El templo romano de Torreparedones deja ver su grandeza al recuperar su cota original
Baena
Era uno de los edificios en peor estado de conservación de todo el yacimiento arqueológico
Torreparedones, una Marina d'Or romana en plena Campiña
El foro de Torreparedones recupera la forma de época romana
El templo del yacimiento arqueológico de Torreparedones, en Baena, ha recuperado su plataforma para ofrecer una visión más comprensiva de su arquitectura original y lo ha hecho tras las obras de puesta en valor que desde el pasado mes de agosto se han llevado a cabo en el que sin duda es el elemento arquitectónico de mayor valor de esta ciudad romana. El presupuesto total de esta actuación ha sido de 63.000 euros.
El arqueólogo municipal, José Antonio Morena, ha explicado que “la obra ha afectado a uno de los edificios más importantes de la ciudad romana de Torreparedones y que está ubicado en el mismo foro” y ha destacado que, aunque “es el más importante, también era el peor conservado”.
En esta primera fase, lo que se ha hecho es recuperar la cota original del suelo que pisaban los romanos y que se encontraba a unos cuatro metros del foro en sí mismo, así como se han marcado en el pavimento las columnas que rodeaban todo el edificio y también los muros donde estaba la estatua de culto de este edifico que con casi total seguridad era la estatua de Augusto y que se encontró en la curia.
Las actuaciones concretas se han centrado en trabajos previos y de acondicionamiento del terreno, mediante limpieza y nivelación de la cota existente para recuperar el nivel de suelo original del complejo religioso con una capa de engravillado. Los elementos originales han quedado protegidos y separados de las nuevas intervenciones con geotextil y, en el caso de las estructuras murarias, con lámina de plomo en los ordes.
Asimismo, se ha colocado plástico en los muros de la curia y de la tribuna del templo para evitar humedades. Las cimentaciones existentes, muy deterioradas por las labores agrícolas, se han recrecido hasta alcanzar la cota original mediante mampostería utilizando el mismo material, es decir, piedra caliza.
Finalmente, el engravillado previsto como capa de terminación y protección sirve como elemento diferenciador de las alineaciones y ubicación de las estructuras del edificio, tanto de los plintos de las columnas como de los muros de la cella, empleando gravas de diferentes colores y elementos separadores metálicos entre las distintas tonalidades de gravas para evitar que estas se mezclen, y también en los bordes libres de toda la superficie.
Finalmente, se ha realizado un tratamiento biocida. En los laterales de los muros sur y oeste del edificio se ha acumulado tierra en talud y sobre ella se ha colocado una malla antihierbas. Morena ha recordado que en esta zona del yacimiento ya se había intervenido en otros sectores como la basílica, el pórtico norte, la edícula de la Concordia, en la curia y en la propia plaza, pero quedaba por actuar en el en el templo del que tenemos datos de cómo era el edifico hasta el tejado”.
Segunda fase
El arqueólogo municipal ha adelantado que, en una segunda fase, les gustaría “poder recuperar las dos escaleras laterales que existían para subir a este edificio, colocar estas columnas y delimitar la celda y si fuera posible colocar la estatua de Augusto, de Claudio y de Livia” y ha lamentado que “ahora no se puede visitar porque faltan las escaleras de acceso”.
El templo romano de Torreparedones no disponía de una plaza porticada que lo rodeara como solía ser habitual en este tipo de edificios. Era un templum rostratum, esto es, dotado de tribuna delantera frontal elevada y con sendos accesos laterales mediante dos escalerillas, una al norte y otra al sur, y con fachada tetrástila.
La decoración arquitectónica era de piedra caliza amarilla local estucada, a juzgar por los escasos fragmentos recuperados en la excavación. En un primer momento se dudaba si era un templo dedicado a Júpiter, a modo de Capitolio o si, por el contrario, estuvo dedicado al incipiente culto imperial, pero el posterior hallazgo de la monumental escultura sedente que representa a Divus Augustus Pater llevó al profesor Carlos Márquez a plantear la posibilidad de que dicha estatua, encontrada en la curia, fuese la imagen de culto del templo, que debió estar colocada en el interior de la cella.
Las obras pretendían recuperar el templo, probablemente, el edificio más importante de la ciudad romana de Torreparedones, que está ubicado en el lateral oeste de la plaza forense, donde juraban los magistrados sus cargos cuando eran elegidos anualmente en el edificio situado enfrente, la basílica jurídica; en el muro de la tribuna del templo debieron estar colocadas las tablas broncíneas de la ley colonial o municipal.
Con motivo de la visita a estas obras, la alcaldesa de Baena, María Jesús Serrano, ha recordado que la ejecución de esta obra ha sido posible gracias a una subvención de la Diputación de Córdoba, dentro de un programa para poder conservar, reconstruir y rehabilitar el patrimonio que se inició en el año 2021 y que ha ascendido a 44.000 euros.
Serrano ha recordado que cuando llegaron al ayuntamiento en junio de 2023 se encontraron con que este proyecto estaba a punto de perderse porque ya se había pedido una prórroga que cumplía el 30 de septiembre, por lo que tuvieron que sacarlo a licitación y fue adjudicado a la empresa Salmer.
La regidora baenense ha mostrado su satisfacción por haber podido terminarlo “en tiempo y forma y no haber perdido la subvención” y la pedido a la Diputación que “no acabe con estas líneas de subvenciones porque ayudan a la provincia de Córdoba a poner en valor su patrimonio y en el caso de Baena, un yacimiento que es una joya de más de 3.000 años de antigüedad”.
Por ello, la primera edil ha asegurado que van a “trabajar por conseguir alcanzar subvenciones que contribuyan a poner en valor el patrimonio de la localidad” y ha adelantado que entre las actuaciones más inmediatas se encuentran terminar los bordes del foro y parte del castillo, así como “seguir excavando para poner en valor todo lo que hay bajo el olivar de Torreparedones que nos descubrirá muchos tesoros”.
Temas relacionados
No hay comentarios