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El paso de la borrasca Nelson y las lluvias caídas en las dos últimas semanas no es que hayan obrado el milagro para que la sequía desaparezca, pero sí que han dejado en mejor situación a los pantanos de la provincia de Córdoba. Gracias a estas constantes precipitaciones, los embalses cordobeses han logrado recoger gran cantidad de agua y se encuentran ya al 31,35% de su capacidad.
Según los datos actualizados por el Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH) de la Cuenca del Guadalquivir, los embalses de su demarcación acumulan ya 1.040,7 hectómetros cúbicos de agua de los algo más de 3.320 que tienen de capacidad. Se trata de un incremento porcentual más que elevado respecto al pasado 11 de marzo, cuando estaban al 23,1%; es de decir, que en apenas 20 días se ha registrado un incremento de más de 8,2 puntos porcentuales.
Si se echa la vista atrás, al inicio del año hidrológico, el pasado 1 de octubre, los pantanos cordobeses de la Cuenca del Guadalquivir estaban al 14,32%, por lo que en estos seis meses, han crecido 17 puntos. Por ejemplo, a finales del pasado mes de enero estaban a solo el 15,5% y acumulaban apenas 515,643 hectómetros cúbicos frente a los 1.049 actuales.
El pantano de Iznájar, que es el más grande de Andalucía en cuanto a su capacidad -es de 981 hectómetros cúbicos-, se encuentra actualmente al 23,4% de su capacidad (215,6 hectómetros cúbicos), cuando a finales de enero estaba al 17,89% (164).
En el caso del embalse del Guadalmellato, que abastece a capital cordobesa, ha pasado de estar entonces al 28,92% (42 hectómetros) a 65,5% (96,137), mientras que el de San Rafael de Navallana, también en la capital, ha aumentado su agua embalsada al pasar del 41,84% (65) al 60,5%% (94,6).
Por su parte, en la zona del Alto Guadalquivir, los pantanos del Yeguas, el Arenoso y el Martín Gonzalo también han captado una gran cantidad de agua en este periodo y tienen acumulados 133,5, 76,750 y 10,973 hectómetros cúbicos respectivamente.
El pantano de Sierra Boyera, que llegó a secarse en la primavera del año pasado -y provocando, además, que el agua que llegaba a 80.000 vecinos de las comarcas del Alto Guadiato y Los Pedroches fuese declarada no apta para el consumo humano-, tiene acumulados ya 19,519 hectómetros cúbicos de agua gracias a las lluvias de las últimas semanas y se encuentra casi al 50% de su capacidad. Este más que notable aumento se debe, en gran parte, a las fuertes precipitaciones registradas entre el Jueves y el Viernes Santo, ya que esta zona Norte de la provincia de Córdoba cayeron más de 100 litros de agua.
Ha sido tanta el agua que ha caído en esta Semana Santa que, por ejemplo, el pasado Jueves Santo Cardeña acumuló hasta 72 litros por metro cuadrado, según los datos oficiales de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), que mantenía entonces a la provincia en alerta amarilla. En el aeropuerto, la estación que mide la capital cordobesa, el registro fue de 51,6 litros por metro cuadrado.
Según los últimos datos de la Aemet, este pasado viernes Hinojosa del Duque fue el municipio de la provincia de Córdoba donde más llovió, al recogerse 52,7 litros por metro cuadrado, seguido de Fuente Palmera, con 42,6, y Valsequillo, con 32,4.
Por su parte, el pantano de La Breña embalsa en la actualidad 168,6 hectómetros cúbicos, mientras que hace apenas 20 días tenía casi 134 hectómetros cúbicos.
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