Genil desarolla estos días una campaña de control de velocidad en el casco urbano del municipio gracias a la cesión temporal, por parte de la Jefatura Provincial de Tráfico de Córdoba, de un vehículo equipado con cinemómetro. Esta medida se extenderá hasta mediados de enero con el objetivo de prevenir el exceso de velocidad y mejorar la seguridad vial de todos los pontanenses.

Los controles se desarrollarán en las avenidas principales de la localidad, que soportan una mayor densidad de tráfico, como son los casos de la calle Antonio Elio de Nebrija, carretera de La Rambla, Cuesta del Molino, Avenida de la Estación, calle Industria, calle Nueva y calle Juan XXIII, entre otras. El vehículo cedido cuenta con un sistema avanzado para la medición de velocidad que permite detectar y registrar a quienes sobrepasen los límites establecidos en calles y avenidas. Los primeros controles tendrán un carácter disuasorio o informativo, aunque posteriormente servirán para iniciar los correspondientes expedientes sancionadores a aquellos conductores que superen la velocidad permitida.

El Ayuntamiento de Puente Genil ha aprovechado la ocasión para recordar que respetar los límites de velocidad es fundamental para evitar accidentes y garantizar una convivencia segura en las calles. También desde el Consistorio se ha hecho un llamamiento a la responsabilidad ciudadana para que todos los pontanenses puedan disfrutar de un entorno más seguro. La iniciativa tiene también un carácter preventivo y busca concienciar a la población sobre la importancia de respetar las normas de circulación. Desde el equipo de Gobierno municipal se ha agradecido a la Dirección General de Tráfico, dependiente del Ministerio del Interior, y a la Subdelegación del Gobierno en Córdoba, su colaboración en la cesión del vehículo.

Un fin de año problemático

El comienzo de esta campaña llega en un momento especialmente sensible en la localidad, pues en el tramo final del año se han registrado varios accidentes de tráfico con víctimas mortales. A la peligrosidad de la carretera A-318, con varios puntos negros, como son la propia variante de Puente Genil, el cruce de acceso a la urbanización de la Cañada de la Plata, y el cruce hacia la aldea de la Ribera Baja, lugar en el que fallecieron dos personas en octubre, se le han unido los graves siniestros en pleno casco urbano.

De hecho, a principios de noviembre, una joven de 24 años falleció junto al Parque de Espuny atropellada por un vehículo cuyo conductor se dio a la fuga, y días más tarde, otro joven de la misma edad también perdió la vida al colisionar la motocicleta que conducía con un vehículo en una de las calles del Polígono Industrial del Huerto del Francés. Estos hechos suscitaron la reacción de la ciudadanía, llegando a concentrarse unas 3.000 personas en demanda de mejoras en materia de seguridad vial, algo que motivó la creación de un grupo de trabajo encargado de proponer acciones de mejora en determinados puntos de la población para evitar nuevos accidentes.