Un vino dulce en el Olimpo

El Don Px Convento Selección se encuentra ya en el Olimpo de los vinos. La calificación con cien puntos de este producto de las bodegas Toro Albalá, de Aguilar de la Frontera, por parte del crítico Robert Parker, el más influyente en el mundo del vino, ha supuesto un espaldarazo para todos los productos de la Denominación de Origen Montilla-Moriles y una campaña de promoción "sin precedentes". "Estamos desbordados. El teléfono no para. Llaman distribuidores de todo el mundo", resumía esta semana con orgullo el gerente de la bodega aguilarense, Francisco José Muñoz. Su pedro ximénez es ya el mejor vino dulce del mundo, por delante del más conocido moscatel, del húngaro Tokaj o del Oporto. Las tierras donde se producen estos últimos están declaradas Patrimonio de la Humanidad por parte de la Unesco.

Resultado de la cosecha de 1946, del Don Px Convento Selección existen sólo 4.500 botellas: "Esto no es una fábrica de Coca Cola", bromea. En España, es difícil de encontrar -sólo está disponible en algunas tiendas gourmet- y su precio puede rondar los 200 euros; fuera de nuestras fronteras, donde la demanda de este tipo de productos es mayor, se llega a pagar hasta 600 euros por uno de esta categoría. Como la mayoría de px del marco, se trata de un vino dulce "de mucha densidad". Lo distinguen sus matices de café torrefacto, resultado de su envejecimiento en la bota, con toques ligeros de canela y de miel. "Es muy denso, muy oscuro, excelente para acompañar confituras, chocolates muy fuertes y muy puros o quesos con hierbas aromáticas", describe Muñoz.

En los últimos días, tras la salida al mercado de la célebre publicación The Wine Advocate, el gerente ha atendido llamadas de teléfono de medios de comunicación de todo el mundo, incluido The New York Times. "Es complejo explicar cómo es un vino dulce de Montilla-Moriles y recrear todos sus matices. Lo que sí podemos afirmar con convencimiento es que en Córdoba tenemos el mejor vino dulce del mundo. Y han tenido que venir de fuera para decírnoslo", lamenta.

Toro Albalá exporta sus productos a 36 países de todo el mundo y mantiene una oficina en Taiwan que se encarga de vender los caldos en Asia. China, precisamente, es un mercado emergente para estos productos. Desde hace 14 años, la bodega aguilarense también exporta a Estados Unidos y desde hace 12, a Japón. Nada, sin embargo, comparado con la avalancha de peticiones a raíz de la valoración de Parker. "Nos ha llamado un inglés para pedirnos toda la producción y 17 importadores se han puesto en contacto con nosotros. Esto es importantísimo para todas las bodegas de la zona", destaca. "Estamos pletóricos, llenos de alegría. A corto plazo, esto ayudará a que la bodega aumente este año su facturación, pero lo importante es a largo plazo. Nuestro nombre y el de la comarca vinícola se conocerá más a partir de ahora y facilitará el trabajo de todos", destaca. "Es un antes y un después, un reconocimiento importantísimo para el empleo. No podemos olvidar que la uva pasificada genera mucha mano de obra", recuerda el gerente.

El Don Px Convento Selección ha envejecido durante décadas en botas de la bodega principal, en Aguilar de la Frontera, y de la instalación de Moriles. "Cuando tenemos una cosecha de calidad excepcional -destaca- reservamos cinco botas para el futuro". Esa forma de entender el mundo del vino les ha dado de manera repentina un renombre internacional que -asegura Muñoz- estaban convencidos de que llegaría en algún momento. Aunque, siguiendo el refrán, nadie es profeta en su tierra: "La hostelería de Córdoba no colabora nada con los vinos de Montilla-Moriles. La venta es muy baja y hay restaurantes a los que, incluso, parece que no les interesa tener pedro ximénez en sus cartas".

El Don Px Convento Selección no es el único vino de la DO que ha entrado en el cielo de los mejores vinos del mundo por gracia de Parker, pues otros dos de los diez primeros productos de su ranking proceden del marco: Pérez Barquero 1905 Amontillado Solera Fundacional (99 puntos) y Pérez Barquero 1905 Pedro Ximénez Solera Fundacional (98 puntos). Montilla-Moriles también cuenta en dicho ranking con tres de los ocho vinos calificados con 97 puntos: Alvear Pedro Ximénez Solera 1830, Pérez Barquero 1905 Oloroso Solera Fundacional y Bodegas Toro Albalá Don Px Reserva Especial.

La producción de px, sin embargo, apenas supone un 15% del volumen de facturación en Montilla-Moriles, según los datos del Consejo Regulador. Y lo más llamativo es que el 90% se vende a otras zonas productoras, como Jerez de la Frontera y Málaga, por lo que sólo el 10% restante se envasa. "Es un vino excelente, es nuestro mejor embajador, pero es caro", asume el presidente de la DO, Javier Martín. Ahora falta que los vinos dulces se pongan de moda: "Los hábitos del consumidor son muy cambiantes", resume Martín.