Emilio González: "Sin el Cristo de Gracia y su Santa Madre me resultaría imposible pregonar nuestra Semana Santa"
Entrevista al pregonero de la juventud de Córdoba
El pregonero de la Juventud de Córdoba 2024 considera que "los nervios son fruto de todo el esfuerzo que ha conllevado el pregón"
"Creo que la juventud tiene hambre de hacer y sed de querer a Dios", apunta antes de una disertación que será este sábado a la 13:00 en la iglesia de la Merced
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La iglesia de la Merced acogerá este sábado a la 13:00 el pregón de la Juventud, acto organizado por la Agrupación de Cofradías de Córdoba y que correrá a cargo este año de Emilio González, hermano de la hermandad del Cristo de Gracia. Presentado por Javier Romero Pérez y con los sones musicales de la Agrupación Musical Cristo de Gracia, el pregonero, a sus 21 años -estudiante de Derecho y ADE en la Universidad de Córdoba-, atiende a el Día antes de una disertación en la que "lo que realmente se diga tenga su valor, evitando palabras vacías y dar rodeos innecesarios, tratando de calar con el mensaje y buscando que cuando se termine el acto le haya aportado algo positivo a quien haya asistido, algo que le haya hecho reflexionar y, sobre todo, ganas de querer a Dios".
-¿Cómo recibió la noticia de que iba a ser el pregonero de la Juventud?
-Me alegra mucho que me hagas esta pregunta porque creo que es un recuerdo muy bonito que guardaré siempre como comienzo de este camino. Dio la casualidad de que me encontraba en el coche y me saltó una notificación en el móvil, la cual me extrañó porque no tenía guardado el número. Al aparcar y leer "Emilio, ¿te puedo llamar?", sentí algo que me decía que iban a ser buenas noticias. Y tanto que lo fueron. No llegué a sopesar la noticia y ponerla en perspectiva hasta pasado un buen rato.
-¿En qué se ha inspirado para este pregón?
-Realmente no ha sido una única inspiración, sino más bien un pilar: el amor a Dios. A partir de ahí, comencé a construir y construir, aunque me conllevó un tiempo barajar estructuras, charlar con jóvenes de otras cofradías, jóvenes que creen en Dios pero reniegan de la Iglesia y un largo etcétera para tratar de plasmar el sentimiento de la juventud hacia nuestra Semana Santa y hacia nuestra propia fe.
-¿Cómo será el pregón que va a realizar este sábado?
-He centrado todo mi empeño en tratar de que sea un pregón donde lo que realmente se diga tenga su valor, evitando palabras vacías y dar rodeos innecesarios, tratando de calar con el mensaje y buscando que cuando se termine el acto le haya aportado algo positivo a quien haya asistido, algo que le haya hecho reflexionar y, sobre todo, ganas de querer a Dios.
-¿Tendrá algún detalle de su titular?
-Bueno, hablar de una imagen siempre es algo delicado y profundo, más aún si es hacia quien entregas tu fe para llegar a Dios y María y, como no podía ser de otra manera, no podían faltar este sábado en mi pregón. Sin el Santísimo Cristo de Gracia y su Santa Madre me resultaría imposible pregonar nuestra querida Semana Santa.
-¿De dónde sale tanto fervor cofrade?
-Esta pregunta siempre hace que me sienta orgulloso de ser quien soy, y sobre todo de ser hijo de quien soy. Desde bien pequeño, mi padre me enseñó a querer al Señor a través de Nuestro Titular, y si bien puede sonar a cliché, no concibo mi vida si mi padre no me hubiese inculcado este sentimiento y estos valores. Ahora que soy un poco más mayor, aun siendo joven, veo cómo es algo que sigue pasando de padres a hijos, de abuelos a nietos, algo que se rompe en el tiempo de los años y que por mucho que cambia y evoluciona la vida, este sentimiento queda perenne en nuestra sociedad más sano que nunca.
-¿Qué significa para usted la hermandad a la que pertenece?
-Dicen que cada Hermandad, como cada familia, es un mundo. No podría resumirlo mejor, pues para mí Hermandad y familia son dos realidades que fundamentalmente se diluyen en la práctica. Seguramente todos los que lo lean compartirán la misma opinión, pues como en las familias hay sitio para todo: cariño en los días malos, nervios en los días grandes, luz en los días grises... Pues, al final del día, somos eso mismo que nos da nombre: hermanos.
-¿Cómo se encuentra antes del pregón? ¿Hay nervios, entusiasmo o un poco de todo?
-Te mentiría si te dijera lo contrario. Hay nervios, entusiasmo, ilusión, incertidumbre y sobre todo, muchas ganas de pregonar la Semana Santa desde nuestro enfoque joven. Sin embargo, creo que los nervios son fruto de todo el esfuerzo que ha conllevado el pregón y la inquietud más bonita del mundo que causa el poder poner en valor nuestra tierra y su Semana Santa.
-¿Cómo está la juventud en el mundo del cofrade?
-Desde mi punto de vista, tras hablar como he comentado con muchos jóvenes cofrades de diferentes hermandades, creo que la juventud tiene hambre de hacer y sed de querer a Dios. Está buscando su sitio, pidiendo la venia como diríamos nosotros, y me alegra a la vez ver y oír cómo se está avanzando de la mano, sobre todo desde los grupos jóvenes, con la formación. Creo que vamos por buen camino, pero nunca tenemos que darnos por satisfechos, pues, ¿qué aportaríamos si no fuésemos una juventud inquieta?
-¿Qué espera de la Semana Santa de este 2024?
-Para la Semana Santa de este año solo espero y deseo una cosa, que Dios y su Madre puedan procesionar por las calles para acercarlos a quienes pasan meses sin verlos, bañando a Córdoba con la Gracia de Dios y la Misericordia de María. Espero que podamos disfrutar de una gran Semana Santa libre de contratiempos y llena de fe, de fervor, de ilusión y, por qué no, de demostrar que los jóvenes queremos a Dios.
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