Actuar a tiempo en diabetes ayuda a evitar complicaciones

Pacientes

Dos expertos implicados en el abordaje de la diabetes desde distintos ámbitos analizan los retos que plantea esta enfermedad

Diagnosticar, educar y tratar a tiempo es esencial para no sufrir problemas asociados

La prevención es necesaria ya que, al ser silenciosa, la diabetes muchas veces no se visibiliza hasta que aparecen síntomas graves. / Archivo
Ramiro Navarro

19 de junio 2021 - 12:08

La diabetes tipo 2 es una enfermedad en la que los niveles de glucosa o azúcar en la sangre son demasiado altos. La insulina, una hormona, ayuda a que la glucosa ingrese a las células para brindarles energía. En las personas con diabetes, el cuerpo no produce suficiente insulina o no la usa bien. “La diabetes tipo dos supone una pandemia de nivel global. Las cifras crecen cada vez más en el primer mundo, pero también en países de ingresos medios por el incremento exponencial de la obesidad y el exceso de peso. Las cifras son cada vez más desadelantadoras”, explica Cristóbal Morales, especialista en Endocrinología del Hospital de Día de Diabetes y de la Unidad de Investigación del Hospital Universitario Virgen Macarena, de Sevilla.

Además, “vivimos un momento especial en el que la situación del Covid ha impactado notablemente en la salud metabólica”. Según explica el experto, el sistema sanitario está preocupado por aquellos pacientes con diabetes tipo 2 y los efectos secundarios que el confinamiento haya podido causar. “Estar en casa ha significado sedentarismo y disminuir la actividad física, lo que puede alterar su control glucémico. De hecho, ya han salido editoriales en The Lancet que advierten que esta época poscovid es un momento importante para que los sistemas inviertan en salud cardiometabólica”.

Prevalencia

Un 14% de la población sufre diabetes. Su incidencia crece ligada al aumento de la obesidad

Por otro lado, desde el punto de vista del diagnóstico, la pandemia también ha afectado, retrasando la detección de muchos casos. En opinión, del doctor Morales, “el sistema se ha visto obligado a atender a lo urgente como debía ser y la gente por miedo o por imposibilidad a dejado de ir al médico en muchos casos. Ya estamos enfrentándonos a un incremento en el diagnóstico. Estamos viendo ya mucha diabetes tipo 2 nueva y estamos viendo también a pacientes que ya estaban diagnosticadas, pero han empeorado su control en los últimos meses”.

Esto corre de riesgo de incidir en las complicaciones. Según afirma la doctora Juana Carretero Gómez, del Servicio de Medicina Interna del Hospital de Zafra, Badajoz, “cuanto antes se haga el diagnóstico y cuanto antes el paciente esté en objetivos y en rango, consiguiendo un estilo de vida saludable y perdida de peso, más difícil es que aparezca la patología cardiovascular y, si aparece, que sea lo más tardíamente posible. Cuando los médicos diagnosticamos la diabetes, generalmente el daño arterial y cardiovascular lleva mucho tiempo produciéndose. Cuanto antes diagnostiquemos, antes podremos prevenir el desarrollo de la enfermedad y sus complicaciones”.

En su ámbito, el de la Medicina Interna, hasta un tercio de los pacientes ingresados tiene diabetes previamente diagnosticada. “Es prevalente es nuestro ámbito y es transversal ya que no es técnicamente la diabetes lo que los ha llevado al hospital. Es condición transversal en pacientes que vemos habitualmente con enfermedad cardiaca, ictus, enfermedad renal u otra patología”, explica la doctora.

Riesgos

Un 50% de los eventos cardiovasculares tienen su origen en la diabetes tipo 2

Para Cristóbal Morales es esencial poder hacer un diagnóstico lo más temprano posible porque “si al paciente desde el principio se le traslada la información adecuada, recibe la educación diabetológica y se le prescribe la terapia adecuada, el paciente va a vivir una vida plena, con calidad de vida y con mucho menor riesgo de sufrir complicaciones de la diabetes que en la mayoría de los casos afectan en gran medida a la calidad de vida del paciente”.

La doctora Carretero hace hincapié en que el 13% de la población padece diabetes y que la obesidad abdominal afecta al 70% de la población . Por eso, aboga por realizar una búsqueda activa del paciente diabético. “En esa búsqueda el rol clave es Atención Primaria, donde el personal médico y de enfermería puede detectar e informar, pero también es posible mejorar el diagnóstico con la implicación de profesionales como los farmacéuticos. “Desde la farmacia se pueden hacer test y cuestionarios que pueden orientar para testear el riesgo y animar a ir al médico para asegurarse”, subraya la especialista.

Hasta un tercio de los pacientes ingresados en Medicina Interna tiene diabetes previamente diagnosticada

Respecto a las complicaciones de la enfermedad, para el doctor Morales son “el drama de la diabetes”. Según comenta el experto, una persona puede estar muchos años de su vida sin saber que tienes el azúcar alto hasta que surgen las complicaciones. “Las complicaciones son varias y pueden tener origen microvascular, que va desde la ceguera o la retinopatía diabética, que es la principal causa de ceguera en el mundo occidental, pasando por le enfermedad renal o la neuropatía; o responder a alteraciones de lo grandes vasos que serían la cardiopatía isquémica, el ictus, la enfermedad cerebral y otras complicaciones como la esteatosis hepática no alcohólica o enfermedad del hígado”, explica el doctor. “Por eso es esencial el abordaje preventivo y poder puede frenar la progresión natural si empezamos a tratar antes de forma adecuada”, subraya.

La prevención a través de pruebas de glucosa en campañas de concienciación permite detectar más casos. / Archivo

De hecho, la relación entre las complicaciones y el tiempo de actuación es importante a largo plazo. “Si somos conscientes del factor de riesgo cardiovascular que supone la diabetes podemos mediante ecografía ver el daño o disfunción en el corazón o ver las placas de ateroma que se forman en las arterias. En ese momento es cuándo hay que prevenir y, además de la medicación para la diabetes, estudiar terapias o intervenciones que puedan prevenir la aparición de ictus o insuficiencia cardiaca. La diabetes es responsable de casi tres de cada cinco casos de insuficiencia cardiaca y provoca hasta el 50% de los eventos cardiovasculares”, reflexiona la doctora Carretero. Por eso, poder tratar a tiempo la diabetes permite salvar muchas vidas ya que “si actuamos en las primeras fases, evitamos problemas graves y mortalidad”, destaca la doctora.

Un horizonte optimista pudiendo cambiar el curso de la patología

Para el doctor Morales, el futuro es optimista y es posible albergar muchas esperanza. “La llegada de nuevas soluciones y tecnologías nos permiten mejorar el cuidado de las personas con diabetes. La telemedicina y su capacidad de apoyo crecerá y la innovación terapéutica también aportará muchas oportunidades”. Por eso, el endocrino destaca la importancia de intentar controlar la diabetes desde el inicio y trabajar en equipo ya que “ganar años de vida y evitar complicaciones son dos objetivos que se pueden conseguir”. Según explica, ya hay evidencia que demuestra que tenemos opciones para perder peso, que conseguimos que esa diabetes pueda remitirse y tenemos fármacos que cambian el curso natural de la enfermedad y evitan las complicaciones”, subrayó.

Poner al paciente en el centro del sistema

A la hora de analizar los distintos avances que a medio y corto plazo ayudarán a tratar mejor la diabetes, la doctora Carretero cree que “el principal avance que le podemos ofrecer a la persona con diabetes es poner al paciente en el centro del sistema y que se establezcan unos planes integrales, como el que existe en Andalucía, que de verdad diseñe el proceso de una manera armonizada e integrada que establezca un plan de tratamiento y seguimiento del paciente”. Asimismo, el uso de algoritmos ayudará a planificar el alta con tiempo teniendo en cuenta todas las patologías. Como innovaciones que han mejorado la calidad de vida de los pacientes, la experta destaca los sistemas de monitorización de la glucosa y la llegada de nuevos fármacos que han ido aportando más calidad de vida a los pacientes, como el primer tratamiento oral con GLP-1 para la diabetes tipo 2.

Seis claves para mejorar la atención a la diabetes

El estilo de vida como mejor herramienta La diabetes tipo 2 es llamada la pandemia silenciosa del mundo occidental y el aumento de su incidencia está vinculado al sedentarismo y la obesidad. Por ello, una alimentación equilibrada y un estilo de vida saludable son las mejores herramientas para prevenir la enfermedad.

DiagnósticoDetectar a tiempo significa actuar antes El diagnóstico precoz permite actuar a tiempo, evitar complicaciones e iniciar lo antes posible un tratamiento adecuado. Así es factible cambiar el curso natural de la enfermedad y evitar afecciones cardiovasculares, hepáticas o de otro tipo.

Patología silenciosaHay muchos casos no diagnosticados. El problema de la diabetes tipo 2 es que en muchas ocasiones no aparecen síntomas hasta que ya existe un daño. Los especialistas defienden la búsqueda activa, bien a través de la Atención Primaria o en el seguimiento de los pacientes ingresados especialmente por causas cardiovasculares.

Relación con otras patologíasLa diabetes puede causar problemas como ceguera o retinopatía, patología renal, neuropatía, cardiopatía isquémica, ictus, enfermedad cerebral y otras complicaciones como la esteatosis hepática no alcohólica.

OptimismoEs posible vivir con calidad de vida. Si a la persona con diabetes, desde el principio, se le traslada la información adecuada, recibe la educación diabetológica y se le prescribe la terapia adecuada, el paciente va a vivir una vida plena, con calidad de vida y con mucho menor riesgo de sufrir complicaciones.

El momento de actuarLa pandemia de Covid-19 afecta a la diabetes. Los imprevisibles cambios en el estilo de vida que ha supuesto la pandemia han afectado a la alimentación, a los niveles de sedentarismo y han frenado la actividad física de muchos personas con diabetes .

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último