Un 90% de los trabajadores secunda el primer día de huelga en el campo

El campo y los almacenes de manipulación de fruta estuvieron prácticamente parados durante el primer día de la huelga que convocó el Movimiento de Trabajadores del Bajo Guadalquivir-CTA, lo que supuso una pérdida de 2.000 jornales en un solo día en Palma del Río y cerca de 10.000 en toda la comarca del Valle del Guadalquivir, según indicó el secretario general del sindicato Coordinadora de Trabajadores de Andalucía (CTA), Francisco Moro. La estimación del portavoz del Movimiento de Trabajadores del Bajo Guadalquivir, Pedro Armada, fue de un 90% de seguimiento entre los jornaleros de Palma del Río y Posadas y de un gran número de trabajadores en Hornachuelos y en las localidades sevillanas de Peñaflor y Lora del Río.

Salvo contadas cuadrillas, algún transportista y un par de almacenes, el paro se generalizó en el sector agrícola y la ausencia de incidentes fue la tónica dominante, a excepción de la quema de varios neumáticos en la carretera de Fuente Palmera lo que obligó a cortar esta vía durante unos diez minutos a las 06:30 de la mañana, según explicó la Guardia Civil.

Mientras tanto, el alcalde de Palma del Río, José Antonio Ruiz Almenara, intenta que la huelga finalice, puesto que está previsto que se prolongue hasta el próximo 15 de enero ya que, a su juicio, supone la perdida "de demasiados jornales en plena campaña". Por este motivo, Almenara mantiene abiertas todas la vías de diálogo con los trabajadores, la Subdelegación del Gobierno, la Junta de Andalucía, empresarios y el Servicio Andaluz de Empleo (SAE) para que, entre las administraciones, se pueda llegar al cumplimiento íntegro del convenio provincial del campo, ya que es la principal reclamación de los jornaleros.

Además, ayer se celebró una reunión entre los empresarios palmeños y José Antonio Ruiz Almenara de la que no trascendió dato alguno, aunque el alcalde palmeño destacó que "en un gesto de buena voluntad" éstos decidieron parar los almacenes el primer día de huelga, sin especificar qué harán en las próximas jornadas.

Así, el alcalde de Palma del Río solicitó a los trabajadores de la naranja que le entreguen por escrito todas las propuestas que, según ellos, van encaminadas a solucionar un conflicto que se vive desde hace más de tres campañas ya que, al parecer, al incumplimiento del convenio se suma la actuación ilegal de algunos manijeros.

Por otra parte, el sindicato UGT alzó la voz para informar de que se trata de una huelga "ilegal" respaldada por un sindicato -en referencia a la CTA- "que no representa al sector agrario" y que levanta a los trabajadores bajo unos argumentos que no se solucionan con un paro en el campo. La secretaria general de la federación de industria y de los trabajadores agrarios de UGT, María Trujillo, indicó que su sindicato ha recogido firmas para pedir al Gobierno central que se supriman las 35 peonadas necesarias para acogerse al subsidio agrario ya que la cosecha de cítricos ha bajado un 60% y es muy difícil reunir este requisito. Además, la represente sindical instó a la Subdelegación del Gobierno a que establezca mecanismos de control a través de las inspecciones laborales.

El Movimiento de Trabajadores del Bajo Guadalquivir reclama, entre otros asuntos, que el trabajo en el campo se destine a los jornaleros de la comarca, que se abonen los 46,31 euros por jornal estipulados en el convenio y el plus de transporte, que el pago del salario se efectúe por banco o por talón nominal, que se cumpla la jornada de seis horas de trabajo diarias y que se comunique todos los días trabajados a la Seguridad Social. Los jornaleros también exigen la creación de una bolsa de trabajo controlada por el SAE.

El secretario general de CTA informó de que "los empresarios tienen en sus manos acabar con el paro" siempre y cuando accedan a negociar a través del Sercla -Sistema extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales de Andalucía- con el comité de huelga y acepten el cumplimiento del convenio provincial del campo, así como la elaboración de un censo de trabajadores agrícolas controlado por el Servicio Andaluz de Empleo. De esta manera, explicó Moro, el documento que firmen ambas partes tendría respaldo legal.

La asamblea de trabajadores celebró que ayer la Guardia Civil detuviera en la finca sevillana de Villalón -próxima a Peñaflor- "al primer" manijero que actúa de forma ilegal con las cuadrillas. Según precisó, Pedro Armada "salió esposado del tajo" y pasó a disposición judicial en Posadas.