"Experimentar miedo ante la Selectividad no indica que algo esté yendo mal"

Nervios, tensión, incertidumbre, miedo. El examen de acceso a la Universidad, la Selectividad de toda la vida, convertida en PEvAU, puede considerarse como uno de los primeros episodios personales, y 'profesionales' (en este caso en la rama educativa) en los que uno siente la presión de saber que durante unas horas se puede estar dilucidando buena parte de tu futuro.

Sí, es cierto que la vida es un camino en el que siempre estás a tiempo de cambiar de recorrido y que nunca se saben las circunstancias y el lugar en el que encontraremos lo que buscamos, pero estas pruebas de Evaluación de Bachillerato para el Acceso a la Universidad representan tres días de intensos exámenes que suelen generar estrés y ansiedad en los estudiantes.

Más de 47.800 andaluces se examinarán este año de la prueba de acceso a la Universidad. Bastante bien preparados la mayoría y con todo su expediente aprobado, la aspiración pasa por alcanzar la calificación necesaria para seguir estudiando aquello para lo que tienen vocación o tener la opción de formarse en las profesiones que consideran con mayores salidas profesionales.

Hasta que lleguen los días 15, 16 y 17 de junio el cosquilleo en el estómago, los toboganes emocionales ante cualquier detalle (conversación con compañero, asignatura dominada...) son normales, pero hay otros aspectos que se pueden 'trabajar' en casa para afrontar la prueba con el estado de ánimo adecuado, consiguiendo que tu cerebro termine proyectando el conocimiento asimilado en el momento exacto que lo necesitas.

Consejos para superar el miedo a la Selectividad

Para afrontar correctamente este periodo y que los nervios no afecten al rendimiento académico, Joaquín Mateu Mollá, doctor en Psicología Clínica y de la Salud, fundador del Instituto Valenciano de Psicología Sanitaria y docente del Grado en Psicología de la Universidad Internacional de Valencia, ofrece una serie de consejos para superar el miedo a la EBAU. "Los exámenes de la EBAU suponen un reto por el que debemos transitar con el objetivo de alcanzar metas personales y estudiar aquello que realmente nos apasiona" explica Mateu.

1. Naturalizar el miedo y la ansiedad: Sentir miedo no es ni malo ni quiere decir que nos sepamos peor el contenido que debemos estudiar ni mucho menos representa que vayamos a hacer un mal examen. Si embargo, un miedo mal gestionado sí puede afectar en el estudiante. Hay que naturalizar el miedo y vivir los exámenes como una experiencia más de nuestras vidas.
2. Es fundamental comer de formar y dormir de forma saludable. Lección dormida, lección aprendida. Cada vez que dormimos de forma relajada nuestro cerebro se encarga de retener la información relevante. Trasnochar para recuperar el tiempo perdido no es la solución en este sentido. Tan importante como descansar bien resulta alimentarnos de forma saludable y mantener nuestra rutina habitual en las horas previas a los exámenes.
3. Mantener una actitud positiva. Ayuda mucho a conseguir los resultados deseados tener una actitud positiva a la hora de afrontar los exámenes. Tener miedo o incertidumbre es normal, pero anticiparnos antes posibles consecuencias negativas cuando aún no se han producido únicamente lo que hace es aumentar las opciones de que esas consecuencias negativas se produzcan. La recomendación de Mateu Mollá se centra en "confiar en las opciones y destrezas, valorar el camino recorrido y ser justo con el trabajo realizado".
4. Buscar tiempo para la relajación y el ocio. Los exámenes son, sin duda alguna, el objetivo número 1 durante los próximos días para los estudiantes, pero tan malo es no estudiar como hacerlo de forma exagerada. Hay que buscar tiempo para la relajación y el ocio. Introducir algunos minutos entre estudio y estudio de diferentes asignaturas para hacer algo de deporte, salir a hacer la compra o ver una serie o película, además de aprender técnicas de respiración para esos momentos de tensión antes y durante la prueba. "Este punto de equilibrio es el más adecuado para que el rendimiento se mantenga a nivel óptimo mientras seguimos prestando atención a nuestra salud mental”, asegura el experto.
5. Compartir las emociones con amigos y familiares. Es importante saber desahogarse en el momento adecuado. Reservar algo de tiempo al día para compartir con amigos y familiares la evolución en el estudio, los aspectos que más nos cuestan o aquello que más nos preocupa de cara a las pruebas que estamos a punto de afrontar. Enfrentarte al miedo sin reconocerlo lo único que puede hacerlo es acrecentarlo.