Nueva Carteya y Fuente Palmera se unen por la masificación de sus colegios

Nueva Carteya, en pleno Guadajoz, y Fuente Palmera, en la comarca de la Vega del Guadalquivir. Ambas localidad están seperadas por casi 80 kilómetros, pero hay dos cosas que les unen: solo tienen un colegio para sus niños y las aulas de sus centros tienen más pequeños matriculados que lo que marca la actual normativa, que cifra el máximo de escolares en Primaria en 25.

Fue la asociación de padres Monte Horquera del colegio de Nueva Carteya la que dio la voz de alarma justo el día ante de que diera comienzo el curso escolar 2019-2020 –el pasado martes– de que no iba a llevar al alumnado por la eliminación de unidades del centro y por el hecho de que en la mayoría de las aulas del centro Francisco García Amo hay más de 25 alumnos.

Su demanda es que la Delegación de Educación habilite tres aulas, una de Infantil y dos de Primaria. Desde el pasado martes, las familias se han concentrado en la entrada del colegio –con el apoyo del equipo de gobierno municipal, liderado por su alcalde, Vicente Tapia (IU)– cada día para mostrar su rechazo y, además, no han llevado a sus hijos al centro. Ayer fue la última jornada de esta semana de estreno de curso escolar y apenas fueron medio centenar de alumnos de los 463 que están matriculados. Los padres, además, han convocado una protesta la próxima semana ante la sede de la Delegación de Educación en la capital cordobesa.

La lucha de la asociación de madres y padres del colegio Federico García Lorca se remonta al pasado mes de julio, cuando ya alertó del cierre de unidades y de los efectos que eso iba a conllevar en septiembre. Ese efecto no fue otro que en el centro de Infantil y Primaria se incumpla la ratio.

Así, esta misma semana las familias han anunciado que van a denunciar a la Delegación de Educación ante los tribunales por este hecho. Una decisión a la que se va a sumar la asociación Monte Horquera “siempre y cuando no nos den lo que esperamos, que son tres aulas”, según ha explicado a el Día su presidente, Juan Jiménez.

Mientras, la presidenta de la asociación de familias del colegio de La Colonia, Mónica Ruiz, ha destacado la importancia de que ambos colectivos se unan –también van a acudir a la protesta ante la Delegación de Educación prevista para el martes de la semana que viene– y ha indicado que “no se van a conformar” con una unidad.

La posición de la Junta

Las cosas están así, mientras que desde la Junta no han dado respuesta hasta la fecha. Eso si, la delegada de Educación, Inmaculada Troncoso, ya ha asegurado que “habrá aumento de unidades en aquellos cursos en los que la ratio sobrepasa la que está estipulada” y que el el incremento de unidades para el colegio Francisco García Amo de Nueva Carteya se estudiará en base a “criterios objetivos y técnicos exclusivamente”.

Troncoso ha señalado que “la situación está en vías de solución”, pero que hay que esperar a ver qué recursos se adjudican desde la Dirección General de Planificación y Centros y ha recordado que hay más centros educativos de la provincia y la capital que han demandado un incremento de unidades para este curso y “puede que no dé para todas las necesidades” de la provincia, algo que “ha ocurrido siempre”.

La delegada de Educación ha explicado también que desde su departamento se ha “establecido un orden de prioridad” con los centros que tienen necesidad de un aumento de unidades y que se va a atender a estas necesidades en base a “criterios objetivos y técnicos”, yendo primero aquellos centros que cuenten con mayores ratios de alumnos por clase.

Es decir, que se actuará en primer lugar en aquellos centros en los que haya aulas con 28 alumnos, y a continuación las que tengan 27 y, así sucesivamente. La solución, eso sí, llegará una vez que la Consejería de Educación concluya el reparto de cupos de Secundaria para conocer los recursos de los que se disponen para la provincia de Córdoba.