Las obras de recuperación del Castillo arrancan después de años de espera

BELALCÁZAR

La Consejería de Cultura invierte un millón de euros en la actuación, que se prolongará durante 15 meses

El itinerario turístico permitirá ascender hasta la torre del Homenaje

Visita institucional al interior del monumento, en ruinas, ayer por la mañana. / Sánchez Ruiz

Tras años de estado ruinoso, el Castillo de Belalcázar empieza a recuperar su esplendor perdido. El consejero de Cultura, Miguel Ángel Vázquez, visitó ayer las obras recién iniciadas para la recuperación del monumento y su apertura al turismo, en las que la Junta de Andalucía invierte 1.009.239,80 euros y que cuentan con un plazo de ejecución de 15 meses. En concreto, desde el pasado 14 de junio, en este Bien de Interés Cultural (BIC) se están realizando trabajos de consolidación, restauración y puesta en valor de la totalidad del conjunto, lo que incluye el recinto amurallado, la fortaleza en sí los elementos interiores.

El proyecto contempla, en la actual casa de labor, un pequeño centro de recepción de visitantes que contribuirá al conocimiento y difusión del espacio. Además, se mejorará la accesibilidad, recuperando el camino de acceso al Castillo y se creará un itinerario hasta la torre del Homenaje que permita la visita pública del elemento más monumental y emblemático del conjunto.

"Para nosotros, gestionar bien el patrimonio supone una oportunidad, es un elemento diferencial, distintivo, que nos permite recuperar nuestra historia y, al mismo tiempo, generar oportunidades de crecimiento económico y empleo", dijo el consejero. En este sentido, la obra permitirá "atraer a mucho más turismo a Belalcázar y la comarca de Los Pedroches, y será el objetivo que persigue este gobierno: seguir actuando en patrimonio para al mismo tiempo generar oportunidades de desarrollo para los pueblos de Andalucía", concluyó.

Vázquez defendió que "se trata de un ejemplo más de la apuesta de la Junta de Andalucía por la conservación y protección del patrimonio". "El patrimonio de Andalucía es excepcional, un patrimonio que sorprende y que genera admiración en todo el mundo. Nos acaban de reconocer como Patrimonio Mundial por Medina Azahara, y esto es un reconocimiento y un espaldarazo a las políticas de patrimonio que realiza desde hace mucho tiempo la Junta de Andalucía", incidió.

El camino que ha llegado hasta la restauración del monumento, no obstante, ha sido tortuoso. Declarado BIC con la tipología de Monumento en 2009, el Castillo de Belalcázar data del siglo XV y fue adquirido por la Junta de Andalucía en el año 2008 por 1.894.000 euros; desde entonces, se han invertido más de 200.000 euros en actuaciones que van desde el desbroce y la limpieza del recinto hasta proyectos de investigación, pasando por obras de consolidación o cerramiento exterior. El monumento, no obstante, ha permanecido cerrado al público desde entonces por su peligro de derrumbe.

El alcalde de la localidad, Francisco Luis Fernández (PSOE), ya apuntó al respecto que "la rehabilitación del Castillo va a suponer un impulso económico no sólo para Belalcázar , sino para toda la comarca de Los Pedroches y va favorecer a la hostelería y la restauración". La fortaleza, de hecho, es uno de los elementos arquitectónicos más representativos de todo el Norte de la provincia.

Como paso previo a la realización de este proyecto, la Consejería de Cultura ha realizado un estudio sobre la situación del conjunto para conocer con detalle sus necesidades y posibilidades de cara a su recuperación y puesta en valor para la ciudadanía. El monumento constituye un referente de la arquitectura defensiva del siglo XV en la Península; responde a la tipología clásica de estas edificaciones de la Baja Edad Media castellana, de planta generalmente regular y donde de destaca una gran torre, que, con una altura de 47 metros, se considera la más alta de España.

El plan detalla 23 intervenciones para que la fortaleza sea visitable

El programa de obras para hacer visitable el Castillo incluye 23 actuaciones en la fortaleza y su entorno. El proyecto contempla las actuaciones arquitectónicas propias para evitar que el inmueble siga cayéndose y el recinto degradándose, como son, entre otras, las propias de consolidación de juntas en sus piedras -con reposición de mortero y cal- y las relativas a tapar los huecos que se han ido abriendo en todo el monumento. Y va aún más allá, dado que el objetivo de estas obras es la puesta en valor del Castillo y su entorno para una "eficaz visita y conocimiento del patrimonio". Por ello, se realizarán actuaciones con el fin de la "recuperación del acceso integral y puesta en valor de la Torre del Homenaje, desde el patio de armas hasta el terrado mediante la restauración puntual de los niveles que hay en la misma". El proyecto también contempla la restauración de la pavimentación del nivel de acceso a la misma, la ejecución de pasos provisionales en cada uno de los niveles de la torre, que permitan el paso o conexión entre escaleras de acceso de caracol dispuestas en cada planta con los elementos de seguridad necesarios, así como la protección de huecos en todas las plantas de la torre del Homenaje tanto por motivos de seguridad (huecos aljibes, balcones y huecos de acceso) como de protección frente a las aves. En definitiva, las actuaciones de restauración también están pensadas para que los visitantes puedan acceder a esa torre del Homenaje, que es la más alta de la Península. El proyecto también contempla la eliminación de la edificación existente delante del Castillo, una pequeña casa que era la residencia del vigilante del mismo, considerada como "elemento distorsionador y ajeno al patrimonio", y la construcción en su lugar de un centro de recepción de visitantes. Así como incluye la restauración del camino de acceso con "la eliminación de los muros derruidos y la recuperación de la totalidad de su pavimento".